ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

DE LA FE EN LOS JUECES


Enviado por   •  1 de Diciembre de 2015  •  Apuntes  •  3.216 Palabras (13 Páginas)  •  123 Visitas

Página 1 de 13

2014

UCAD UNIVERSIDAD

ALUMNO: JORGE LUIS VAZQUEZ MARTINEZ

PROFESOR: MIGUEL ANGEL SARMIENTO

MATERIA: DERECHO PENAL

TERCER CUATRIMESTRE

[EL LOGIO DE LOS JUECES]

CAPITULO I

DE LA FE EN LOS JUECES

PRIMER REQUISITO DEL ABOGADO

En este primer capítulo el autor da a conocer al abogado o al principiante, que no se desilusione, que no tenga la idea de que no existe la justicia, menciona que la justicia es necesario serle fiel: como todas las divinidades, se manifiesta solamente a quien cree en ella.

También menciona que un abogado cuando litiga por primera vez ante a un tribunal, no debe llegar con la idea de que todo es corrupto, que la justicia solo es una ilusión, que las personas con influencias tienen todas las de ganar. Es cuando da a conocer el primer caso de un abogado en cual se encuentra contra otro abogado el cual es conocido como el príncipe del foro, ya que sus redacciones son perfectas, tiene diversas amistades el cual lo coloca como inalcanzable, desde antes de ver la sentencia sabe que la tiene perdida, es cuando casi como un milagro al ver la sentencia la gana, es por ello que dice que si existe la justicia.

Que aunque te encuentres con un abogado ingenioso, no hay que competir de la misma forma con él ya que de principio lo tendría perdido, si no hay que hacerle ver al juez la inferioridad que hay, y hay veces cuando te encuentras jueces de corazón noble, y favorecen al abogado inferior.

También hace mención que a veces la sentencias distadas por los jueces no solo son los pensamientos de ellos mismos y de los cuales plasman, muchas veces tiene mucho valor otras cosas o experiencias que hayan pasado los jueces.

CAPITULO II.

DE LA URBANIDAD (O DE LA DISCRECION) EN LOS JUECES

En este capítulo el autor nos dice que existen abogado que afuera de la salas de los tribunales son buenos oradores de los que si los encuentras afuera en la calle y conversas con ellos, tendrás un charla amena, en la cual te dejara contestar y su charla no se tan larga y tediosa, y no subirá el tono de su voz para hacerse notar.

A esto el autor le llama urbanidad, ya que afuera de una sala el abogado actúa de una forma, y dentro de la sala es como si se olvidara de esos valores, y educación para no subir el tono de voz, el cual grita para intimidar a su contrario, y pensare que gritando llamara la atención del juez.

Hace referencia que un abogado no debería de hacerle sentir a un juez que no tiene conocimientos, y hacerle ver que el abogado sabe más que él y eso es lo que a un juez le molesta, en esas circunstancias se debe actuar ante el juez como si no supieras nada.

CAPITULO III

DE CIERTAS SEMEJANZAS Y DE CIERTAS DIFERENCIAS ENTRE JUECEZ Y ABOGADOS

En este capítulo nos dice que entre jueces y abogados existe cierta semejanza que se distinguen unas por otras que pueden ser positivas o negativas.

Nos dice el autor que la diferencia de edades es la que marca la diferencia en estos casos, ya que el abogado es joven y sin experiencia, en cambio el juez su edad es la que hace la diferencia, dice que el joven abogado por su misma inexperiencia trata de hacerse notar por su ímpetu y es arrebatado en sus actos, mas sin en cambio el juez tiene que ser paciente, callado para poder tomar decisiones que marcaran la vida de las personas.

Por esta razón el autor afirma que mientras el abogado nace, el juez se hace.

Debemos de entender que tanto el abogado como el juez, provienen de una misma raíz, la diferencia es que el abogado comienza a desarrollarse dentro del ámbito laboral, y el juez ya ha recorrido ese camino para llegar a ser lo que es.

CAPITULO IV

DE LA DENOMINADA ORATORIA FORENCE

En este capítulo el autor nos explica que la oratoria forense se puede entender como la forma de expresar las ideas, argumentos que nosotros como futuros abogados podemos emplear para nuestra carrera profesional, ya que en juicios debemos saber expresar nuestras ideas, nos explica que la oratoria es una pieza fundamental dentro de la carrera de derecho, nos dice también que el abogado debe de ser ágil al expresar sus ideas, nos habla también de que los comentarios o declaraciones del abogado deben ser elocuentes Para que el juez pueda entender lo que el abogado quiera interpretar, el abogado en su forma de hablar sabrá si es de convencimiento del juez lo que habla o de desaprobación, pero también no hace falta hablar mucho si no que saber expresar con claridad lo que se quiera decir, así será más fácil convencer al juez.

CAPITULO V

DE CIERTA INMOVILIDAD DE LOS JUECES

EN LA AUDIENCIA PÚBLICA

En este capítulo nos habla del autor de lo difícil que puede ser para los jueces el escuchar a un abogado que diga cosas que no tienen coherencia, el autor habla de que son inútiles e insensatas, sarcásticamente habla de que en ocasiones los abogados por su forma de hablar hace que los jueces se duerman, pero también dice el autor que cuando un juez interrumpe a algún abogado, es porque el juez está poniendo atención en las declaraciones de este, también dice el autor que existen abogaos que no saben modular la voz y esto hace a que esta se vuelva como música para los oídos de los jueces y esto a su vez por el cansancio de revisar expedientes suelan dormirse en sus horas laborales.

CAPITULO VI

DE CIERTAS RELACIONES ENTRE

LOS ABOGADOS Y LA VERDAD,

O BIEN DE LA OBLIGADA

PARCIALIDAD DEL DEFENSOR

en este tema nos habla de la lucha de los abogados, hablando en términos profesionales de cómo cada uno busca alcanzar la verdad ante el juez, pero dice también el autor que todos los abogados son unos embusteros ya que cada uno trata de desprestigiar

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (18.2 Kb)   pdf (138.9 Kb)   docx (20.3 Kb)  
Leer 12 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com