ESTIMULACION TEMPRANA

LICENCIATURA EN EDUCACIÓN INICIAL

1º AÑO

Estimulación Temprana

SEDE:

Ramos Mejía

PROFESORA:

Lic. Maria Graciela Mauro

AÑO:

2011

INTEGRANTES

Sirico, Natalia /aguspin06@hotmail.com

Tavella, Paula / paulitavella87@hotmail.com

Toledo, Valeria Belén / v_belentoledo@hotmail.com

Vigo, Andrea / andre-v76@hotmail.com

011-4692-1203 / 1560586301

Fundamentación

¿Qué es la estimulación temprana?

La estimulación temprana se trabaja desde los 0 a los 3 años de vida, éste mejora y enriquece las capacidades mentales, físicas y afectivas del sujeto, el adulto y la interacción con el medio acompaña al niño a enriquecer en todos los aspectos de su desarrollo.

“Se fundamenta en que la maduración cerebral no termina con el nacimiento sino que prosigue un tiempo después lo cual permite aprovechar esta plasticidad para mejorar las expectativas del desarrollo”1

Esto quiere decir que estos 3 primeros años de vida serán primordial para favorecer un mejor progreso.

En los primeros años de vida ocurren las adquisiciones más importantes, es por esto que al formar parte de la educación, consideramos que es de sumo valor estimular las capacidades del niño de manera armónica, sin alterar el curso de su desarrollo y potencializar al máximo sus habilidades y destrezas, ya que lo ayuda a crecer respetando su ritmo natural de evolución, esto implica tener herramientas y criterios básicos para realizar una planificación de estimulación temprana. Si bien es cierto, no existe un modelo único, puesto que cada niño tiene sus propias particularidades y diferencias, además debemos establecer un vínculo de amor humanizado y contenedor mediante abrazos, gestos amorosos, sonrisas, besos, suaves caricias y mimos. Siendo este el motor para que el niño se desarrolle y crezca sanamente en un ambiente cálido donde el acompañamiento y el cuidado personalizado será brindado a cada uno de ellos.

La infancia es una etapa privilegiada en la que se construyen las bases necesarias para el desarrollo de un niño como ser social.

En la medida en que se brinda mayor atención en la educación de los más pequeños es posible desarrollar las funciones cerebrales, estimular y fortalecer cada una de sus etapas, crear una estructura sana y fuerte mediante juegos y ejercicios.

Las madres lo hacen espontáneamente y naturalmente con sus hijos en los primeros años de vida.

1 estimulación precoz en los primeros años de vida, Jordi San Salvador Ed. Ceac)

Se trata de un saber inconsciente transmitido a lo largo de generaciones, constituido y retrabajado en cada madre en función de su historia individual en el ceno de la cultura en que vive.

La estimulación debe ser sistemática para nosotras es decir regulada por una planificación que se realice a diario y debe centrarse en todas las aptitudes según las características específicas de cada niño, tomando en cuenta su cultura, su historia, respetando sus tiempos y necesidades.

En el presente trabajo se desarrollarán las conductas esperables de los niños y niñas de 12 a 24 meses, con el fin de generar un espacio de observación e investigación en nuestra tarea diaria, lo cual nos ayudará como docentes detectar tempranamente probables déficit en el desarrollo, y así realizar acciones de orientación y apoyo para el niño o la niña y su grupo familiar, desde una dimensión preventiva e enriquecedora, dentro de la estimulación temprana.

Luego de hojear, leer y releer bibliografías con el fin de darle un marco teórico al trabajo, daremos y tomaremos como punto de partida los siguientes dominios:

• Comunicación social afectivo: De lo cual se refiere a incluir las experiencias afectivas y la socialización del niño, que le permitirá sentirse querido y seguro, capaz de relacionarse con los otros de acuerdo a normas comunes.

Una parte fundamental dentro de la estimulación está dirigida a la necesidad del niño de obtener gradualmente un mayor grado de autonomía estableciendo un equilibrio con los hábitos de independencia personal.

Los niños según sus características personales demandaran diferentes actitudes de los adultos. Algunos requieren ser impulsados, mientras que otros necesitan un marco contenedor. En cualquier caso el deambulador debe sentirse seguro afectivamente para atreverse a ejercer su autonomía, sabiendo que cuando lo requiera estarán los brazos del adulto quien le brindará el sostén para reafirmarlo.

• Sensorial perceptual: Le permitirá al niño comprender, relacionarse, adaptarse a nuevas situaciones, haciendo uso del pensamiento y la interacción directa con los objetos y el mundo que lo rodea.

La inteligencia del niño está presente y se manifiesta de forma práctica, desde que nace, ve, oye, se comunica y percibe un sin número de estímulos que le permiten conocer el medio que lo rodea y construir su pensamiento, interactuando y creando relaciones y comparaciones entre ellos.

• Psicomotriz: Está relacionada con la habilidad de moverse y desplazarse, permitiendo al niño tomar contacto con el mundo. También comprende la coordinación entre lo que ve y lo que toca.

Considerando que el movimiento es el principal generador de cualquier dinámica que experimenta el ser humano, las actividades tienen el propósito de contribuir al establecimiento del tono muscular y las reacciones equilibradas que le permiten un mejor control, ubicación en el espacio y relacionarse con el medio que lo rodea.

“El niño desarrolla una intensa actividad motriz, gusta probar su propia fuerza, puede empujar y apretar fuertemente no solo objetos sino a otro compañero, pueden morder, tocarse o tocar a otros, introducirse en espacios reducidos o investigar los orificios del cuerpo. Estas conductas revelan dos modalidades básicas que están presentes en cada una de las acciones del deambulador: aferrar soltar. Soltar. Ambas revelan la existencia de un proceso general que apunta hacia un paulatino control sobre

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