Interrelaciones De Calidad Laboral Y Responsabilidad Social En La Competitividad De Empresas Familiares.

Interrelaciones de calidad laboral y responsabilidad social en la competitividad de empresas familiares.

Antes de iniciar a dar significados, citar bibliografías e investigar sobre la calidad de vida laboral, la competitividad y la responsabilidad social, deseo escribir un caso de estudio que puede estar pasando en las empresas familiares y/o multinacionales de Colombia, latinoamericanas o el mundo.

El caso es “un producto vencido o de mala calidad, que es ofertado, comprado y consumido por un cliente”, para no pasearme por diferentes estilos de producción o venta, me voy a centrar en lo que laboro, una empresa de comercio al retail –comercio al por menor-.

Hechos, un cliente adquiere un paquete de queso, por ejemplo, lo cancela y lo consume en su hogar con su familia, se intoxican, ya que el queso estaba alterado en su composición química, se observa la fecha de vencimiento, pero estaba correcta, ya que faltaban dos días para expirar, según información del empaque.

La familia, como puede saber si es otra cosa o si de verdad el queso fue el causante de los daños a su organismo?

La calidad de vida laboral, la competitividad y la responsabilidad social no siempre saltan a la vista de los clientes y/o consumidores de nuestros bienes o servicios, son transparentes y están en la mente y cuerpo de cada miembro de la organización que comercializa algo.

Lo sucedido en el queso es que se rompió la cadena de frío con la que debe permanecer el producto, llegó al almacén en excelentes condiciones, pero se le envía al operario que debía guardarlo o surtirlo en el lugar adecuado, y no lo hace, ya que estaba ocupado realizando otras labores y sin importar lo dejó a temperatura ambiente durante 5 horas.

Entramos a analizar lo que le pudo haber pasado al operario; él, viene de turno extenso ese día, ya había laborado las 8 horas y le dijeron que debía volver a trabajar, ya que tenían poco personal y que debían realizar todas funciones, las propias y la de los demás, él recibe el pedido, pero como debía hacer otras funciones y lo estaban solicitando, dejó los productos cerca del lugar indicado, y se fue. Eran tantas las ocupaciones que llegó la hora del descanso y no se percató que aún estaba el queso por fuera de la cava –cuarto frío-, al volver, luego de 5 horas de haber recibido el producto, observó el queso y lo entró a la cava.

La calidad de vida laboral del trabajador está muy afectada, ya que debe realizar más funciones de las que debe cumplir, además que debe trabajar más horas, y el descanso es poco placentero, ya que su cuerpo y mente, se sienten cansados y la capacidad de realizar bien las funciones cada vez disminuye.

Con una calidad de vida laboral en constante detrimento, la competitividad del propio trabajador y de la empresa también disminuyen, ya que el trabajador cumple con todas las funciones que le asignan en una jornada laboral muy extensa, pero todas estas funciones no son realizadas con la misma eficiencia y eficacia, con la misma calidad que se debe tener y eso hace que en muchas ocasiones, como lo sucedido con el queso, estemos dañando a otras personas, dejando nuestra responsabilidad social en entredicho.

En conclusión, una calidad de vida laboral deficiente, hace que la competitividad de las personas no sea la mejor, llevando consigo que se comentan errores que afecten a los demás, perjudicando la salud –como en este caso- de la familia, dañando nuestra responsabilidad social.

La empresas que no ofrecen una calidad de vida laboral óptima, poco a poco, ven disminuida la competitividad frente a otras empresas, ya que sus trabajadores no van hacer las cosas con amor y entrega, siempre van llegar a su puesto de trabajo con prejuicios, se volverán maliciosos y estarán dispuestos a mejorar la organización, todo esto se traduce en errores que afectan a todos.

Competitividad en empresas familiares

Para que una empresa pueda ser competitiva a nivel local, regional, nacional o internacional, dada las circunstancias del libre comercio como lo estamos viviendo, debe entregar a cada uno de sus clientes un valor agregado, un motivo para que compren los productos de nosotros y no de la competencia, debe ser capaz de estar a la vanguardia de la ciencia y tecnología, y de asociarse con otras empresas para estar de la mano y competir de la mejor manera posible contra grandes o pequeñas organizaciones que desarrollan su trabajo en el mismo campo en el que estoy.

Para lograr que una empresa sea competitiva, se debe comenzar en casa, dentro de cada trabajador, ya sea el gerente o el obrero, debemos incluirlo en todo sentido, conocer sus pensamientos y que pueden aportar, no solo la junta directiva pueden tomar las mejores decisiones, los obreros que viven el día dentro de la organización pueden hacer aportes grandiosos al mejoramiento continuo del desarrollo organizacional.

Otro de los factores que se debe tener en cuenta como nos lo cuenta Barbosa, D., & Sandoval, A. (2011) No sólo la inversión en capital humano, específicamente en capacitación, tiene impacto en la competitividad de la empresa, también lo tiene el conocimiento que se obtiene del sector, región o localidad en donde se opera, a través de la difusión de conocimientos, interacción o cooperación empresarial y movilidad de los trabajadores.

Responsabilidad social

Como la gran mayoría de los empresarios y nosotros mismos, particularmente mi persona antes de iniciar la investigación, creía que la responsabilidad social era parte externa de la organización, o sea, que debía incluir a todos factores externos –clientes, competencia,

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