PRINCIPICIOS DEL APRENDIZAJE

PRINCIPIOS DEL APRENDIZAJE

La actividad del conocimiento está ligada estrechamente con el desempeño docente, y aunque muchas de las circunstancias que se viven en un aula son compresibles en un primer término, una referencia teórica siempre será importante, considerando que hay quienes no somos profesores de formación. Lo anterior me ha hecho suponer que existe más de una estrategia que seguir para ser aplicada en el aula, sin la necesidad de abandonar un esquema definido como lo pueden ser las teorías del aprendizaje.

Siempre he creído que el ejercicio del conocimiento debe estar directamente relacionado con la memorización a través de circunstancias de la vida cotidiana.  Es ahí donde convive el germen del principio de la transparencia, ese momento en que el aprendizaje es susceptible a aplicarse en distintos contexto y situaciones.

Debo reconocer que este planteamiento me ha generado una doble consideración, dado que los jóvenes tienen una apreciación distinta según sus circunstancias fuera y dentro del salón de clases.

A simple vista, los procesos de aprendizaje pueden ser modificados según convenga; sin embargo, las dinámicas, aunque no absolutas, sí contemplan seguir una metodología, un paso a paso que muestre ciertos avances. En eso mismo ha de desarrollar otro principio como el de participación, que pueda ser aplicado por los estudiantes siendo propiamente ellos los actores del proceso. El volver al joven, hablo de educación superior en todo momento, experto en el desarrollo de sus funciones académicas, implican una serie de dinámicas que a los muchachos debería volverlos críticos y portadores de argumentos si en algún momento optan por resoluciones diferentes respecto de problemas comunes.

Me asumo, solamente como periodista (aún no como formador), capaz de poder brindar estrategias de apoyo para los jóvenes en el sentido más real de una profesión convulsa, es por ello que el principio de resultado creo que nace con la motivación de nuevos retos en la profesión, sobre todo cuando de forma autónoma van creando los alumnos posibles hipótesis sobre realidades evidentes en los medios de comunicación actuales.

Y es que a fin de no desechar ninguno de los principios, es de interés prestar mayor atención en aquellos que realmente agilicen el desarrollo de las clases con los jóvenes y sobre todo su aprendizaje, considero pues indispensable hacer énfasis en algunos aspectos humanos antes que profesionales, es decir, debemos los docentes ser conscientes del grado de interpretación cultural, afiliación o tal vez categorización dentro de un aula como personas y no únicamente como ejecutores de aquella responsabilidad académica de la que se nos habla en todo momento.

Eso que planteo es precisamente lo que puede mejorarse, sobre todo cuando se minimiza la estructura del aprendizaje y se le da mayor peso al sujeto –posiblemente esto pueda verse como un problema común en el aula– y es lo que varios de estos principios, sobre la participación activa del los alumnos en el sistema social, nos promueven herramientas en busca de alguna respuesta no tan fuera de lugar.

En ese mismo orden de ideas, considero que aún falta en mi situación docente, lograr una fusión de todos los anteriores principios para generar un estímulo mayor en el salón. Aún así, admito la hermandad de parte de los grupos de trabajo para involucrarse de lleno con los temas planteados en los planes de estudio vigentes. Eso mismo me llena de más oportunidades y me compromete a tener un desempeño de calidad.

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