ENFOQUE PEDAGOGICO-DIDACTICO

AUTORAS

• Gabriela Pilar Cabrera

• Stella maris Boyuan

Una de las mayores dificultades del proceso de enseñanza aprendizaje consiste en esto:

“el maestro debería convencer al estudiante y asi mismo que lo que se aprende, se aprende para la vida y no para el breve espacio de tiempo ligado a una prueba, una verificación o alguna otra forma de evaluación”

INTRODUCCION

Este libro está destinado a maestros, estudiantes del profesorado y también para profesionales que se encargan de la problemática del aprendizaje matemático.

En este se muestra cómo manejar las herramientas teóricas y metodológicas que acompañan la toma de decisiones dentro de las aulas, inspirando creatividad, confianza, saber, arte, alegría, autogestión y superación a la hora de enseñar; se tiene en cuenta que en algunos casos los docentes deberán recurrir a re-aprender conocimientos matemáticos por ser implementados linealmente en su formación.

También podemos decir que este manejo de herramientas se plantea para que los alumnos aprendan “Matemáticas” con gusto, alegría, confianza y “sentido” y se les debe dar la oportunidad de opinar, de proyectar sus propios aportes o dudas, mostrando tranquilidad a la hora de pensar, de resolver problemas sin “miedo” al ridículo, fracaso o al error; creando una transformación positiva en la relación entre alumnos-maestros-saber matemático y la sociedad, teniendo en cuenta siempre la incrementación del trabajo en equipo.

DESARROLLO

La presencia de la Matemática en las aulas queda claramente justificada por su entidad en la sociedad. Desde pequeños nos contactamos con la matemática, la aprendemos y utilizamos para responder a las necesidades que nos va presentando la sociedad, la cual va construyendo un “saber practico” que la escuela debe ampliar y profundizar en sucesivas aproximaciones hacia el “saber experto” que posibilite la formación de ciudadanos críticos y reflexivos, capaces de favorecer cambios que humanicen y transformen constructivamente la sociedad en las que les toca vivir debiendo conocer a los alumnos, su entorno, su cultura, etc.

Los objetivos del docente son:

“tratar de conocer la realidad en la que viven nuestros alumnos, ya que mediante esta podemos tener acceso a su modo de pensar y percibir que es lo que saben y como lo saben”

“la escuela debe preparar a todo ciudadano para la integración satisfactoria en la vida de la sociedad a la que pertenece”.

La matemática al ser un producto cultural y una forma de pensamiento, es alcanzada por la mayoría de las personas que conforman la sociedad , para ello la escuela tiene la responsabilidad de dar a los niños la oportunidad para crear los cimientos sobre los cuales levantar esa forma de pensar propia de la cultura matemática, es decir que los niños logren descubrir esa belleza, esa luz, esos caminos que el conocimiento brinda a las personas para un sano vivir para que sean capaces de apropiarse de una buena parte de la cultura matemática e incluirse en ella como usuarios.

“Lo que propone la enseñanza de las matemáticas no es simplemente la transmisión de conocimientos matemáticos, sino la transmisión de una cultura. Entonces el aprendizaje escolar es, ante todo, un proceso de enculturación en la cual los estudiantes se integran gradualmente a una comunidad o cultura de prácticas sociales.

ENFOQUE PEDAGOGICO-DIDACTICO

Es muy importante elegir bien los aspectos del saber que deber formar parte de la cultura de cada ciudadano en un momento dado y la transmisión elegida ya que la actitud que los individuos tengan hacia el saber en la edad adulta dependerá en gran parte de las formas en que han realizado los primeros contactos con las ideas matemáticas, por ello los docentes tienen la responsabilidad y el privilegio de construir un clima en la clase de matemáticas en el que los niños se sientan confiados, capaces, alegres y les resulte familiar la matemática.

“si el enfoque pedagógico que se adopta lleva a los niños a dejar de lado su razonamiento lógico cuando se les enseña contenidos matemáticos, ellos aprenderán a adaptarse a las exigencias de la escuela, pero no aprenderán matemática, porque no es posible aprender matemática renunciando a pensar”

Guy Brousseau (un especialista en didáctica de la matemática) nos habla de las interacciones entre maestro-alumno-saber, los cuales tienen ciertas reglas y convenciones, denominado contrato didáctico, este establece un conjunto de comportamientos( específicos) del profesor que espera el alumno y el conjunto de comportamientos del alumno que espera el profesor, que regulan el comportamiento de la clase y las relacione entre ellos.

En este contrato se tienen en cuenta al alumno como constructor del conocimiento, el maestro desempeña el rol de mediador entre el saber y el alumno; y los problemas son considerados fuente, lugar y criterio de aprendizaje. El maestro ha de asumir una posición epistemológica respecto del conocimiento matemático, es decir, es necesario y prioritario que el maestro tenga control sobre sus concepciones epistemológicas, se las plantee concientemente reflexionando sobre pertinencia y modificando aquellas que asuma como no adecuadas, esto es determinante a la hora de seleccionar las estrategias metodológicas, para decidir que conocimientos son prioritarios enseñar en un momento histórico-socio-cultural, para considerar estrategias de evaluación y determinar las competencias que el alumno ha de acreditar en pos del desarrollo del pensamiento matemático.

En la medida que el maestro vivencie los modos de pensar propios de la matemática y pueda reflexionar sobre ellos, será capaz de promover el desarrollo de ese “modo de pensar” en los niños.

El maestro tiene la difícil tarea de comunicar a los alumnos un saber científico de manera que puedan apropiarse de él, y para ello es imprescindible que dicho saber sufra modificaciones que lo hagan accesible, esto se denomina “transposición didáctica”.

Son los problemas los que dan sentido a la búsqueda de un modo de solución optima que implica un determinado conocimiento matemático que resulta significativo. Este despierta la creatividad y anima

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