Análisis de la película "La Ola"

Psicología Institucional – Cátedra II

Parcial Domiciliario

Ayudante de trabajos prácticos: Volz, Flavia          Comisión: 51

Apellido y Nombre: Guzmán, Micaela                     DNI ó L.U.: 38424107

El siguiente escrito tiene como finalidad el análisis de la película “La Ola” a partir de los conceptos de: cultura organizacional y ritos, estructura libidinal, momentos de transformación de la estructura libidinal, y encerrona trágica - cultura de la mortificación. A fin de realizar un análisis más completo, también se utilizará como recurso una entrevista de Ron Jones^[1], el protagonista real de la historia.

Cuando el docente Rainer Wenger inicia el experimento decide comenzar por pequeñas modificaciones en los patrones de la conducta de los estudiantes. Así pues, exige a los alumnos un cambio en su postura al sentarse, los obliga a llamarlo de ahora en más "Sr. Wenger", ordena ponerse de pie a la hora de hablar, y acomoda a alumnos con notas malas al lado de alumnos con mejores, entre otras cosas. A través de estas reglas, Wenger intenta transmitir los beneficios de tener como valores la disciplina y el trabajo en equipo. Estos códigos de conductas obtuvieron buenos resultados al punto que los alumnos los adoptaron rápidamente sin cuestionamiento y, a la par, su rendimiento mejoró notablemente. Por ello, se fueron transmitiendo a los nuevos miembros los valores de disciplina y unidad como la manera correcta de actuar, pensar y sentir.   Esto se verifica cada vez que, por ejemplo, un alumno olvidaba llamar al docente “Sr. Wenger” y rápidamente sus compañeros le señalaba el modo en que debían comportarse.

De acuerdo con Schein (1984) lo que aquí se configura es una cultura organizacional donde estos valores, creencias y reglas funcionaron tan bien que fueron considerados válidos por el grupo y, por ende, fueron enseñadas a los nuevos miembros como lo correcto. No obstante, no debemos pasar por alto que la clase del profesor Wenger se encuentra dentro de un organismo, el Instituto Marie Curie. Esta escuela presenta una cultura dominante que expresa los valores centrales que comparten la mayoría de sus miembros. En un principio, el curso del profesor Wenger desarrolló una cultura propia dentro de la escuela, es decir una subcultura en el seno de la cultura dominante. Sin embargo, a medida que “La Ola” creció y se extendió por otros grupos dentro del colegio, esta subcultura comenzó a transformarse en la cultura dominante del Instituto.

Según Schein (1988) la cultura de una organización está conformada por tres niveles que se ordenan desde lo más visible a lo verdaderamente dado por sentado, es decir lo naturalizado. Se ubica en el nivel de los artefactos culturales al uniforme, el logo, la página web, e incluso la conducta disciplinada de los miembros de La Ola. Por otra parte, los lemas promulgados por el fundador, “fuerza a través de la disciplina”, “fuerza a través de la unidad”, y “fuerza a través de la acción”, se ubican en el nivel de los valores expuestos, ya que visibilizan al conjunto de ideas, actitudes, sentimientos y valores que constituyen la causa y consecuencia de los artefactos. Finalmente, a pesar de que la experiencia duró sólo una semana, en ese corto tiempo su expansión en la escuela fue significativo, por lo cual podemos inferir que los valores anteriormente dichos, tales como la obediencia, se han naturalizado en los miembros de “La Ola”, al punto de orientar el comportamiento de gran parte de sus miembros.

Ron Jones, el protagonista real de la historia, relata en una entrevista que para los nuevos miembros se realizaba una ceremonia de iniciación donde debían jurar obediencia. Asimismo, todos los integrantes tenían que utilizar el mismo uniforme y realizar el saludo en forma de ola como señal de reconocimiento. De acuerdo con Baró (1972), para que un grupo logre su cohesión cada individuo debe sacrificar ciertos impulsos en pos del bienestar común. Con la presencia de cada miembro nuevo, esta cohesión se ve amenazada y generan angustia. Por esta razón, como modo de defensa se crean pruebas, requisitos, o prácticas que llegan a institucionalizarse bajo formas de rito. Así el grupo priva a los miembros nuevos de aquellos rasgos que siente como peligrosos para su estabilidad, a la vez que los nuevos miembros aceptan las condiciones que el grupo les impone para evitar la angustia de sentirse rechazado. Así es como en “La Ola” cada nuevo integrante que cuestionaba las reglas y valores del grupo era expulsados, debiendo ir a otro curso.

“La Ola” los convirtió a todos en

iguales, excluyendo ahora a quienes no estuvieran con ellos, a quienes no se

identificaban con sus ideales.

“La Ola” los convirtió a todos en

iguales, excluyendo ahora a quienes no estuvieran con ellos, a quienes no se

identificaban con sus ideales.

Rápidamente el grupo se convirtió en una unidad, donde había una cultura compartida que les daba una identidad y un sentido de pertenencia. No había aquí un lugar para las diferencias desapareciendo así la singularidad de cada individuo. La esencia de La Ola se sostiene en la estructura libidinal de la masa expuesta por Freud (1921).  Según el autor, la masa supone la identificación entre sus miembros a partir de situar el mismo objeto en el lugar del Ideal del Yo. Tal como se observa en la película, hay un efecto de fascinación mutua entre el líder y el grupo. El docente Wenger está situado por todos los miembros en el lugar del Ideal, y es esta identificación proyectiva compartida la que permite que todos los miembros se identifiquen entre sí. Entonces, primero ocurre la idealización de líder por todos los integrantes y después la identificación entre los pares. Cabe destacar que lo que mantiene cohesionada la masa es la ilusión de que el líder ama a todos los miembros por igual, sin esta ilusión habría una segregación.

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