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Educacion Impartida En El Tepochcalli Y En El Calmeca


Enviado por   •  18 de Julio de 2014  •  1.508 Palabras (7 Páginas)  •  961 Visitas

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ACTIVIDADES SUGERIDAS

1.- Leer el texto de López Austin para elaborar una breve descripción acerca del tipo de educación impartida en el Telpochcalli y en el Calmécac, considerando los siguientes aspectos:

finalidades educativas, grupos sociales, ceremonias de ofrecimiento, disciplina, castigos, religión, etc. leer las descripciones al resto del grupo y elaborar conclusiones sobre el tema.

Calmécac

La enseñanza propiamente intelectual de los Calmécac, estaba dirigida a formar rostros sabios. Se les enseñaban cuidadosamente los cantares, los que llamaban cantos divinos; se valían para esto de las pinturas de los códices. Les enseñaban también la cuanta de los días, el libro de los sueños y el libro de los años.

Abarcaba por tanto esa “acción de dar sabiduría a los rostros ajenos” (ixtlamachiliztli), la transmisión de los cantares, especialmente de los llamados “divinos#, donde se encerraba lo más elevado del pensamiento religioso y filosófico de los nahuas. Aprendí y los mitos, asan asimismo el manejo del tonalpohualli o “cuenta de los días”; la interpretación de los sueños y los mitos, así como los anales históricos, en los que contenía, indicándose con precisión la fecha, la relación de los hechos pasados de más importancia.

El noble iba a prepararse en todos aquellos campos que le permitieran actividades de dirección, lo primero era la educación en el campo del mando político, aprendían a regir, en materia religiosa era fundamental el manejo de cómputos calendáricos entre los que destacan el de 365 días de carácter agrícola-religioso, y el de 260 días, adivinatorio. Se ponía más empeño a la enseñanza de tipo intelectual.

Telpochcalli

En el Telpochcalli, aunque la educación religiosa era muy importante, se hacía hincapié en el trabajo y en las actividades militares. Esto tenía también el carácter de beneficio para la colectividad. Los niños desde edad temprana, participan en los combates. Eran los encargados de cargar el matalotaje de los guerreros, en la medida de su vigor físico. Con frecuencia un militar experimentado, persona hábil escogida por el padre del menor, le servía como instructor en el campo de batalla, mientras el niño actuaba como su escudero. En cuanto a la educación formal, el niño plebeyo, al tener que auxiliar a su familia desde edad muy temprana en las actividades económicas; entre ellas las agrícolas, tenía más facilidad para entrar y salir con frecuencia del templo-escuela.

Comienzan a enseñarles algunos después de comer, a usar las armas, a otros a cazar, cómo hacer cautivos en la guerra, como han de tirar la cerbatana. A arrojar la piedra. Todos aprendían a usar el escudo, la macana, cómo lanzar el dardo y la flecha mediante la tiradera y el arco. También cómo se caza con la red y cómo se caza con cordeles. Otros eran enseñados en las variadas artes de los toltecas, se preocupaban especialmente por lo que se refiere al desarrollo de las habilidades del joven para la guerra y la caza.

2. Realizar las siguientes actividades con base en la lectura de los textos de Alva Ixtlixóchitl y Landa. Contestar la siguiente pregunta:

* ¿Cuáles eran las finalidades de la educación femenina entre los antiguos mexicanos?

Su finalidad era que las mujeres fueran más obediencia, la cual representaba la buena crianza y nobleza de los antiguos, con lo cual las mujeres deberían ser honestas y con esa educación dejaría de ser desvergonzada y liviana.

Escribir un breve texto acerca de las principales características de la educación femenina entre los antiguos mexicanos. Elaborar una opinión personal sobre los cambios y continuidades más notables entre esa educación y la que reciben actualmente las mujeres.

La educación femenina entre los antiguos mexicanos

Las mujeres tienen costumbre de ayudarse unas a otras al hilar las tela, y páganse estos trabajos como sus maridos los de sus heredares y en ellos tienen siempre sus chistes de mofar y contar nuevas, y a ratos un poco de murmuración. Tienen por gran fealdad mirar a los hombres y reírseles, y por tanto, que sólo esto bastaba para hacer cualquiera fealdad, y sin más estremeces las hacían ruines. Son muy fecundadas y tempranas en parir y grandes criadoras, por dos razones, eran muy devotas y santeras, no las dejaban llegar a los templos, salvo en ciertas fiestas

Acostumbraban volver las espaldas a los hombres cuando los topaban en alguna parte, y hacerles lugar para que pasasen. Enseñan lo que saben a sus hijas y criarlas bien a su modo, que las riñen y las adoctrinan y hacen trabajar, y si hacen culpas las castigan dándoles pellizcos en las orejas y en los brazos.

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