Explorando el espectro autista

Explorando el Espectro Autista

El trastorno del espectro autista es una alteración del desarrollo que se caracteriza por deficiencias cualitativas en la interacción social y en la comunicación, haciendo de las personas que la padecen muestren comportamientos restringidos, repetitivos y estereotipados, este trastorno afecta más a hombres que a mujeres, actualmente los casos de autismo han aumentado, los síntomas del espectro autista pueden ser leves o más graves. Las habilidades de un niño autista pueden variar, dependiendo tanto del nivel de coeficiente intelectual como de la capacidad de comunicación verbal. Aquellos que poseen un nivel alto funcional son capaces de repetir y aprender conversaciones, comerciales, series o libros al pie de la letra. Considero que esta condición se debe a varios factores que alteran el desarrollo cerebral de las personas, como factores genéticos, ambientales, neurobiológicos, prenatales y perinatales.

En cuanto a los genéticos, Mas (2016), nos da a conocer que, si bien los mecanismos genéticos del autismo no se conocen precisamente a fondo, sí hay varios datos que dan a destacar que la herencia juega un papel importante en la aparición del autismo. No es raro encontrar a personas que padezcan autismo en varias familias, además, parientes de niños autistas muestran leves rasgos parecidos a los del Trastorno del Espectro Autista (TEA), conocidos como fenotipo ampliado. El genotipo es el conjunto de genes que posee una persona en el ADN, mientras que el fenotipo es donde estos genes se expresan. Los estudios epidemiológicos muestran que hay cinco niños con TEA por cada niña, aunque la mayoría de niñas no son diagnosticadas debido a que poseen síntomas más sutiles, por otro lado, se han identificado varios genes involucrados en el TEA, como el gen MET, SLC6A4, RELN, y otros más.

 Los factores ambientales cada vez más tienen mayor relevancia en el desarrollo del autismo. En la actualidad existe una gran cantidad de contaminantes químicos que, afectan a las madres en proceso de embarazo provocando el surgimiento de alteraciones en los genes del feto. Los contaminantes que se consideran más peligrosos para las mujeres embarazadas, son los metales como, el plomo, mercurio, los cuales pueden ser inhalados e ingeridos en alimentos y agua, el arsénico, que se encuentra presente en países subdesarrollados por lo cual la gente que habita en estos países está más expuesta a grandes niveles tóxicos de este metal, el aluminio, que puede encontrarse en el agua, en la gasolina con aditivo de aluminio o en papel de aluminio que se usa frecuentemente para envolver alimentos, otros contaminantes son las partículas de diésel, estas tienen en su composición hidrocarburos que especialmente se hallan en las emisiones de los motores que usan este tipo de combustible,  tambien tenemos los ftalatos, que podemos encontrarlos en cosméticos como los perfumes  en que permiten el mantenimiento del aroma (Garcia,2019).

En el autismo los factores neurobiológicos tambien juegan un papel importante. Martínez et al., (2019), argumentan que el TEA es causado por una anormalidad en el crecimiento cerebral, que ocurre durante la etapa fetal en donde el feto se puede ver afectado por estímulos ambientales que rodean a la madre, estas anomalías se dan en la disposición neuronal y en la función sináptica. Estas alteraciones afectan principalmente a la corteza prefrontal y sus conexiones, que regulan la conducta social. Funcionalmente, estas anomalías interfieren con la neuroplasticidad durante el desarrollo, como ocurre en otros trastornos neuropsiquiátricos.

Por último, tenemos los factores prenatales y perinatales, los cuales tambien están relacionados con el desarrollo del autismo. Entre los prenatales se incluyen la edad avanzada de los padres, sangrado vaginal durante el embarazo, diabetes pregestacional, anemia, hipertensión arterial, restricción del crecimiento fetal, uso de medicamentos y tabaquismo. Asimismo, la falta de controles durante el embarazo puede aumentar el riesgo. En cuanto a los perinatales, el parto distócico, cesárea de urgencia o electiva, parto pretérmino, prolongado o inducido, prolapso del cordón, circular laxa al cuello y rotura prematura de la membrana son factores de riesgo significativos, todo esto puede conllevar a que el cigoto nazca con TEA, por lo que es importante una adecuada atención medica en estas etapas (Quintana et al., 2022).

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