Recursos Humanos

COMO UN ENGRANAJE

Desde los inicios de la creación el hombre se ha visto en la necesidad de la búsqueda de su propio beneficio para la supervivencia en el planeta tierra. Lógicamente nuestros ancestros lo hacían de forma natural y con sus propias manos, es decir, la caza de animales para alimentarse, la construcción de viviendas y las herramientas que utilizaban al paso de los días, ya sea para defenderse o para cazar. A lo largo del tiempo la evolución jugo un papel importante tanto en los hábitos del ser humano como también en la innovación de nuevas herramientas, evoluciono la forma de ver el mundo, las creencias religiosas, la forma de vestir e infinidades de conceptos que van relacionado a la estancia o permanencia del hombre en la tierra.

La administración de los recursos y el aprovechamiento de estos ha sido un gran paso para el desarrollo íntegro del hombre, sus pensamientos, los conocimientos, y la capacidad de gobernar en un mundo donde todos somos iguales ha hecho de los tiempos actuales un espacio de innovación y cambio en todas las áreas de estudio e investigación que llevamos a cabo. La administración de los recursos ha desencadenado ciertas áreas del conocimiento para la aplicación en las empresas u organizaciones que trabajan con personal que van encaminadas al bienestar del empleado y el empleador, en un concepto bastante general, la administración de los recursos humanos.

Para tener en cuenta y sin profundizar en los conceptos de este tipo de administración, a lo largo del tiempo se han generado cualquier cantidad de conceptos, conocimientos, prácticas, guías acerca de cómo manipular a favor los recursos humanos, o más bien las competencias de la persona a quienes vamos a contratar en nuestra empresa, para que desempeñe cierto cargo dentro de esta.

Diferentes han sido los autores que han dedicado tiempo de sus vidas para el estudio y reflexión de ciertos comportamientos que nosotros los seres humanos, desarrollamos en la extensión de nuestra forma de vivir teniendo en cuenta los conocimientos, habilidades y competencias que hemos adquirido durante los años de estudio y vivencias personales. Solo por nombrar tres títulos que han hecho relevancia por la forma de expresar algunos de nuestros comportamientos ocultos en el desarrollo de nuestras actividades como empleados o empleadores, hablare de El principio de Peter, la carta a García y la ley de Parkinson. A simple vista son tres títulos que no llevan relación alguna.

Antes de leer estos libros pensé, solo por el título, que ninguno de los tres tenía nada que ver con el otro, y efectivamente es así. Son tres pensamientos diferentes de los autores, pero que por algún motivo llevan una secuencia coincidencial de un tipo de comportamiento que se manifiesta cuando tenemos o hacemos parte de una empresa. La construcción secuencial de las ideas van desde el principio de Peter que hace referencia a un llamado a tener en cuenta la selección, la claridad del cargo, las funciones del puesto, y las actitudes y aptitudes de la persona que ocupara el cargo dejando una reflexión clara de que no todos somos capaces de realizar ciertos trabajos o actividades, solo por el comportamiento que tuviste en un cargo anterior o una experiencia ya vivida, es decir, el hecho de ser buen trabajador, ejemplar y con la actitud adecuada, no indica que esta misma persona sea buena en el cargo siguiente al que está en la cadena jerárquica de la empresa.

Como consecuencia de esto a mi parecer, el autor de la carta a García, pensó en lo que desencadenaría una empresa donde los trabajadores estén contagiados por el principio de Peter, como resultado de esto está “la incapacidad de los trabajadores para la acción independiente de sus labores o actividades, la iniciativa personal, no hacer trabajar la propia inteligencia esta flojera de voluntad y la desgana impresionante de resolver por si mismo los obstáculos, es lo que retarda el bienestar colectivo de la sociedad y no deja a los individuos llegar al éxito… que lastima que a muchos lo único que les hace trabajar es la mirada amenazadora y la voz tormentosa del capataz o del vigilante del grupo.”

Y por último esta la pieza para el engranaje final de este ciclo de comportamientos humanos, que hace referencia al trabajo sobre trabajo que genera el desinterés de la carta a García y le da razón al principio de Peter. “un informe genera a su vez otros informes cada vez mayores. El informe cuando mayor sea, menos información da y más inútil es”.

Es muy difícil pensar al principio que estos escritos tuvieran algo que ver, desde mi punto de vista y para concluir, es sorprendente que temas tan sencillos que hacen parte del comportamiento del ser humano, sean de alguna forma un engranaje deteriorado de cómo nos vemos como sociedad, lo que le aportamos a esta y hacia dónde vamos con ella. Es importante resaltar que la actitud de la persona es cuestión de una formula sencilla que es la sumatoria de toda la experiencia desde que naces, aprendes y desarrollas, hasta ver funcionar esos ideales que tienes como ser humano. Si eres empleador sigue a Peter en su principio, si eres empleado siempre trata de llevar la carta a García y si haces parte de esto, nunca utilices la ley de Parkinson.

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