Gestion De Tesoreria

GESTION DE TESORERIA

La gestión de tesorería también conocida como cash management es el conjunto de actuaciones que la empresa lleva a cabo, para organizar sus cobros y pagos de tal modo, que siempre pueda hacer frente a sus obligaciones, y rentabilice al máximo sus excedentes. Es necesario tener un buen control de este elemento ya que es una pieza clave en la empresa y marca el buen funcionamiento de esta, ya sea a largo o corto plazo.

La empresa intentará mantener un saldo óptimo de tesorería, que responderá a los siguientes motivos:

• Motivo de transacción: para hacer frente al pago de las operaciones que constituyan su actividad.

• Motivo de preocupación: Pues la empresa debe mantener un nivel de tesorería superior al necesitado para las transacciones, con objeto de hacer frente a eventuales problemas de liquidez motivados por imprevistos.

• Motivo de especulación: para aprovechar ciertas inversiones que pueden surgir, no propias de su actividad principal, pero con elevada rentabilidad

Dentro de la gestión de tesorería, podemos diferenciar la gestión de caja y la gestión de las cuentas bancarias.

La gestión de caja

En la gestión de caja es muy importante la llevanza de un libro registro voluntario, donde se anoten diariamente todas las entradas y salidas de dinero en efectivo, así como los cheques entregados por deudores de la empresa, que permanezcan provisionalmente en la caja hasta su ingreso en las cuentas bancarias. Las anotaciones que se efectúen en el libro registro de caja, se trasladarán al libro Diario, y posteriormente al libro Mayor.

Una eficiente gestión de caja implica, entre otras cosas:

• Designar a un responsable de las operaciones de caja, y a un sustituto del mismo, debiendo anotar éstos las operaciones de forma diligente.

• Prever, con tiempo suficiente, los pagos y los cobros en efectivo que se van a efectuar cada día.

• Procurar que todos los cobros y pagos se encuentren justificados documentalmente a través de recibos.

• Efectuar diariamente, al término de la jornada, un recuento y un arqueo de caja.

La gestión de las cuentas bancarias.

Las empresas suelen depositar parte de su dinero en entidades bancarias. De ese dinero, solamente tiene la consideración de tesorería, el que se encuentra materializado en cuentas corrientes y en cuentas de ahorro, ya que éstas se caracterizan por su disponibilidad inmediata. Es práctica habitual en las empresas, llevar un libro registro voluntario por cada cuenta bancaria, donde se irán anotando los distintos movimientos (domiciliaciones, transferencias, cheques, etc.) que se refieran a la misma.

La gestión de las cuentas corrientes (que son las más utilizadas por las empresas) requiere, entre otras cosas:

• Cumplir las recomendaciones de las entidades bancarias, a la hora de usar los cheques.

• Comprobar que todos los cheques emitidos se reflejan en la hoja de control del talonario e inmediatamente se anotan en el libro de bancos.

• Registrar en el libro de bancos, por medio de los extractos bancarios, cualquier otra operación hecha a través de cuenta corriente: domiciliaciones, transferencias, letras, etc.

• Archivar los extractos bancarios por orden cronológico.

• Efectuar conciliaciones bancarias periódicas.

• Prever, con la suficiente antelación, los posibles descubiertos que se puedan producir en la cuenta corriente, para tomar las medidas necesarias.

FUNCIONES DEL DEPARTAMENTO DE TESORERIA

Gestión de cobros a clientes y pagos:

Es muy importante que exista una buena coordinación entre ambos aspectos para evitar picos o carencias de tesorería. Por lo general se suelen establece periodos fijos de cobro/pago, como por ejemplo el día 15 de cada mes, la contabilización de todas las operaciones de cobro y pago son fundamentales para un correcto control.

Control del cumplimiento de las condiciones pactadas con las entidades financieras:

Es muy habitual que las empresas, sobre todo aquellas con un gran volumen de facturación, negocien con aquellos bancos con los que opera, la reducción o incluso la eliminación de ciertas comisiones y tasas. A pesar de la existencia de estos acuerdos, es muy necesaria la revisión y el seguimiento en el cumplimiento de los mismos por parte del departamento de tesorería.

Control de las liquidaciones de intereses de las cuentas:

Así mismo como se debe controlar el pago de tasas y comisiones para no perder dinero, es muy importante el control de las liquidaciones de intereses en cuentas bancarias remuneradas.

Compraventa de moneda extrajera y gestión de cobertura de riesgo en divisas:

Estar al día en el mercado de divisas es fundamental para aquellas empresas que realizan pagos en las mismas, una buena información puede ahorrar mucho dinero a la empresa si se adquieren divisas en ciclos bajistas y en previsión de pagos.

Toma de decisiones una vez conocida la posición de tesorería diaria:

Una vez que el responsable del departamento de tesorería conoce cuál es la posición, deberá tomar decisiones sobre qué hacer con el líquido disponible teniendo en cuenta siempre las previsiones en cuanto a necesidades de tesorería se refiere.

EL PRESUPUESTO DE TESORERIA

Es la previsión del desarrollo de entradas y salidas de efectivo (cobros y pagos) en una empresa durante un periodo determinado de tiempo, generalmente un año. El objetivo que se pretende alcanzar es el equilibrio presupuestario, es decir, no obtener ni superávit ni déficit.

Si existe superávit hay excedentes de recursos que podrían ser invertidos para obtener rentabilidad en vez de estar inmovilizados

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