Reporte literario “La ciudad de las bestias”

Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Michoacán

Reporte de lectura

Dirigido a:

Maestra de lectura, expresión oral y escrita I

Erandi Elizabeth moreno Guzmán

Estudiante que realiza el reporte de lectura:

Juan German Moreno Zavala

Procesos de Gestión Administrativa I

122-A

Responsable de la publicación:

Isabel allende

Publicado en el 2002 por la editorial debolsillo. Pags.50-100

“La ciudad de las bestias”

Al cesar la lluvia estos regresaron al hotel con los demás, como era de esperarse ya que este era el guía de la expedición, a la doctora Omayra y junto a ellos el doctor Leblanc el cual quería apresurar el paso para partir lo más pronto posible e iniciar su exploración lo más pronto posible acarreando de esta manera los preparativos para el día siguiente en búsqueda del gigante en el alto Orinoco.

Al día siguiente se encuentran con carias el cual comenta acerca de la bestia la cual tiene atemorizados a todos los indios de la zona, Kate, al ser una persona que sería difícil diferenciar entre necia y persistente le comenta acerca de las riquezas que hay por la zona y la relación de la bestia con la interferencia de sus negocios, a lo que Carias responde que la bestia resulta ser un problema para todos, que incluso los soldados mismos le temen, desde un principio este mismo le dio una mala espina a Kate ya que desconfiaba de el pero por el momento pone a la disposición de los exploradores todo lo que se encuentre a su alcance para ayudarlos, ese mismo día en la tarde Alex se reusó a cenar ya que desde siempre había sido quisquilloso con la comida, ese día no sería la excepción con las comidas exóticas del amazonas. Con el estómago vacío se dispuso a seguir el resto de la noche, en ese momento se dirigió hacia Nadia la que estaba en el muelle y a lo lejos está junto con su monito divisaron a lo lejos algo, Alex indeciso ante la señal se dispuso a seguirla hasta que encontraron con Walimaí, esta se dispuso a hablar con el pequeño chaman con gestos y sonidos en una lengua la cual no comprendía pero sin embargo sonaban dulces, suaves como la brisa, y el canto de los pájaros, esta platica le genero cierta desconfianza ya que supo de inmediato que hablaban de el por qué constantemente lo señalaban hasta que en un momento el anciano se erguido y se empezó a alborotar, la niña logro tranquilizarlo, terminando de hablar Walimaí le obsequio un collar con el cual lo podía contactar, extrañado y desconcertado Alexander le pregunto que había sido todo eso, ella le comento que varios morirían en el camino, pero que ellos tendrían que ir por que fueron llamados al ser blancos y puros de alma.

En medio de la noche ante el temor e inseguridad de Alex al escuchar los ruidos del exterior no se sentía seguro en un hotel que estaba solamente sobre unos pilotes, con techo de cinc añadiéndole que sin puertas ni ventanas, en realidad un lugar rustico, pero entre todos los ruidos de la selva a esas horas pudo escuchar voces, llamo a Nadia para que lo acompañara y así fue, al encontrar a Carias hablando con Ariosto acerca de un plan que involucraba llevar al equipo al triangulo donde vivía la bestia y de esta manera poder encubrir sus negocios haciendo que el equipo de International Geographic se fuera contando lo que ellos querían . A mitad del espionaje por parte de ellos una serpiente se le enrosco en la pierna a Alexander, ahogando un grito y teniendo el miedo a los animales de la selva logro controlar sus impulsos denotando cierta valentía al lidiar con la serpiente que termino siendo arrojada por su nueva amiga. Llegaron a la conclusión de que tenían que hacérselo saber a alguien más para advertirles del peligro que corrían, sumándole que Walimaí les advirtió que algunos morirían en ese camino.

Al día siguiente antes de partir estos fueron invitados al campamento de Carias; este estaba a unos kilómetros de Santa María, pero con un aspecto totalmente diferente, el campamento estaba repleto de militares armados hasta los dientes, un circulo de remolques y una cerca eléctrica los protegía de el “exterior”. Eso hizo que Kate sospechara aún más de aquel hombre como para preguntarle a su nieto “¿Qué puede tener este hombre que requiera tanta vigilancia? ahí tenían energía eléctrica, paneles solares, generadores, más aparte a el remolque al que llegaron a alojarse era sumamente elegante, parecido a una sala, Alex se sentía aliviado por volver a tener esas comodidades. Momentos después Carias

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