Resumen del libro las maletas de Auschwitz
Maricela CaroResumen5 de Noviembre de 2023
4.073 Palabras (17 Páginas)936 Visitas
LAS MALETAS DE AUSCHWITZ
Autora: Daniela Palumbo
CARLO
ITALIA
CAPITULO 1:“El momento mágico”:
Carlo, hijo de un ferroviario Antonio, de 9 años que le encantaban los trenes. Tenía una compañera Anna qué tenía la misma edad que estaba enamorada de él. Le encantaban los trenes, se creía jefe de estación. El momento mágico era cuando el tren llegaba a la estación y quedaba unos segundos en silencio y todo se enmudecía.
CAPITULO 2:”Último día de colegio”:
El profesor fue reemplazado por una señorita que le gritaba a los niños. El último día, Carlo escucho la voz de su padre discutiendo con el director del colegio. Fue sacado de su clase y del colegio. Carlo si entender porque había sido expulsado, su padre con lágrimas en los ojos le dicen que se aplican las "leyes raciales" qué ningún judío puede trabajar ni estudiar. Carlo cuestionaba porque eran esas leyes contra los judíos y que significaba ser uno de ellos.
CAPITULO 3: “Anna no está”:
Los días sin ir al colegio eran terribles. Carlo no entendía porque hacían esas leyes. Echaba de menos ir a la escuela y el papá le dijo que había una profesora que era judía que no dejaban trabajar que lo ayudaría a estudiar por mientras. Su abuela le explico que esto sucedía porque ellos eran judíos y los cristianos no piensan igual. Ahí el problema. Los judíos creen en Dios y que Jesús fue un judío que no es el mesías qué salvará al mundo. Carlo sintió ganas de ir a ver a sus compañeros.
CAPITULO 4: “Los compañeros”
Después de dos meses fue a visitar el colegio y lo encontró más pequeño, no estaba Aquiles el gato y todos los niños con su padres los ignoraron. Incluso Anna qué quiso saludarlos pero su padre la giro abruptamente. Antonio y Carlo se fueron.
CAPITULO 5: “Quién tiene miedo de los judíos”:
Los policías ya habían ido muchas veces y les tocaban la puerta y les quitaron todas sus cosas de valor. Cada vez que pasaba eso a Carlo se le aceleraba el corazón. Se lavaron a su papá, estaba lloviendo y quedó su madre desconsolada y el sin sentir que nadie lo consolaba lloraba de pena.
CAPITULO 6: “La fuga”:
Carlo ya no quería ir más donde la profesora Sarah porque sentía que ni siquiera sabía su nombre, decidió ir a ver los trenes y ahí conoció a David que era un niño judío de 12 años que pedía limosna para sobrevivir. Le sugiere a Carlo qué hagan lo mismo. Finalmente estuvo 5 días fuera de su casa durmiendo en un vagón abandonado y pidiendo limosna, hasta que la policía llego y él lo alcanzo a huir. Un compañero de trabajo de Antonio, Aldo lo reconoció. Lo llevo a su casa y ahí Carlo se dio cuenta que era amado por su padre y madre.
CAPITULO 7: “La partida”:
5 años después en 1943 L a la abuela le quitaron su casa, así que vivía con su hijo Antonio. Carlo estaba feliz ella siempre los animaba. Una noche un 15 de diciembre, golpearon la puerta 2 policías italianos y un alemán. Les ordenó hacer sus maletas porque se irían de ahí. La abuela le preguntó a Carlo si quería llevar algo de valor importante para él y guardo unos boletos de tren que tenía como tesoro. Se fueron entregando las llaves de la casa.
Hanah y Jacob
Alemania:
CAPITULO 8: “El miedo”:
Jacob tenía 7 años, era pequeño, tenía la cabeza menos ovalada que el resto de los niños, hablaba poco y no comprendía qué pasaba a su alrededor. Pero si se reían de él se daba cuenta, por eso hablaba lo menos posible. Su madre Sarah le hablaba despacio, para que el pudiera entender. La maestra le había indicado hablarle con dulzura y lento así el entendería mejor. Su retraso mental le permite entender conceptos simples y breves. Ahora si las emociones se apoderan de él, no escuchará nada. Su hermana Hanah jugaba con una amiga a la pelota y Jacob les quitaba la pelota, teniendo qué intervenir su madre. Hanah se enferma y su madre va a la consulta del doctor, quien le dice que se vaya de inmediato porque él no puede atender a judíos, solo puede atender a los de raza aria. Ella lo increpa y le dice que es su deber de médico recetarle los medicamentos a su hija que está enferma, él le dice que no es su deber atender a gente inmunda como los judíos, qué se vaya de ahí con sus hijos minusválidos, o sino llamaría a la policía. Se fue de la consulta prometiéndose qué su orgullo eran su familia y su religión.
CAPITULO 9: “Hanah y Rose”:
El padre de Rose le discute a la madre de ella, porque Hanah está en su casa. Kurt Bauer era policía y el Fuhrer había dicho que los judíos eran sucios y malos y le ordenó a su mujer que esa niña nunca más entrará a su casa. Hanah huyó por la ventana mientas Kurt gritaba escapa judía y no vuelvas nunca más. Hanah no le contó a su familia. Sarah le dice a Joseph qué se vayan de Alemania porque ya no son considerados como alemanes sino solo como judíos. Joseph cree que las leyes raciales no durarán mucho. Ella le explica que él no puede trabajar, le cerraron su empresa, no le venden remedios, que la expulsaron de la consulta del doctor, los niños no pueden ir al colegio, los vecinos no les hablan y debe entender que lo que están viviendo es lo peor.
CAPITULO 10: “Nora la rebelde”:
Los parientes de Hanah vivían en Argentina. El papá de Joseph, el abuelo paterno de los niños se llamaba Hermann y los niños lo querían mucho era el único abuelo qué conocían. Hace un par de años había muerto. La abuela Marjanne mamá de Sarah insistía en sus cartas que se fueran a Argentina. Porque el escenario en Alemania era muy peligroso para los judios. Ella le muestra la carta de Joseph, él le dice que pronto pasará todo, que no se hable más del tema. Una noche comienzan a golpear y aparece una mujer vestida con ropa de hombre, herida en la frente. Era la prima Nora. Ella se había ido hace dos años a Argentina pero regreso con su novio Antón por las olimpiadas en Berlín, finalmente nunca volvieron y se convirtieron a formar parte de la resistencia alemana. La gestapo (policia alemana), los habían descubierto y ella al uir se rompió la frente. Antón se sacrificó por ella y se quedó para que ella pudiese escapar. Nora sabía que eso era muerte segura para Antón. Les pidió quedarse unas horas para dormir. Hanah había escuchado todo lo que dijo Nora pero decidió no hablarlo con nadie. Después de ser expulsada del colegio unos días antes su profesora la sentó junto a Abraham que también era judío, porque entre los inmundos se entienden. Se sentía como un sofá tapado con una manta, donde todo ocurría con normalidad pero ella había sido borrada. Nadie le hablaba ni la miraba.
CAPITULO 11: “Jacob en la clínica”:
Dos policias llegan a la casa y le dicen a Joseph que tiene un hijo minusválido. Lo golpean por no contestar. Y le dicen que Jacob será llevado a una clínica para ser evaluado. Su madre al tratar de poner resistencia, la amenazan con quitarle a Hanah así que obedece y le hace una maleta a su hijo. No durmieron, y caminaron hacia la dirección que les dieron. Hace años que había toque de queda para los judíos, no podían usar el transporte público, ni andar en bicicleta. Hanah recordaba a su hermano cuando trataba de encontrar a la persona escondida dentro de la radio. Le causaba gracia. Jacob miraba siempre las estrellas y para el siempre existían 20 números (contaba de 20 en 20). En la clínica los expulsaron diciendo que Jacob estaba bien. Al otro día volvieron los volvieron a echar y les dijeron que no vuelvan nunca más, que ellos les darán noticias de su hijo. Sarah se opone entra a la clínica y un policía apunta a Hanah deben irse. Hanah no volvió a hablar con nadie desde que se llevaron a su hermano. Joseph desesperado empieza a ubicar a todos sus clientes arios para que lo ayuden, solo uno que no era nazi, le dijo que se olvidara de su hijo que Hitler había dicho que no querías minusválidos ni judíos en Alemania. Que se olvidara de su hijo. Semanas más tarde llegó un sobre que decía que Jacob había muerto de pulmonía. Sin firma, sin nada.
CAPITULO 12: “Hanah cuenta las estrellas”:
A Hanah le resonaba la palabra "Arios" la raza superior qué podía ir a la escuela, andar en tranvía, bicicleta y no llevaban como los judíos una estrella de David cosida a su ropa para ser identificados como la raza inferior "los judíos". Ella ya no hablaba, solo esperaba la noche para contar las estrellas de 20 en 20 como su hermano, esperando que volviera. Ella no se creyó lo de la pulmonía porque su hermano nunca se enfermaba. Joseph recibe una carta de Nora que le dice que se vayan a Argentina que ella logró escapar. Joseph le dice a Sarah que se vayan para proteger a Hanah pero ella quiere recuperar el cuerpo de su hijo, se niega. Entonces Hitler cierra Alemania y no permite salir a ningún judío. Una noche lleho la policía y en media hora estuvieron listos. Joseph le dice a Hanah qué deben irse que puede llevar en la maleta el cuaderno para contar las estrellas. Ella habló y le dijo dónde vamos pudo contar las estrellas. Los policías les dijeron que irían a un lugar donde estaban los otros judíos.
Emeline
Francia
CAPITULO 13: “Los postigos azules”:
Los postigos (persianas de las ventanas) azules. Era los únicos de esa cuadra qué se notaban, a veces se abrían con ganas otras no tanto y a veces como rutina. Eso pasaba cuando Pierre y Brigitte se peleaban. El administrador del edificio, le pedía recurrentemente a Briguitte cambiar el color de las persianas de las ventanas pero en su interior, el que la encontraba muy hermosa, no la presionaba, porque el cuándo joven había sido pintor y sus padres lo obligaron a estudiar economía. Por eso, el sentía que era un triunfo para ella mantenerlas de ese color y no dejarse amedrentar por los vecinos que las querían todas del mismo color. Briguitte pinto de azul las persianas de su casa en Bretaña y cuando Pierre las vio dijo así serán mis ventanas en París. Las tocó y quedó con las manos llenas de pintura, Brigette qué salía de su casa con el letrero, no tocar, recién pintado. Se rieron a carcajadas. En agosto de 1929 se enamoraron, esa historia se la sabia de memoria Emeline su hija. Ellos eran los únicos judíos de ese edificio.
...