ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

QUE SE NECESITA PARA SER UN HIJO DE DIOS


Enviado por   •  20 de Agosto de 2014  •  1.314 Palabras (6 Páginas)  •  203 Visitas

Página 1 de 6

Que se necesita para ser un hijo de DIOS

INTRODUCCIÓN

A. Se cree que hacia el año 2010 "habrá más de 100 millones de huérfanos en el mundo" (worldschildrencenter.org). "UNICEF calcula que el número de huérfanos en aproximadamente 210 millones" (answers.google.com).

1. ¡Imagínese! A través del mundo existen MILLONES de almitas preciosas que no gozan del amor de una madre ni de la protección y consejo que ofrece un padre.

2. Las guerras tienen una habilidad espantosa de convertir a niños felices en huérfanos. Por ejemplo, se calcula que después de la Primera Guerra Mundial 9.000.000 de niños perdieron a sus padres. También se cree que el mismo número de niños tuvieron la misma suerte después de la Segunda Guerra Mundial.

3. En la actualidad, esta terrible tragedia sigue afectando a niños a través del mundo, gracias a las guerras, el SIDA y otras causas.

B. ¿Cómo se sentiría un niño o una niña al saber que sus padres se han muerto o que le han abandonado? Sólo pensar en un niño que tiene que vivir en la calle y buscar su comida en la basura nos da escalofríos.

C. Por muy trágica que nos parezca esta situación, todos nosotros nos hemos encontrado (o aun nos encontramos) en circunstancias similares.

I. LA BIBLIA INDICA QUE ÉRAMOS HUÉRFANOS EN UN SENTIDO ESPIRITUAL

A. Cuando nacimos éramos totalmente inocentes (Mr. 10:13,14; Ez. 18:20).

1. Nuestros padres terrenales nos dieron un cuerpo físico pero Dios nos dio un espíritu. Según Heb. 12:9, Dios es el "Padre de los espíritus."

2. No obstante, años después de nuestro nacimiento todos llegamos a ser responsables ante Dios como pecadores (Ro. 3:23).

B. En este proceso llegamos a ser huérfanos espirituales no porque nuestro Padre celestial hubiera muerto sino porque NOSOTROS habíamos muerto a causa del pecado.

1. Dios no murió en ninguna guerra ni en ningún accidente de circulación, sino a causa de NUESTRA PROPIA REBELDÍA fuimos separados de Él.

2. No nos abandonó a nosotros, como en el caso de muchos niños huérfanos. ¡Nosotros le abandonamos a Él! Perdimos esa relación que antes teníamos con Él A CAUSA DE NUESTROS PECADOS.

a. Los que viven en la desobediencia a Dios son como niños perdidos, andando sin rumbo mientras intentan dar sentido a su existencia (Lc. 19:10).

(1) Es una experiencia muy desalentadora cuando algunos se enteran que fueron abandonados por sus padres biológicos cuando eran niños. Algunos de los que han tenido semejante experiencia llegan a dudar de su misma existencia. Viven sin propósito de vida.

(2) ¿Es de extrañarse, pues, que los que se alejan de Dios tengan los mismos sentimientos de inseguridad y desesperación?

b. Como los huérfanos, muchos quedan reducidos a vivir de la "basura" de este mundo cuando Dios ofrece gratuitamente a todos el agua viva y verdadera comida espiritual (Jn. 4:10,14,34).

3. A causa de nuestra propia desobediencia, llegamos a ser hijos adoptivos de Satanás... pero él es un padre muy cruel. En lugar de dar protección y buenos consejos, Satanás hace todo lo que puede para hacer daño a su descendencia adoptiva.

a. Satanás me recuerda a la madrastra de la Cenicienta. Según el cuento, la Cenicienta sufre mucho a manos de su madrastra. A ella no le importa en absoluto el bienestar de su hija adoptiva.

b. Así es Satanás. En realidad, no es padre en absoluto porque el padre verdadero ama a sus hijos (Mt. 7:9-11; 1 Jn. 4:8).

c. Satanás, contrario a lo que hace el Buen Padre, nos mintió. Nos engañó. "...Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira" (Jn.8:44).

d. Es un ladrón que "no viene sino para hurtar y matar y destruir..." (Jn.10:10).

e. ¡Está claro que al diablo no le importa el bienestar de sus hijos adoptivos!

3. Dios jamás quería que fuéramos huérfanos ni hijos adoptivos de Satanás (1 Ti. 2:4).

a. NOSOTROS tomamos esa decisión tan tonta (Isa. 59:1,2).

b. Gracias a Dios, un día nos dimos cuenta de esta gran equivocación, volvimos a nuestro Padre y por

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (7.7 Kb)  
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com