RENUNCIA POLO DEMOCRATICO COLOMBIA

Bogotá Abril 09 de 2013

BOGOTA HABITABLE

TERRITORIOS AMBIENTALES

CARTA ABIERTA A:

MILITANCIA POLO DEMOCRATICO ALTERNATIVO

ASAMBLEA DELEGADOS POLO DEMOCRATICO LOCALIDAD DE FONTIBON

COMITÉ EJECUTIVO DISTRITAL PDA

COMITÉ EJECUTIVO NACIONAL PDA.

COMISION DE ETICA PDA.

Compañeras y Compañeros:

Si bien es cierto que la coyuntura política nacional en el 2003-2004, nos invitó a buscar la unidad de acción, la convergencia, el trabajo conjunto, no solo para constituir inicialmente el Polo Democrático Independiente y el Frente Social y Político, como meros partidos de participación electoral, se ha estado lleno de tendencias, que llamamos a la construcción de un orden alterno de raigambre popular, en busca unos más que otros en un Socialismo del Siglo XXI, situación que nos llevó a la construcción de unos mínimos demoliberales, plasmados en el ideario de unidad, algo así como unidos por lo mínimo, que en desacuerdo de todo, para muchos siempre ha existido la convicción que hemos estado unidos por mucho más que el ideario de unidad.

A pesar que en la construcción textual de los estatutos del Partido Polo Democrático Alternativo, no se reconoció este como una confederación de partidos o por lo menos de tendencias que reconozcan la existencia y participación política de movimientos territoriales populares; que van desde los que defienden teorías que apuntan a hacer las reformas necesarias conscientes o inconscientes para que todo siga igual, hasta los que proponemos caminos alternativos que conduzcan al socialismo del Siglo XXI.

Con esos mínimos del acuerdo de unidad, se lograron victorias parciales establecidas en lograr la gobernabilidad de algunas ciudades , municipios, y en el caso de Bogotá dos Alcaldías, Concejales y un buen número de Alcaldes locales y edilatos, Senadores y representantes a la Camara, acompañado ello a el desarrollo de políticas populares que trascienden en lo público.

Algo más se ha logrado y ha sido generar un ambiente propicio para considerar una solución política a los conflictos; que hemos heredado desde la aparición de conquistadores y la posterior consolidación de criollos en la repartición de la geografía nacional, a costa de pardos, flecheros, mulatos, campesinos, andigenas, afrodecendientes, y el trato de las mujeres ya sea como menores de edad o como “desquiciadas”.

Una Característica de esas gobernabilidades del PDA, se expresan en la producción de un conjunto de políticas públicas que pretenden afianzar un Estado Social y de Derecho e incidir en la manera como se invierten los recursos, orientados a establecer pactos para la erradicación de la pobreza, garantizar el derecho a la alimentación, fortalecer la democracia, los derechos humanos sociales y culturales, prevalecer el interés “Social”, sobre el particular. Acciones que al decir de nuestros vecinos, “con los pies se borra lo que se construye con las manos”, porque lo primero que han realizado un buen número de nuestros delegados ha sido gobernar sin “el Partido PDA”, estos algunos, se convirtieron en dueños de sus propias microempresas electorales, algunas unas verdaderas famiempresas, o pequeños clubes selectos de amigos cuyo interés no ha sido la política.

Pero algo aberrante en lo esperado políticamente en el ejercicio de una organización política como el PDA, ha sido su falta de memoria organizativa, acompañada de ausencia de planeación colectiva, algunos dirán que ello, la “planeación” la ha realizado su comité ejecutivo nacional, su ejecutivo Distrital, pero ha sido para ejercer planeación autoritaria desde arriba para abajo y se mató la posibilidad de la construcción social y colectiva, desde sus bases; sus Congresos, han estado centrados en la milimetria electoral, con el fin de escoger a los gobernables, acto necesario, pero en una buena parte del ejercicio, sin que las propuestas hagan parte de una construcción social tergiversando el necesario enriquecimiento del acuerdo de unidad, y convirtiéndolo en justificación para tirios y troyanos.

Esta situación de paralogismos ( ) y debates de problemas mal planteados han contribuido a minar la capacidad de pertenencia organizativa y de militancia y en especial el distanciamiento entre las bases, tendencias, votantes, y sus direcciones del PDA, repitiendo fracasadas experiencias “ que en la última década se han perfilado en un buen número de intentos en la construcción de una plataforma que proclama esfuerzos hacia la unidad de acción y la convergencia; procesos fallidos por estar también inmersos en prácticas del capitalismo( ), o en un excesivo corporativismo o gremialismo o por haber estado huérfanos de una ideología sistematizada, coherente y con capacidad de diferenciación que constituyen un muro para lograr una consecuente vocación de poder para enfrentar los retos de consolidar Alternativas, para erradicar al imperio, el neoliberalismo y la globalización de la desesperanza”,

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