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Federalismo


Enviado por   •  28 de Octubre de 2013  •  1.767 Palabras (8 Páginas)  •  291 Visitas

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EL CRISTIANISMO

Tras la muerte de Jesús, el cristianismo fue difundido por los apóstoles. San Pedro fue el primer obispo en Roma, pero el apóstol más activo difusor de la doctrina fue San Pablo, quien la propagó por Asia Menor, Grecia y Roma. Aunque sufrió persecuciones desde el siglo I, el número de adeptos fue aumentando hasta que, finalmente, Constantino lo reconoció(edicto de Milán, 313) y Teodosio lo declaró religión del estado (fines del siglo IV). Durante la edad media se extendió por todo el mundo civilizado, a pesar de que, ya desde su nacimiento, tuvo que enfrentarse con graves problemas: las herejías, el cisma de Oriente (1054), que separó la iglesia bizatina de la latina.

LOS INICIOS DEL CRISTIANISMO:

El cristianismo se originó en Palestina, oficial mente anexada a Roma el año 6 d.C., cuando aquella estaba enebullición. Por entonces había muchas sectas, algunas espirituales y otras políticas, que esperaban al Mesías, al Salvador prometido, que los libraría del dominio Romano. El fundador del cristianismo, Jesús de Nazaret, comenzó a predicar que "El reino de Dios está próximo", mensaje que muchos judíos esperaban, por lo que lo siguieron multitudes, pero las autoridades Judías sospecharon de él y sus seguidores disminuyeron. Después de predicar sus enseñanzas por tres años, fue aprehendido, juzgado y crucificado por la autoridad romana. A pesar de lo anterior, la fe cristiana comenzó a propagarse, si bien en un principio se situaba en un contexto puramente judaico. Pablo de Tarso, judío converso, amplió el ámbito del cristianismo al predicar en las islas del Egeo, Asia

ARABIA ANTES DEL ISLAM

El islam nació en el siglo VII en Arabia, una extensa península de Asia situada entre el mar Rojo al oeste y el golfo Pérsico al este. El clima árido y seco de Arabia la convierte en un enorme desierto donde la agricultura solo es posible en algunos lugares de la costa y en los escasos oasis del interior.

Los habitantes de la península Arábiga estaban repartidos en tribus enfrentadas entre sí, sin ningún poder político que las uniera. Cada tribu tenía sus propias creencias e intereses. En el interior vivían tribus de beduinos de origen nómada que se dedicaban al pastoreo de camellos y cabras.

En las regiones costeras, donde se practicaba la agricultura sedentaria, se encontraban las únicas ciudades: Medina y La Meca, que eran importantes centros comerciales por donde pasaban las rutas de caravanas que transportaban especias, sedas y otros artículos de lujo procedentes de Oriente.

EL NACIMIENTO DEL ISLAM

El Islam es una religión monoteísta que surgió en Arabia durante el siglo VII.

La península arábiga hasta mediados del siglo VII era sólo un desierto con algunas regiones fértiles en el sudeste y el sur, donde crecían los árboles que producían el perfumado incienso que, durante siglos, alimentó el tráfico de la “ruta de incienso”.

Junto a esa ruta, que subía por el Mar Rojo hasta el Mediterráneo, se desarrollaron algunas ciudades como La Meca y Medina dedicadas principalmente al comercio.

En el resto de la península vivían tribus nómadas de beduinos que se desplazaban con sus rebaños y sus tiendas y veneraban los espíritus que residían en algunas piedras.

Durante siglos, los mercaderes Árabes estuvieron en contacto, gracias a sus viajes con las dos grandes religiones monoteístas del cercano oriente: la judía y la cristiana.

A comienzos del siglo VII Mahoma (571-632), que pertenecía a una de las familias comerciantes de la Meca comenzó a recibir revelaciones del arcángel Gabriel sobre la existencia de un único Dios: Alá.

Al principio la gente no creyó en el mensaje de Mahoma, y reaccionó en su contra por lo que Mahoma se marchó a Medina. La fecha de su exilio (622) o hégira marca el principio de la cronología árabe.

En Medina, Mahoma organizó la primera comunidad de seguidores que se multiplicaron poco a poco. La nueva religión, denominada Islam, comenzó a expandirse por toda Arabia hasta convertirse en el elemento unificador de las tribus dispersas. Los que se unieron a la nueva fe se llamaron musulmanes (creyentes).

La nueva religión tenía muchos puntos en común con las religiones judía y cristiana. El Corán es el libro sagrado para los musulmanes, que contiene las revelaciones recibidas por Mahoma. Además de ser un libro sagrado, el Corán es un código de leyes y rige toda la vida de los musulmanes, quienes deben seguir determinados preceptos.

Otro libro importante, es la Sunna, que recoge las tradiciones atribuidas a Mahoma. Se utilizó para solucionar cuestiones que el Corán no recogía. Fue la causa de la primera división entre los musulmanes, que perdura hasta la actualidad: los sunnitas, que aceptan la Sunna y los chiítas, que la rechazan.

LA EXPANSIÓN DEL ISLAM

Unificadas las tribus árabes bajo una religión común, la idea de guerra santa fue el móvil para la expansión del Islam. Gracias a los camellos, animales que podían recorrer grandes distancias sin fatigarse, en pocos años los Musulmanes conquistaron un espacio muy vasto: se apoderaron de Palestina, Siria, Mesopotamia y del Imperio Sasánida. Luego avanzaron sobre Egipto, todo el norte de África y en el año 711 penetraron en la Península Ibérica, conquistándola casi totalmente. Cruzaron los Pirineos y en el año 732 fueron detenidos por Carlos Martel en la batalla de Poitiers.

La expansión musulmana se vio facilitada por su tolerancia con los pueblos sometidos en especial cristianos y judíos.

Después de la consolidación del Islam, la dinastía de los abasíes, que estableció su capital en Bagdad en el año 750, comenzó a exigir la unificación

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