EL MALESTAR DOCENTE

INTRODUCCIÓN

Introducción…………………………………………………………………………………………….2

Objetivos generales y específicos……………………………………………………………..2

Desarrollo…………………………………………………………………………………..……….3-10

Conclusión…………………………………………………………………………………………10-11

Bibliografía……………………………………………………………………………………………..11

INTRODUCCIÓN

Después de estar reflexionando durante un largo tiempo sobre qué tema debería realizar mi ensayo de fundamentos históricos, he estado indagando sobre temas que me resultaran interesantes y encontré temas diversos como: el acoso escolar, las nuevas tendencias educativas, la evolución educativa a lo largo del tiempo, el fracaso escolar…Finalmente, he decidido hacer mi ensayo sobre el malestar de los educadores en la actualidad, se me ocurrió por la película ‘La clase’ que vimos en el primer cuatrimestre y en ella se refleja el malestar del docente de una manera clara. Además, otro factor que influyo positivamente es que, en mi futuro como profesional me veré influida por ello y mediante este trabajo podré analizar de una manera más exhaustiva cual es la situación actual del docente. También reflejo de una manera subyacente las nuevas tendencias educativas que le influyen de manera negativa, además de los bruscos cambios que han ocurrido en la sociedad a lo largo del tiempo. Me parecía un tema interesante en el que además de un tema podía incluir varios.

OBJETIVOS GENERALES Y ESPECIFICOS

• Estimular el trabajo intelectual independiente y la libertad de opinión.

• Propiciar el desarrollo del pensamiento autónomo, crítico, reflexivo, divergente, convergente y creativo.

• Promover la construcción de conocimientos y el aprendizaje significativo en la medida que el escritor conecta y amplia los conocimientos.

• Estimular la inteligencia emocional, por cuanto es una vía para la realización personal, aceptación de sí mismo, desarrollo de la autoestima y el autoconcepto.

• Posibilitar el desarrollo ético y estético del escritor, al reconocer los aportes de otros.

• Ayudar a profundizar y organizar los conocimientos, pues escribir implica leer varias veces y aprender con significado.

• Analizar el papel del docente en la sociedad actual.

• Poder hacer una comparación educativa entre la actualidad y el pasado.

ENSAYO

Hemos escuchado bastante la problemática existente en el trabajo docente, entre amigos y la sociedad en general. Refiriéndonos al estrés del maestro, ese malestar que invade a casi todos ellos y que impide que sea completamente saludable el desempeño de su trabajo.

Tradicionalmente el maestro constituye en sí mismo un profesional de la enseñanza, cuya misión es lograr que los niños aprendan. Socialmente reconocido, hasta que diversos factores de la sociedad y de su relación con el contexto lo han puesto en conflicto, y han evidenciado ciertas carencias que son a veces difíciles de eliminar.

Por costumbre, en la preparación del maestro ha sido alardeado el hecho de que el profesor siga siendo transmisor exclusivo del conocimiento, siendo el absoluto poseedor de la razón. Años atrás se alababa y admiraba por su vocación e inteligencia al maestro. El padre, como autoridad, corregía estrictamente a los hijos, imponiéndose si era necesario con mano dura; la madre educaba a sus hijos para que fuesen respetuosos y estaba al pendiente que su hijo no importunara a sus mayores o la clase del maestro, quien a su vez disponía de los entonces oportunos recursos del autoritarismo y la memorización para lograr su cometido de enseñar.

Sin embargo, la sociedad ha ido evolucionando rápidamente. Por causas políticas, económicas y culturales fueron apareciendo cambios imprevistos para los cuales el maestro no ha sido preparado aún. Sin una estructura fuerte y estable de conocimientos, hasta hace poco la herramienta principal del maestro, éste ha visto su sensibilidad afectada. Con gran confusión trata de hacer su trabajo lo mejor posible, sólo que la carencia de reconocimiento, apoyo moral o por lo menos disposición total del contexto, englobando padres de familia, alumnos, medios de comunicación y sociedad en general, transforman sus ímpetus en ansiedad, concretando un estrés que anula su rendimiento

La dinámica actual que de pronto ha revolucionado todo el conocimiento científico y social, cambiando constantemente y reafirmando su inestabilidad e inexactitud. Los niños, que antes eran enseñados por sus padres y maestros, ahora se ven bombardeados por la influencia de los medios de comunicación, que se ven favorecidos gracias al descuido muchas veces no intencionado de los padres.

Las fuentes de enseñanza hoy día, no se limitan. Tan grandes como las redes de comunicación, suelen tener ciertas ventajas sobre la educación que se da en la escuela, por ejemplo, el entretenimiento y la comodidad que provee la televisión y el internet, además la búsqueda de la identidad fomenta el interés en la influencia ideológica que proyectan.

El contacto social entre la comunidad en general incluso ha cambiado debido al crecimiento y amenaza de las fuerzas capitalistas y al crecimiento demográfico. Por ser necesario que la gente defienda los propios derechos, a causa de la hostilidad del medio social que subyace a la supervivencia, así como el hecho de que en las requeridas cuestiones de progreso social se ha promovido una mayor conciencia de las fragilidades de los niños, ancianos, mujeres, personas de escasos recursos…; mencionando aparte la falta de recursos económicos, espacio y tiempo para vivir dignamente y atender la primera institución, que es la familia, con el cuidado que se había merecido hasta entonces, ha sido cambiada de una manera sin precedentes la dirección de nuestros intereses, necesidades y ocupaciones, y por lo tanto de nuestras prioridades a un ritmo hasta ahora imposible de seguir.

Como todo lo que pertenece a la sociedad: el maestro, la escuela, son un reflejo de ella, no se puede pretender que éstos sigan el mismo orden de siempre, mientras la sociedad va por un rumbo distinto, ya que la escuela es una respuesta a ésta y ha sido el camino de preparación para la sociedad misma. El maestro como parte fundamental para la educación, ha pasado de ser el principal proveedor de enseñanza a sólo un instrumento para cumplir con los estudios. En muchas sociedades se insta a los niños a dedicarse en el futuro a ocupaciones que requieran una escolaridad mínima, pero en las cuales se obtengan buenas entradas económicas, como el comercio o en los peores casos, narcotráfico u otros ilícitos, ya que en el competitivo mundo de las carreras y profesiones no se asegura el éxito, no obstante sí se tiene qué invertir bastante dinero y tiempo que para muchos es pérdida. Se ha cubierto la alta demanda de profesionistas, el saber está en muchísimos lugares y al alcance de muchos más, pero a la vez no promete solucionar los problemas de la vida actual y se observa en la mayoría que el culto al “tener” ha dejado muy atrás al del “saber”.

Sucede que las exigencias cotidianas apresuran y presionan a la población mundial para que evolucione y modifique su pensamiento y/o ideología. La escuela como mediador social tiene qué responder a esas exigencias y es en este punto en que lucha para no colapsar y dar solución a la búsqueda de un modelo de estructura confiable para sostener el crecimiento global de unos y otros.

Ahora bien, centrando de nuevo la atención en el papel del maestro y su malestar, el maestro tiene que desempeñarse en y para una sociedad con una cultura cambiante, donde el conocimiento de ninguna manera es estático, sino más bien dinámico, pues no existe un colchón seguro de conocimientos en ningún área. Los descubrimientos están a la orden del día y por si fuera poco las costumbres varían y cambian tanto que se vuelve más difícil el trabajo, la planeación y práctica de la enseñanza o por lo menos pone en conflicto la estabilidad profesional y personal del docente. Son menos predecibles los conocimientos, habilidades y el enfoque más requeridos por los alumnos en la sociedad presente y futura. Por lo que el profesor debe estarse preparando constantemente, lo cual le crea incertidumbre y estrés.

Una pregunta en la que tiene que basar su enseñanza el maestro es para qué va a servir lo que enseñe a sus alumnos, y no sólo eso lo mantiene alerta, ahora debe prepararse para poder dar prioridad a los distintos intereses que en la sociedad surjan y preocuparse por si siguen vigentes o han sido desfasados esos contenidos. Muchos niños conocen en la actualidad más sobre algunos temas de estudio que sus profesores y por lo regular están dispuestos a comentarlo, para los docentes no resulta agradable saberse no tan preparados como creían. Más allá de este problema se encuentra hasta qué punto le servirá a su alumnado lo que les enseña o si acaso estará preparando a personas para una sociedad que no existe.

Combinado a la problemática de las características del ciclo de renovación del conocimiento, el estrés por cumplir con las exigencias que traen consigo los avances, se encuentra el asunto de la disminución del tiempo que disponen los padres de educar a los hijos, de atender las necesidades de colaboración con la escuela

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