Sociedad desescolarizada - Mal de escuela

El presente ensayo tiene como propósito analizar las posturas de los autores Ivan Ilich en el texto ¨Sociedad desescolarizada¨ capitulo 2 en el cual nos menciona que las palabras llegan a ser flexibles que dejas de ser útiles de las cuales nombra a la escuela y la enseñanza. Además, que propone una búsqueda de alternativas para la educación comenzando por anotar funciones principales desempeñadas por los sistemas escolares modernos los cuales son: la custodia, la selección, el adoctrinamiento y el aprendizaje. Estas funciones se desarrollan dentro de la escuela a la que define así el proceso que especifica edad se relaciona con maestros y exige asistencia de tiempo completo a un curriculum obligatorio.

También el autor nos define cada uno de estos procesos de los cuales se redacta a continuación:  

1) Edad: Aquí el autor nos dice que la escuela agrupa a las escuelas según las edades, también nos relata sobre la creencia de que los niños deben estar en la escuela y que solo pueden aprender y enseñar en la misma y no fuera de ella afirma que el concepto de niñez es reciente en Europa Occidental y aún más en América. Aparece con la sociedad industrial y la burguesía emergente; es entonces cuando con preceptores y escuelas privadas se fabrica al niño. El sistema escolar y la niñez son fenómenos interrelacionados, lo mismo que la sabiduría institucional lanzada al mercado como una mercancía más.

2) Docentes y Alumnos: En este apartado el autor nos dice que aquí los niños son considerados como alumnos y por lo tanto su aprendizaje está a custodio del docente y que a escuela a su vez se sustenta en la afirmación de que el aprendizaje es resultado de la enseñanza cuando, en realidad, la mayor parte de lo que sabemos lo hemos aprendido precisamente fuera de la escuela. Y aun en la escuela misma, el aprendizaje no depende totalmente del maestro, sino de variables como las diferentes estrategias para pasar exámenes, la capacidad memorística de los alumnos o su relación con los compañeros de clase. El hecho de que la escuela exista y la escolaridad sea considerada si no obligatoria, deseable, determina que la gran mayoría de personas que no puede asistir a ella, también pueda aprender a su lección.

3) Asistencia a jornada completa: La obligación de asistir a clases sumerge a los niños en una especie de contexto sagrado y convierte el aula se convierte en un recinto mágico. De tal modo, que la aparta del contacto con la realidad cotidiana. Al mismo tiempo, el profesor asume las funciones de custodio, predicador y terapeuta, con el derecho de participar e incluso dirigir las vidas privadas de sus alumnos. La escuela reclama tiempo y energías de los estudiantes por un considerable lapso de sus vidas. El ceremonial, ritual de la “escolarización” constituye un curriculum oculto que inicia a los hombres en la sociedad.

En el segundo texto tenemos al autor Daniel Pennac en su obra (Mal de escuela) en esta obra el autor narra su vida desde su perspectiva como estudiante, también nos narra su experiencia de docente, haciéndonos reflexionar sobre la pedagogía y las disfunciones del sistema educativo, sobre la sed de aprendizaje y el dolor de ser un mal estudiante. Al analizar una pequeña parte de su obra la cual inicia con  la siguiente frase “Basta un profesor, uno solo, para salvarnos de nosotros mismos y hacernos olvidar a todos los demás” después de mencionar esta frase el autor da paso a los   recuerdos que conserva de su profesor de matemáticas en bachillerato, el señor Bal, lo describe desde la gestualidad  como un profesor muy poco cinematográfico , oval y nada especial según el autor, siempre los  esperaba sentado en su mesa y desde sus primeras palabras nos adentraba en el mundo de las matemáticas,  presentaba una extraña bondad nacida  del amor hacia las metamatemáticas generado por su propia profesión y pasión al enseñar. El autor también nos relata  que como los más vagos de los estudiantes incluyéndose, siempre alardeaban de sus ceros y el docente respondía diciéndoles en no creer en conjuntos vacíos , hacía del conocimiento e ideas de sus alumnos algo valioso como las pepitas de oro , también cuenta que el profesor nunca hablo del examen de bachillerato, a él le importaba más sacarlos del abismo de la ignorancia, su metodología no basto para convertirnos en genios de las matemáticas, pero logro llevarnos hasta un nivel medio, termina describiendo al profesor con la pregunta ¿Él era un gran matemático? Pennac sigue describiendo a sus otros docentes elogiando su pasión por la materia, también mencionando en cómo se interesaban en él, reanimándole el deseo por aprender. Se alegraban de nuestros procesos, se preocupaban por sus buenos y malos estudiantes. Sus clases eran actos de comunicación, convertían cada hora en un acontecimiento que podíamos recordar como tal, ¿Eran conscientes que eran maestros libertadores? Es una pregunta que se hace el autor.

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