Educación inclusiva: Retos y perspectivas en la sociedad actual
Joss KaperaEnsayo22 de Junio de 2020
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UNIVERSIDAD ATENEO METROPOLITANO DE GUADALAJARA
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Educación inclusiva: Retos y perspectivas en la sociedad actual.
Alumna: Gutiérrez Perales J. Karewit
Profesor: Alexis Mata
Taller de desarrollo de habilidades para la comunicación y recuperación de la información II
ÍNDICE
- INTRODUCCIÓN...................................... Pág. 1-2
- TEMA I. DEFINICIÓN Y PRINCIPIOS DE LA
EDUCACION INCLUSIVA.
- ¿Qué es o en qué consiste la educación inclusiva? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Pág. 3
- Algunos conceptos sobre inclusión. . . . . . Pág. 4
- Filosofía y valores de la escuela inclusiva. Pág. 5-6
- TEMA II. UN INSTITUTO INCLUSIVO.
2.1 Características de una escuela inclusiva y
Qué requiere para ser llamada como tal. . . . . . . . . .
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Pág. 7
2.1.2 Como se ve un colegio inclusivo
& Cómo construirlo. . . . . . . . . . . Pág. 8-10
2.1.3 El aula inclusiva. . . . . . . . . . . . . . Pág. 11-12
2.1.4 El docente Inclusivo. . . . . . . . . . . Pág.13-14
3.1 Características que facilitan una escuela
Inclusiva. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Pág. 15
4.1 La participación de la familia en la escuela
Inclusiva. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Pág. 16-17
- TEMA III. SITUACIÓN DE LA EDUCACIÓN
INCLUSIVA EN MÉXICO.
5.1 Mi México actual. . . . . . . . . . . . . . . . . . Pág. 18
5.1.2 México y sus retos para la educación
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Pág. 19-20
5.1.3 La Realidad actual en nuestra educación. . . . . . .
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Pág. 21-22
- TEMA IV. UN CAMINO HACIA EL CAMBIO.
6.1 De la integración a la inclusión. . . . . . Pág. 23-25
7.1 Diez consejos para docentes sobre educación
Inclusiva. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Pág. 26-27
8.1 Instituciones de educación especial. . Pág.- 27-28
- PROPUESTA. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Pág. 29-31
- CONCLUSIONES. . . . . . . . . . . . . . . . . . . Pág. 32-33
- FUENTES BIBLIOGRAFICAS. . . . . . . . . . Pág. 34-36
INTRODUCCIÓN
La sociedad siempre ha estado compuesta por miembros muy diversos, no sólo en cuanto a su género, edad, recursos económicos, orígenes sociales, culturas y costumbres diferentes, sino también con sus capacidades diferenciadas.
Los centros escolares constituyen, en nuestros días, contextos caracterizados por la diversidad de su alumnado, reflejo, a su vez de sociedades cada vez más diversas. El cuerpo de estudiantes es hoy más heterogéneo que nunca, como ya se hacia mención, esto en representación de su composición cultural, étnica, lingüística, de clase, de género o de capacidades y habilidades.
Sin embargo, las prácticas sociales dominantes que implicaron la exclusión de los “menos aptos o “diferentes se impusieron como algo natural, excluyéndolos, en el caso de la educación, de una escuela que “debe albergar a todos los miembros de la sociedad sin excepción alguna”. Dichas prácticas llevaron a considerar como ciudadanos sólo a aquellos que se ajustaban al modelo típico ideal aceptado por el conjunto de grupos sociales más dominantes.
En el caso de las escuelas, solo se aceptaba a niños y niñas que se consideraba, encajaban de una manera perfecta dentro de los parámetros “normales”; los demás, los otros, los diferentes, los extraños o aún más ofensivo los raros, debían ser atendidos por centros escolares de educación especial (como los CAM), instituciones para alumnos y alumnas con alguna discapacidad deficiente ya sea sensorial, auditiva o visual, con problemas físicos, mentales, intelectuales o adultos analfabetos. Cualquier tipo de discapacidad o de diferencia era motivo suficiente para no abrirles las puertas a estos alumnos en la llamada “escuela regular”.
Lo niños indígenas con frecuencia se les cerraban las puertas en escuelas generales por el solo hecho de pertenecer a algún pueblo o grupo étnico, incluso a los adolescentes con algún rezago educativo se les enviaba a escuelas para adultos, o si una adolescente estaba o quedaba embarazada, se le expulsaba del plantel o no se le permitía asistir a sus clases, entonces ciertamente estamos hablando en este caso de una escuela excluyente.
Hoy en día se ha producido un incremento notable y significativo en la diversidad de la población dentro de las instituciones educativas públicas y privadas; por lo cual las cosas están cambiando lentamente dando oportunidad a una mayor apertura a la sociedad y a las escuelas para aceptar en su seno a todos estos “excluidos”. Hablamos entonces de una escuela INCLUYENTE abierta a los niños y jóvenes sin importar sus rasgos específicos, ni sus cualidades intrínsecas, estructurales o culturales; por consiguiente a este tipo de enfoque educativo se le ha llamado “educación inclusiva”.
No obstante, por otra parte la educación inclusiva representa un reto importante para nuestra educación actual. El principal problema radica en el hecho de que en general la escuela y sus docentes no estamos preparados para trabajar con estos grupos de estudiantes heterogéneos, y con ello se tiende a mantener y en muchos casos se agudizan las desigualdades educativas entre los estudiantes que plantean mayores retos de aprendizaje y el alumnado “privilegiado” que carece de tales dificultades.
Entonces ¿podemos convertir una escuela regular en una escuela inclusiva o incluyente? ¿Con que tipo de características debería contar un docente incluyente? Y aun mas importante ¿Qué puntos debo tomar en cuenta para lograr que mi institución pueda llegar a considerarse “incluyente”?
Todo esto y más se tratara de abordar dentro de este ensayo el cual tiene solo como finalidad causar un impacto de reflexión acerca de lo que se vive hoy en día, dentro de las instituciones educativas y el por qué es tan importante comenzar a dejar esas diferencias y desigualdades atrás, mejorando así la empatía, el respeto y el derecho de recibir una educación formativa dentro de un ambiente sano, ello significa transformar la escuela en una autentica comunidad de aprendizaje, que haga del respeto la diversidad uno de sus valores fundamentales.
TEMA I. DEFINICIÓN & PRINCIPIOS DE
LA EDUCACIÓN INCLUSIVA
1.1 ¿Qué es o en qué consiste la educación inclusiva?
La Asociación Americana de trastornos del Aprendizaje (1993) define la inclusión como una política/practica en la cual todos los alumnos con deficiencias, independientemente de la naturaleza o gravedad de estas y de la necesidad para recibir servicios, reciben la educación total dentro de una clase regular en el colegio que les corresponde. Tal definición se centra en el emplazamiento de los alumnos en el contexto ordinario, que es uno de los principios de la integración. [1]
Por educación inclusiva se entiende un proceso escolarizado que toma en cuenta la diversidad de necesidades de todos los y las aprendices y trata de responder a ellas mediante una participación creciente en el aprendizaje, en las culturas y en las colectividades y la reducción de la exclusión que se presenta cotidianamente en la educación escolarizada.
A partir de este enfoque podemos recuperar la definición de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la ciencia y la cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés) (2003) de educación inclusiva como: La educación que implica que todos los jóvenes y adultos de una determinada comunidad aprendan juntos independientemente de su origen, sus condiciones personales, sociales o culturales, incluidos aquellos que presentan cualquier problema de aprendizaje o discapacidad. En la escuela inclusiva todos los alumnos se benefician de una enseñanza adaptada a sus necesidades y no solo los que presentan necesidades educativas especiales. [2]
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