ENSEÑANZA Y APRENDIZAJE DE LA HISTORIA EN LA EDUCACIÓN BÁSICA

UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA VERACRUZANA

CENTRO DE ESTUDIOS REGIONAL PAPANTLA

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LICENCIATURA EN EDUCACIÓN BÁSICA

CONTENIDOS BÁSICOS DE HISTORIA

QUINTO SEMESTRE

ACTIVIDAD 02

ENSEÑANZA Y APRENDIZAJE DE LA HISTORIA EN LA EDUCACIÓN BÁSICA

REALIZO:

OTHÓN ROBERTO CALLEJAS REYES

ASESOR:

PROFA. EVA ROMERO ORTIZ

PAPANTLA DE OLARTE, VER.  NOVIEMBRE 18 DE 2017

1. ¿POR QUE Y PARA QUE ENSEÑAR HISTORIA?  Joaquín Prats, Juan Santacana.

1. EL VALOR FORMATIVO DE LA HISTORIA

La historia debe verse como una aproximación al conocimiento en construcción que debe realizarse mediante la indagación, la aproximación al método histórico y la concepción de la historia como una ciencia social. Por ello, debe definirse para ser enseñada como un cuerpo de saberes que además de incorporar lo que ya sabemos gracias a los historiadores, nos indicará como se construye el conocimiento y cuáles son los procesos y preguntas  que debemos formular para poder tener idea explicativa del pasado.

LA HISTORIA, UNA MATERIA MANIPULABLE: LA LLAMADA MEMORIA HISTÓRICA

La concepción del tiempo generada por nuestra cultura, facilito una concepción de la historia dotada de origen, desarrollo y fin. Aunque esta concepción es cultural por lo que no todas las civilizaciones perciben el tiempo histórico de la misma forma. Nuestra concepción lineal del tiempo y la historia,  se vincula con el desarrollo de la idea de progreso y con el análisis del comportamiento de las sociedades. Debido a esta concepción lineal, la historia se ha utilizado para justificar la acción humana, demostrar preeminencia, superar el pasado indigno y justificar el poder; como sociedad histórica, sin esta, seriamos más pobres.

        La historia como materia siempre ha sido utilizada, algunos han tratado de recuperar la memoria histórica (conocimiento individual, biográfico que no puede ser conocimiento histórico) en la educación, pero no debe confundirse con la correcta enseñanza de la historia. La memoria y la historia poco tienen en común, de hecho la historia tritura y digiere a la memoria para producir conocimiento. La trituración de memorias no se produce por la distancia en el tiempo, sino aplicando el método y teoría sobre el dato, recuerdo, comentario, vestigio o fuente.

        Enseñar historia, debe ligarse al análisis y la reflexión objetiva del pasado, explicando lo ocurrido sin juzgar, despojándose de implicaciones emocionales del presente y las interpretaciones personalistas o interesadas para justificar un proyecto político. La memoria de hechos pasados es un estímulo para el pensamiento histórico, al que reta a construir su comprensión, contextualización, interpretación y explicación.

        El error ha sido utilizar la historia para transmitir ideas políticas e ideológicas sin respetar el carácter científico del análisis historiográfico, lo que puede convertir a la disciplina en un elemento anti/educativo.

LOS FINES GENERALES DE LA HISTORIA COMO MATERIA EDUCATIVA.

La Historia es una de las disciplinas que más posibilidades tiene para la instrucción y educación por lo que debe enseñarse de forma correcta, tomando en cuenta los beneficios de su adecuada enseñanza y las transformaciones que experimentan los aprendientes. Existen cuatro ámbitos que determinan sus posibilidades en el proceso de enseñanza/aprendizaje, que son:

FACILITA LA COMPRENSIÓN DEL PRESENTE

Aunque su principal finalidad es explicar el pasado, toda visión del presente, estudiada con las ciencias sociales que lo analizan, se enriquece cuando se tiene una perspectiva histórica que contextualiza en el tiempo, espacio y una determinada realidad social. Por lo que aunque la Historia no explica el presente, facilita su comprensión, y esto por lo siguiente:

1. Permite analizar, en exclusiva, las tensiones temporales.

2. Estudia la causalidad y las consecuencias de los hechos históricos.

3. Explica la complejidad de los problemas sociales.

4. Permite construir esquemas de diferencias y semejanzas.

5. Estudia el cambio y la continuidad en las sociedades.

6. Potencia la racionalidad en el análisis de lo social, lo político, etcétera.

7. Enseña a utilizar métodos y técnicas de la investigación social.

8. Ayuda a conocer y contextualizar las raíces culturales e históricas.

CONTRIBUYE A DESARROLLAR LAS FACULTADES INDIVIDUALES

Las habilidades intelectuales se adquieren en la vida diaria y deben potenciarse en la escuela a través del trabajo en las diferentes áreas curriculares. Todas las edades permiten trabajar el desarrollo de habilidades intelectuales y todas las materias las deben incluir. Estudiar historia a temprana edad, desarrolla el intelecto en un proceso activo de descubrimiento e indagación con la capacidad de clasificar, comparar, analizar, describir, inferir, explicar, memorizar y ordenar ideas. La historia ayuda a conformar la mente mediante un estudio disciplinado y sistemático.

ENRIQUECE OTROS TEMAS DEL CURRÍCULO Y ESTIMULA LAS AFICIONES PARA EL TIEMPO LIBRE

La historia y la geografía pueden constituirse como eje que estructura a las ciencias sociales, ya que su estudio produce acercamiento a las diversas perspectivas del conocimiento social. Por ello es posible acercarse a varios remas curriculares partiendo del estudio histórico, pues ofrece contexto a otras disciplinas y fomenta el gusto y la práctica de la indagación por el pasado.

SIRVE PATA ADQUIRIR SENSIBILIDAD (O CONCIENCIA) RESPECTO A LAS FORMACIONES SOCIALES.

Esta es una fuerza del conocimiento que implica pasión, empatía y racionalidad; supone una mirada afectuosa y racional. La sensibilidad combina racionalidad y pasión, es el mejor medio de llegar al compromiso cívico  y a la mirada interesante sobre los problemas sociales.

1.4. LA HISTORIA  COMO MATERIA ESCOLAR EN LA EDUCACIÓN PRIMARIA

Debido a muchas controversias, hay modelos educativos que no incluyen a la historia como  materia educativa.

LA FUNCIÓN FORMATIVA DEL ESTUDIO DEL TIEMPO

Sin estructurar en el cerebro los conceptos temporales no es posible ordenar los conceptos que se habrán de construir; por lo que deben adquirirse lo antes posible, ya que ordenar el eje temporal de la propia vida es fundamental entre los 4 y 5 años. En primaria, la historia contribuye a crear mecanismos de tipo identitario superiores a los del grupo familiar, a través de mecanismos que ayudan a definir el grupo familiar.

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