Ensayo.Calles y algo más que Calles

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UNIVERSIDAD JUÁREZ AUTÓNOMA DE TABASCO

División Académica de Ingeniería y Arquitectura

Lic. En Arquitectura

ARQUITECTURA Y CIUDAD

Arq. Tomás Herrera Palavicini

Ensayo:

CALLES Y ALGO MÁS QUE CALLES

Alumna: Priscila del Carmen Gallegos Vázquez

27 de octubre de 2023

E N S A Y O

CALLES Y ALGO MÁS QUE CALLES

En la actualidad, la calle ha sufrido un cambio extremo al punto de convertirse en uso meramente vehicular, dejando de lado a los peatones y limitándolos a solo diminutos espacios a los lados de las carreteras, los cuales los exponen al peligro y lo más importante, ponen en riesgo la verdadera función de las calles; la función social y cultural. Los peatones hacen uso de las calles para dirigirse a muchos lugares; como sus sitios de trabajo, escuela, o por el simple hecho de realizar ejercicio, pero para que eso pueda ocurrir de una manera exitosa, es importante que la ciudad se encuentre diseñada para los peatones, no para el automóvil, porque sino se pierde el propósito de la ciudad.

Y es que, si se tiene una ciudad en donde abunden las calles peatonales, tendremos como resultado una ciudad más ecológica, y que, por supuesto aumenta la calidad de vida de sus habitantes, además de brindar el beneficio de tener una ciudad con menos tráfico y así terminar con las calles y zonas solitarias que muchas veces son inseguras.

La recuperación de la calle como espacio peatonal, ha sido una preocupación existente desde la aparición de los primeros vehículos, y para contribuir a la recuperación de esta, es necesario tomar en cuenta algunos proyectos, planteamientos o pensamientos que han sido muy importantes para el urbanismo, como Cerdá que ante su preocupación socio- urbanística, planteó un modelo que proponía vías con amplias aceras con árboles, farolas y bancos, además de la disposición de jardines y espacios comunes que sirvieran para la convivencia, estancia y recreación de sus habitantes, estas localizadas en los espacios que no se encontraban edificados, convirtiendo a la calle en un espacio diseñado para las familias y teniendo como propósito facilitar la vida social.

Con la aparición de la Ciudad Jardín, avanzó el proceso de desaparición de la calle tradicional, pues se hace efectiva la separación radical de la circulación mecánica de todas las demás funciones, incluida la circulación peatonal. Y en 1928, surge el modelo de Radbum “Traffic Segregation”, como reacción ante una situación donde la calle había desaparecido, otorgando carretera para los vehículos y dejando pequeños jardines, lugares de juegos y senderos para los peatones, donde la solución fue la construcción de cruces a distintos niveles entre el sistema peatonal y el motorizado, permitiendo una flexibilidad en la utilización de las calles, convirtiéndose en una de las claves teóricas más exitosas por sus grandes vías de alta velocidad, con tramos elevados sobre el suelo y la prohibición de la entrada de vehículos en determinadas áreas, creando islas peatonales con una circulación periférica.

Ante la angustia que sembraba la presencia del automóvil en la calle y el rápido crecimiento y proyección hacia el futuro, Le Corbusier presenta en 1922 un modelo algo radical, donde las edificaciones y las calles vehiculares se encontraban elevadas sobre pilotes, para dejar todo el suelo natural libre para el disfrute del peatón, dando paso a una independización de la red viaria; peatonal y vehicular.

Con estas propuestas y manifestaciones realizadas por múltiples teóricos y urbanistas como Jane Jacobs, Alexander y Chermayef, solo se reclama la inmediata reposición de las calles como espacios peatonales para devolver la vida a las ciudades, pues la calle es un lugar de encuentro, de intercambio cultural, comercial, buscando un equilibrio funcional, pues no hay que categorizar al automóvil como algo “malo”, pues permiten la movilidad dentro de la ciudad cuando se tienen que recorrer grandes distancias, por lo que lo mejor ante esta situación era buscar una solución que permitiera el uso del automóvil sin interferir en la tranquilidad y el disfrute de los espacios ambientales y recreativos.

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