Gabriela Y La

Siendo que Gabriela, ha demostrando desde el principio de sus actividades una actitud entusiasta, enfoque de responsabilidad y con apego a resultados, así como el contar con el apoyo del distribuidor para el que trabaja, hace ver que el hecho de eliminarla de la lista de gerentes que visitaran las instalaciones del cliente en Japón, sin una adecuada fundamentación sobre la razón y solo apegándose a usos y costumbres del fabricante, sea un caso claro de discriminación de género.

Las actividades de la empresa Senzei en México, siempre han estado marcadas por el estilo de negocios japoneses, la Dirección General y el Equipo de Liderazgo de la marca esperaría que sus distribuidores se identifiquen y apliquen los mismos preceptos. La introducción de una concepción igualitaria en esta materia se toma como un ataque a la esencia de la identidad empresarial y, por extensión, a los valores y principios de la cultura japonesa que regulan las relaciones entre géneros. En este sentido, no podemos obviar la importancia que la jerarquía tiene en la estructura social en Japón, al introducir y reafirmar relaciones de dependencia y subordinación muy acentuadas. Estos hábitos han sido idealizados y reforzados por la misma cultura como rasgo identitario (Figueroa – Saavedra, 2004)

El no alinearse a la visión del fabricante podría generar conflictos para el distribuidor que adoptara una posición opuesta a las creencias japonesas. Siendo que Gabriela cuenta con una posición predominante en la cartera administrativa del distribuidor y previendo una situación en que ella se sintiera ofendida, se debió haber manejado la negativa de otorgarle el premio de una manera que si bien no justificaría los resultados, si permitiría que ella entendiese que la decisión no fue tomada a la ligera, asegurando su continuidad dentro de las actividades gerenciales de la empresa y buscando de la misma manera que ella actuó con su personal cuando no pudo dar la remuneración por las utilidades de ventas generadas meses atrás. El hacerla ver que en la nación nipona Las desigualdades de género, siguen siendo sangrantes. En los primeros empleos no existe casi diferencia de sueldos entre los jóvenes de ambos sexos, pero conforme se cumplen años se agravan los desequilibrios. Según la Organización Internacional del Trabajo, el coste de los salarios de las mujeres en Japón es alrededor de la mitad que el de los hombres. (Higueras G, 2009).

Dado que Alejandro y Raúl Aguirre (ambos hermanos), son distribuidores de Senzei, y al menos uno de ellos ha generado altas utilidades al negocio, pueden impulsar dentro de los marcos de respeto económico y social, una mayor apertura al género femenino en el Equipo de Liderazgo del fabricante en México; externando que, en nuestro país podríamos hacernos acreedores a una mala imagen frente a los clientes, así como a sanciones por una posible demanda de discriminación de género. De

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