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Trasnporte Del Vino


Enviado por   •  8 de Mayo de 2013  •  2.639 Palabras (11 Páginas)  •  320 Visitas

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TRANSPORTE DEL VINO

Métodos de transportar el vino:

Los tres temas importantes cuando en vista del método de transportar el vino está el tiempo (del punto de la compra a la destinación), la temperatura (que el vino será mantenido en a través del viaje) y coste.

La edición más grande del coste es el factor tiempo aunque el control de la temperatura también aumente el costo de transportar los vinos. Pero si el vino se requiere en una acometida espere que cueste considerablemente más que si hay un plazo de obtención largo. Los únicos medios de transportar el vino sobre una distancia (e.g. dentro de una semana) son rápidamente al flete aéreo él vía una logística o una compañía de mensajero especializada - típicamente cálculo del coste tanto como diez veces más que el envío del mar cuando están analizados a a por base de la botella

La temperatura ideal para transportar el vino debe ser no más alta o bajar que condiciones óptimas de la puesta en bodega. Así es importante asegurarse de que los vinos están guardados dentro de una gama de temperaturas constante 10-15 de la necesidad del vino de los grados C. no expuesta a los extremos de la temperatura durante el transporte. Cuando está expuesto a las temperaturas mucho sobre 30 grados de C, particularmente cuando el vino ha venido de un ambiente fresco, el líquido en la botella puede ampliarse, comúnmente dando por resultado salida o, en los peores casos, los corchos que se fuercen parcialmente o totalmente de las botellas. Inversamente, si las botellas se exponen a las temperaturas excesivamente frescas mucho debajo de -5 grados C, el vino podría dar vuelta para helar también dando por resultado la extensión pero en este caso hay otro peligro de la botella de vino que estalla realmente de la presión. Incluso si el vino no congela realmente, la exposición a las temperaturas excesivamente frescas debajo de 0 grados podría comenzar la precipitación prematura de los cristales del tartrato fuera de la solución, rindiendo estético la molestia sin embargo de la sedimentación cristalina inofensiva en la botella. Finalmente, la temperatura que los panoramas extremos se deben evitar desde entonces incluso si permanecen las botellas y los corchos intacto, el vino sí mismo habrá sido alterada casi ciertamente irrevocablemente.

Camión

El uso de camiones/de carros es un acoplamiento inevitable en la cadena de la entrega del vino. El movimiento del vino del sótano a un vehículo del transporte de ultramar (nave o plano) y entonces al sótano de la destinación final/a la facilidad del almacenaje requiere un vehículo de transporte de temperatura controlada especializado, en todos sino algunos climas excepcionales y/o meses templados. Un camión refrigerado para la colección y la entrega del vino parece un pan comido obvio, con todo muchos de los expedidores grandes no los utilizan siempre debido a el costo y el coste del vehículo para funcionar. Particularmente si los vinos se están recogiendo durante meses del verano, es el mejor insistir que el expedidor utiliza un camión refrigerado del sótano al buque de carga

La situación óptima (sin embargo no siempre disponible) está para que el vino sea cargado del sótano directamente en un envase refrigerado del mar (del chaquetón) con la unidad de refrigeración del envase tapada en el camión. El envase después se transfiere sobre el barco, se desenchufa idealmente solamente para el corto período de tiempo entre dejar el camión y se coloca en el asimiento del cargo

Flete del mar

El flete del mar sigue siendo en gran medida el método más común de transportar los vinos sobre distancias largas, sobre todo porque es considerablemente más barato que el flete de aire. Pero los viajes del mar son relativamente lentos con un viaje de Europa a Asia que toma dondequiera a partir de 3-6 semanas, dependiendo de la distancia de la destinación final, de la condición de los mares y del número de puertos de llamada implicados

LA BOTELLA DEL VINO

Ya hemos hablado anteriormente en este blog sobre la importancia de la conservación del vino una vez que este ha salido de la bodega. Aparte de una buena vinoteca donde el vino pueda seguir evolucionando correctamente, debemos destacar dos factores del “envase”, uno es el corcho y otro la botella.

No debemos olvidar que el vino es un ser vivo y seguirá evolucionando en el interior de la botella hasta su momento óptimo de consumo. Dependiendo del tipo de vino y de la forma de almacenarlo, ese momento óptimo llegará antes o después. Una vez superemos ese punto, el vino empezará a perder cualidades…

Hoy en día, el vino se envasa mayoritariamente en botellas de vidrio, aunque existen otros materiales como bricks o latas especiales para vino, ninguno de estos es aconsejable para conservar el vino por largo tiempo. No obstante, la botella no se empezó a usar para envasar vino hasta el siglo XVII, ya que con anterioridad a ese periodo se empleaban otros materiales tales como ánforas de barro, tripas de animales o barriles de madera.

Hagamos un breve repaso por los más comunes tipos de botellas que encontramos en el mercado. En cuanto a la forma, pueden ser:

• Borgoña: El diseño más antiguo de las que se conocen. Toma su nombre de la región en la que se creó. Presenta los hombros en pendiente, lo que le confiere un aire estilizado.

• Bordelesa: La más común de todas. Al ser cilíndrica, permite el almacenamiento de los vinos en posición horizontal sin ningún problema.

• Rhin: Originaria de la zona del río Rin (Alemania). Su forma es muy estilizada gracias a su altura y hombros en caída.

• Cava o Champagne: De hombros bajos y paredes muy gruesas, cuenta con una oquedad en su base para resistir mejor la presión de los vinos espumosos.

• Jerezana: Muy similar a la bordelesa, es sin embargo una aportación española. Presenta un abombamiento en el cuello y un gollete en dos fases.

En cuanto al tamaño es importante saber que influye de manera considerable en el envejecimiento y conservación del vino. La evolución del vino es más lenta a medida que aumenta el tamaño de la botella. Tenemos:

• Benjamín: 18 cl.

• Tres octavos: 37 centilitros.

• Tres

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