Análisis sobre el libro “La piscología del mexicano”
Btojr14Tarea8 de Agosto de 2021
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Roberto Miguel García Santos
UVG
PSICOTERAPIA
Christian Alejandro Torres Carrera
Especialidad en Psicología clínica
Campus Tabasco
Villahermosa Tabasco, México
28/03/2021
Análisis sobre el libro “La piscología del mexicano”
Conclusión:
A la Psicología del Mexicano, se le da una completa continuidad a lo que fueron las primeras investigaciones acerca de la psicología, y la idiosincrasia de la cultura mexicana, en este libro se narra cómo se realizaron los estudios en torno al comportamiento individual y social de los mexicanos, para comprender mejor los aspectos que conforman su personalidad y su cultura, todo esto es ante la busca del desarrollo económico para México, se indagó en el carácter de todos los mexicanos y de los efectos influyentes de otras culturas que han producido deficiencia por parte del mexicano, en los ámbitos político, social y cultural de la vida nacional. Se tiene como resultado que la gran mayoría de los mexicanos son considerados por ellos mismos como inferiores o superiores a, por otra parte se considera el respeto como algo fundamental ligado al sentimiento del amor, el poder sólo lo emplean con aquellas personas a las que no aman y resultan abnegados ante la gente o las circunstancias, ya sea por pena, ser juzgados o simplemente para agradar a la otra persona, ésta manera de pensar es la que nos regresa al obscuro circulo socio-cultural que hay en México.
Este tema controversial a llegado a demandar de una gran parte del llamado de atención de muchos sociólogos, filósofos, psicólogos e inclusive Doctores y de muchos estudiantes de la investigación. Gracias al gran avance de la psicología en el país mexicano se ha logrado establecer e identificar parámetros y puntos de manera individual que logran identificar las características personales y sociales que logran caracterizar a los habitantes del pueblo mexicano. Pero para iniciar debemos recordar que el mexicano tiene complejo de inferioridad, y esto se debe a que no se visualiza o se identifica de forma personal o individual, si no lo hace de manera familiar lo cual hace que se sienta inseguro como individuo. El tipo de mexicano que usualmente la mayoría de los habitantes poseen son los obedientes hasta cierta edad, pero siempre se arraigan en el nicho familiar, ya que sienten que nunca estarán solos ante la sociedad y los problemas duros de la vida. En algunas ocasiones se les consideran ingobernables por sus padres, agresivos, dominantes e impulsivos; con un alta capacidad intelectual y habilidad de lectura, son líderes estudiantiles. Se les ubica regularmente en las clases media y alta.
La estructura de la familia mexicana se fundamenta en dos preposiciones principales: la supremacía indiscutible del padre; en donde hacen referencia al nacimiento del primer hijo que debe ser varón y enfocarse en actividades rudas propias de un hombre rígido y varonil, y el necesario y absoluto auto sacrificio de la madre; en donde cría a las hijas para apoyo en actividades domésticas y atender a sus hermanos varones, el tener como primer hijo a una niña es símbolo de preocupación y preocupación moral de la familia.
Hablando del hombre y conforme pasa su niñez, se indica que entre más grandes tenga los testículos o el pene, será más eficiente en el área sexual, o simplemente será el líder del grupo por haber iniciado antes sus relaciones sexuales; lo anterior lo convertirá en un verdadero “hombre”; en cambio con la mujer, después de haber aprendido como esclava las actividades propias de una dama, esperará pacientemente la llegada de su hombre ideal, que la transformará de ser esclava a ser reina; ya que la tratará como tal, brindará estabilidad y seguridad. Así la esposa mexicana entra, mucho antes de la maternidad, en el camino real de la abnegación, la negación de todas sus necesidades y la prosecución absoluta de la satisfacción de las de todos los demás. Dentro de la familia mexicana, el niño deberá ser obediente y sumiso, hablar con respeto delante de un superior, en caso contrario se reprenderá con castigo físico de así requerirse.
De esta manera se muestra que tanto en hombres como en mujeres la neurosis está latente, así como el estrés, pero que éste último es más propicio en mujeres que en hombres. Desde ésta perspectiva se podría decir que muchos conflictos que provocan neurosis en el mexicano son conflictos “internos”, provocados en mayor grado por colisión de valores que por choque del individuo con la realidad externa, la realidad, creada por la interacción de dos o más personas en una relación social o comunicativa: las actividades de uno hacia otro, las anticipaciones que uno tenga acerca del otro, los muchos intangibles conscientes e inconscientes de sus sentimientos mutuos. La realidad interpersonal, puede ser más importante en las relaciones humanas que la realidad externa. Los norteamericanos ven la realidad externa como algo que han de dominar y sujetar por su voluntad. Los latinoamericanos en cambio toman una actitud fatalista ante la naturaleza y se sienten subyugados por ella.
Los seres humanos tienen en sus manos crear los aspectos más importantes de la realidad interpersonal. El mexicano derivado de sus buenos gestos de amabilidad, prefieren perder un argumento que perder a un amigo, en cambio, los norteamericanos, ganan argumentos. Los mexicanos además de perder el argumento también pueden perder tiempo y dinero, por no perder el placer interpersonal. La habilidad que cada uno tiene respecto de las relaciones interpersonales nos ayuda para crear una correcta realidad, un problema de la motivación del trabajador mexicano parte de las hipótesis de que las expresiones contra el trabajo no son en sí mismo, sino a las condiciones del trabajo y nos lleva a observar las necesidades que motivan al ser humano como trabajador, de acuerdo a Maslow; este autor nos dice que no sólo son varias las necesidades que explican la conducta humana, sino que hay ciertas relaciones entre ellas, cierta organización o integración. Aquí interviene la propia estima y otras percepciones que son las evaluaciones que otros hacen de nosotros (como el prestigio o buena reputación), si se bloquea la satisfacción de estas necesidades, las personas mostrarán sentimientos de inferioridad, inseguridad personal, debilidad y desesperanza.
El amor y el poder como conceptos dentro del desarrollo de los mexicanos involucran obstaculizar su crecimiento y conducirlos a graves abusos. A través de la historia grandes personajes visualizan éstos conceptos considerándolos relevantes para sus actividades y para con ellos, obtener lo que necesitan, el problema de los mexicanos como individuos de la familia mexicana como grupo o sociedad, radica en distinguir con meridiana claridad el ejercicio del amor y el ejercicio del poder, ya que el desconcierto produce la incapacidad de modernizarse adecuadamente y de mejorar el desarrollo de México, para los hijos se tomó el acuerdo en base a estudios realizados por los psicólogos, es más destructivo sobreprotegerlos, que incluso ignorarlos o ser autoritario o irresponsable con ellos. Desde los inicios de vida hay que esclarecer la naturaleza, las potencialidades, las limitaciones y las consecuencias de las conductas humanas, en este caso los comportamientos del amor y del poder por otra parte los valores ejercen su influencia sobre aspectos de la conducta, el respeto por ejemplo es uno de los motivos centrales que mantienen unida a la sociedad humana. El patrón mexicano pinta el respeto como una relación extremadamente íntima, que involucra en alto grado fuertes sentimientos personales, deberes y dependencias recíprocas, a diferencia de los norteamericanos que sienten que el respetar significa que se tiene que obedecer a la persona respetada, queriéndolo o no. Aunado a lo anterior nos permite ver la forma objetiva de comparar los valores de dos o más culturas, midiendo las semejanzas o diferencias de estas.
En la cultura mexicana está la clara tendencia que da la supremacía al hombre y el autosacrificio a la mujer, los norteamericanos prefieren anticiparse a una relación interpersonal no autoritaria. En ambas sociedades la persona que recibe respeto aumenta por su posición social (status). En México el respeto por la mujer es manifestado simplemente por el hecho de ser mujer. Quien recibe respeto en una sociedad automáticamente adquiere status o cierto grado de “posición social” en la misma. En Estados Unidos respetar, es únicamente a la gente que se le considera superior y en México, se respeta a la gente que se ama o se le tiene afecto. En ambas culturas todas las personas “mayores” reciben alto respeto.
En lo que refiere a la gente rica, recibe significativamente más respeto en México que en los Estados Unidos. El respeto se puede considerar como uno de los factores o ingredientes que intervienen en la producción del status de un individuo en una sociedad determinada, entonces, la gente de bajo status socio-económico en México puede tener alto status de respeto social. En la sociedad norteamericana, ésto diferiría. Lo que nos deja como resultado que los valores humanos son más importantes que los valores económicos para los mexicanos, que para los norteamericanos, que dirían que todos los seres humanos nacen iguales, tienen igual oportunidad y, por lo tanto, respetáremos sólo a los que aprovechando tales oportunidades se hagan económicamente fuertes.
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