ETICA PARA AMADOR. Hay ciencias que se estudian por simple interés de saber cosas nuevas; otras, para aprender una destreza que permita hacer o utilizar algo; la mayoría, para obtener un puesto de trabajo y ganarse la vida.

ETICA PARA AMADOR

Capítulo 1. De qué va la ética.

Hay ciencias que se estudian por simple interés de saber cosas nuevas; otras, para aprender una destreza que permita hacer o utilizar algo; la mayoría, para obtener un puesto de trabajo y ganarse la vida.

Es decir que ciertas cosas uno puede aprender esto o no, es voluntad de cada quien. Enfrentando a la realidad de que nadie es capaz de entenderlo todo, no hay de otra más que elegir y aceptar con humildad muchas de las cosas que ignoramos. Comprendí que podemos vivir sin saber sobre muchas cosas, se vive mejor o peor si se le desea, al final de cuentas se vive.

Lo de saber vivir no resulta tan sencillo para todos, ya que para muchas personas es algo complicado, se afanan, como quien dice, ni viven ni dejan vivir.

Es sumamente importante entender lo que nos conviene y lo que no, o sea, diferenciar entre lo bueno y lo malo, supongo que es un conocimiento que intentamos adquirir desde temprana edad, aunque de grandes las cosas se ponen algo turbias y esa idea se va volviendo a nuestra conveniencia y llegamos a perder el enfoque inicial, en cosas vanas o porque nos hacen sentir bien, solo pensamos en nosotros mismos.

También se habla sobre la libertad, que es la que se pone como ejemplo para diferenciarnos de los animales. Los animales no tienen opciones, son como les toco ser, como la genética y la evolución los programo, como Dios diseño (dependiendo del enfoque desde del que se desee ver). Aunque el hombre también está programado naturalmente para ser hombre, se nos concedió el libre albedrío, podemos dejar de comportarnos como hombres, para ser como bestias, para ser sofisticados, para comportarnos de cierta manera, para ser libres

La libertad no es una filosofía y ni siquiera es una idea: es un movimiento de la conciencia que nos lleva, en ciertos momentos, a pronunciar dos monosílabos: Si o No.

Capítulo 2. Órdenes, costumbres y caprichos.

Sabemos que en resumidas cuentas el motivo es la razón que tenemos o al menos crees tener para hacer las cosas, lo que sea; es la excusa más viable que tenemos al momento de reflexionar algo que hicimos por impulso. El cuestionamiento más común ¿Cuál es la razón de por qué lo hago? La respuesta de este cuestionamiento pueden ser tres:

Orden: que es cuando te mandan hacer algo, se te indica, vine externo a ti, tu no lo decides y viene por algo mucho as grande que uno mismo.

Costumbre: Que es cuando ya estas ‘’programado’’ para hacerlo, ya es algo común, tan repetitivo que muchas veces ya no causa tanta relevancia o es parte de uno mismo.

Capricho: Que es cuando ya lo hago porque se me plació, muchas veces ni siquiera lo deseas en realidad, pero estar aferrado a la idea de que eso quiere, eso es lo que vas hacer.

Cada uno de estos motivos hace que inclines tu conducta hacia un lado o el otro, responde más que nada a tu voluntad.

Disponemos de cuatro principios de moral:

1. El filosófico: haz el bien por el bien mismo, por respeto a la ley.

2. El religioso: hazlo porque es la voluntad de Dios, por amor a Dios.

3. El humano: hazlo porque tu bienestar lo requiere, por amor propio.

4. El político: hazlo porque lo requiere la prosperidad de la sociedad, por amor a la sociedad y por consideración a ti.

Capítulo 3. Haz lo que quieras.

Todo esto tiene que ver con la libertad está incluida la ética. Libertad es la elección de decir sí o no; lo hago o no lo hago, independientemente de lo que digan los demás.

Cuando una acción se basa por ser una orden, una costumbre o un capricho nunca resulta la mejor opción. Nadie puede ser libre por mí, nadie tiene el derecho de elegir por mí. Luego de convertirse en adulto, uno es capaz de intentar ser de cierto modo la vida misma y no hacer simplemente el vivir el que otros desearían para mí.

La palabra moral tiene que ver con las costumbres, ya que estamos  en una sociedad que constantemente nos dice ‘’no hagas esto’’, ‘’que ni se te ocurra pensar en ello’’ ‘’no, eso no porque no es malo’’, porque ya es un ambiente donde se desecha todo aquello que se considera ‘’inmoral’’; pero hay que tener mucho cuidado con ello ya que se puede llegar a confundir con órdenes.

Moral es el comportamiento que se considera aceptable/valido; ética es la reflexión de porque lo consideramos así.

Muchas veces las personas llaman algo como ‘’bueno’’ aun sin creer que lo sea, por el simple hecho de no querer discutir con los demás. Que algo sea tomado como bueno por muchas personas no significa que en realidad lo sea, si a ti no te parece ahí es cuando de la manera más educada tienes toda la libertad y derecho del mundo de decir ‘’a mí no me lo parece’’.

No es fácil decir cuando una persona está equivocada o en lo correcto porque todos tenemos percepciones diferentes, aquí es cuando entran la ética y la moral en la sociedad y más o menos establecen una marca de que tan bien o mal estamos, pero nunca se estará bien en su totalidad, somos humanos, nos equivocamos y al final de cuentas nunca sabremos si lo que hacemos es completamente malo o bueno, pero lo importante es hacer las cosas que nos parezca bien, siempre tratando de hacer las cosas de la mejor manera posible; no por seguir ordenes, costumbres o caprichos.

Capítulo 4. Date la buena vida.

Aquí se trata de concretar en si lo que es ‘’haz lo que quieras’’. Significa plantear todo desde ti mismo, desde lo profundo de la voluntad propia. Cuestionarse sobre que uso le vas a dar a tu libertad.

Si alguien más nos lo dice se puede generar una contradicción, porque se nos está indicando que es lo que debemos hacer, siendo más allá de que sea lo que uno quiera. De igual manera no se trata solo de pasar el tiempo, si no de como se está aprovechando.

Estamos condenados a elegir y tomar decisiones. Ya sea elegir que seleccionemos lo que deseas o alguien más quiera venir a imponerlo.

El ‘’Haz lo que quieras’’ no debe de ser tomado como capricho, sino como una libertad.

Muchas veces nosotros mismos queremos cosas y al hacerlo nos contradecimos, nos crean algún conflicto unas cosas con otras. Se tienen que establecer prioridades y jerarquizar lo que queremos pronto y lo que en el fondo y a la larga deseamos.

La vida está constituida por tiempo, momentos, esperanza y más que otra cosa relaciones con las demás personas, somos seres sociales.

La ética no es más que un intento racional de tratar de explicar cómo vivir mejor. El decir ‘’darnos la buena vida’’ no se trata en sí de solo mi beneficio, sino de una buena vida como humano, como personas sociales en ocasiones nos quedaos en el ‘’quiero dinero’’, ‘’un negocio’’, etc. Y no digo que este mal, pero descuidamos el pensar en qué tipo de persona nos estamos convirtiendo, si mi estilo de vida en realidad me está llevando a ser el tipo de persona que siempre quise ser.

La cultura que tenemos es heredada por personas que estuvieron antes que nosotros, así que hay que reflexionar que es lo que quieres heredar a las futuras generaciones.

No se trata de ser perfectos, sino más humanos.

Capítulo 5: ¡Despierta Baby!

¿Qué es lo que realmente constituye darse la buena vida? Para esto uno se tiene que dar un plan en conjunto.

No debemos fijarnos en las cosas materiales que tenemos porque terminan posesionándose de nosotros. Debemos de establecer que no somos solo cosas, somos personas, necesitamos cosas para sobrevivir, no sobrevivimos por ellas.

El respeto, el afecto, la amistad, si es verdad son sinceras no lo conseguiremos por medio de cosas materiales, contaremos con los demás mientras seamos nosotros mismos y tampoco debemos convertirnos en solo cosas para las demás personas.

Una vez más se habla de vivir humanamente y esto tiene una condición ética, que es no vivir del modo que sea y tener moral. Vivir humanamente se trata de comprender como va la vida que estamos llevando, que es lo que podemos hacer para que sea buena.

La conciencia depende de unas cuantas cualidades innatas, responsabilidades sociales y tiene algunos fuertes rasgos.

1. No ser indiferentes a todo por el verdadero deseo de vivir bien, humanamente.
2. Evaluar si las cosas que hacemos es lo que realmente deseamos o no lo es.
3. Desarrollar nuestro gusto moral, desechar instantáneamente cosas que sabemos que no son lo correcto.
4. Responsabilizarnos por nuestros actos.

Deberíamos considerar que alguien es realmente consciente de lo que es conveniente para vivir bien y se esfuerza por ello. Ya que el egoísta se ama a sí mismo, piensa en sí y en cierto modo está bien.

Cuando alguien en verdad se ama a si miso debe intentar exteriorizarlo, ni diciéndolo, sino dejando que su conducta hable por sí mismo, una persona que se ama se preocupa tanto por su interior como su exterior; jamás permitiría que su reputación se manche con cosas tan banales.

Hablemos de remordimiento, este aparece cuando existe conciencia, si no fuésemos consientes uno ni le importaría el mal que hacemos. Cuando hacemos algo fuera de lugar sin decirle a nadie o sin que alguien más se dé cuenta o al contario cuando humillamos a alguien en público no hay peor castigo que el remordimiento la conciencia.

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