Articulo de opinión: Impacto social y económico de las adicciones.

Articulo de opinión: Impacto social y económico de las adicciones.

1.- Introducción:

Mi comunidad se muy afectada por el uso de drogas y las actividades ilegales que giran alrededor de esto además de la corrupción e incompetencia de las autoridades locales. La adicción entre vecinos y conocidos los ha conducido a la delincuencia participando en robos y narcomenudeo en los casos menos peores y en secuestros, extorciones y nexos con grandes grupos delictivos en los peores casos y todo esto permitido por el gobierno municipal.

Estoy en contra de las políticas prohibicionistas, la falta de compromiso y la corrupción en nuestro gobierno. Si, falta educación y cultura en nuestra sociedad para desplazar el problema de las drogas y el abuso, yo creo fielmente que con la despenalización y legalización de algunas sustancias y la inserción de programas para reducción de daños se puede integrar el mencionado problema a la sociedad de manera pacifica como en Holanda o Portugal.

 II. Desarrollo de argumentos

1. La legalización conducirá a que la sociedad aprenda a convivir con las drogas, tal y como lo ha hecho con otras sustancias como el alcohol y el tabaco.

El uso del alcohol data desde 7000 a. C., pero no fue hasta el siglo XIX cuando se produjo un cambio de actitud y una campaña antialcohólica que empezó a promover el uso moderado del alcohol, algo que a la larga se convirtió en una prohibición total. En 1920, en Estados Unidos se aprobó una ley que prohibía la fabricación, venta, importación y exportación de bebidas embriagantes. El comercio ilegal de alcohol se disparó y en 1933, la prohibición del alcohol se canceló. Fue desde entonces que el alcohol adquirió aceptación social a tal grado de ser una de las drogas más valoradas socialmente. Por otro lado, la marihuana ha comenzado a ganar terreno, en el caso de EUA el uso medicinal de la marihuana está aprobado en 28 de los 50 estados y en 10 el uso recreativo. En Holanda el objetivo de la política sobre drogas es, entre otras cosas, lograr una separación de los mercados de las drogas duras y el cannabis, considerando la portación y uso de cannabis como una falta y no un delito. Estos son solo unos de los ejemplos más ilustrativos que demuestran que las políticas prohibicionistas no son efectivas para lograr la disminución del uso de sustancias y las adicciones.

1. En dosis pequeñas y experimentales proporcionan salud física y mental mediante la curación y/o control de enfermedades sea cual sea su procedencia, ya que el 99% de los medicamentos están hechos a base de drogas.

Es un hecho que todos nosotros hemos usado o usamos drogas, el término no implica juicio de valor moral, cultural o médico, por lo que se puede diferenciar el uso de una droga dura/ilegal a un antibiótico de manera simple. El uso de las drogas ha estado presente desde que el humano comenzó a existir. Mientras que en algunas civilizaciones eran de uso exclusivo entre gobernantes y clero, otras acostumbraban a designar un día y evento especial para su uso comunitario y en ambos casos, su implementación, tenía un fin de índole curativo físico-psíquico. Posteriormente con el desarrollo de las drogas de diseño, que en su momento su creación, estudio y experimentación fue con fines médicos, la alquimia que manejan las drogas más antiguas y las mas nuevas fueron lentamente descartadas como parte de un programa de sanación verdadero, en cambio, se promovió una visión satanizada de las mismas y posteriormente las legislaciones relacionadas a su uso contribuyeron a demeritar su imagen haciéndolas caer en el lado más oscuro de la desinformación y el mal entendido colectivo. Lo cierto es que las drogas no son para todos, o más explícitamente, no todas las drogas son para todos pues su uso tiene mucho que ver con la química natural del propio organismo al que son administradas; esto no sólo asegura un grado casi nulo de adicción en la mayoría de los casos, además, sus efectos funcionarán específicamente para lo que se supone fueron naturalmente diseñados.  

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