La evaluación del aprendizaje, su evolución y elementos en el marco de la formación integral

INTRODUCCIÓN

Orígenes de la evaluación

En el siguiente ensayo se dará a conocer la evaluación de manera general y enfocada a la educación dentro de los procesos de enseñanza aprendizaje, se encontrarán las definiciones de autores con renombre que han realizado aportaciones de mucha utilidad en este tema. Posteriormente se hará un viaje en el tiempo para conocer los instrumentos de evaluación que han sido criticados por algunos teóricos, pero que siguen vigentes en la actualidad. Debido a estas críticas surge la pregunta, ¿qué se ha de evaluar? En base a investigaciones realizadas por González se obtendrá la respuesta a esta interrogante. Por último se explicará en que consiste la evaluación cuantitativa y cualitativa para conocer cómo se complementan y cuál es su importancia.

DESARROLLO

La evaluación de manera general consiste en la determinación de valor hacia una persona, una institución, un programa, algún objeto, situación, etcétera. Por otro lado, enfocada a la educación, García (2011) la define como “una actividad o proceso de identificación, recogida de datos sobre elementos y hechos educativos con el objetivo de valorarlos primero y sobre dicha valoración, tomar decisiones”. De acuerdo con el autor, la evaluación es un proceso mediante el cual se puede valorar si los objetivos previamente establecidos han sido alcanzados, además de identificar errores que hayan sucedido sobre la marcha para realizar mejoras.

Es por ello, que Rosales (2011) la menciona como “una reflexión crítica sobre todos los momentos y factores que intervienen en el proceso didáctico a fin de determinar cuáles pueden ser, están siendo o han sido, los resultados del mismo”. Cabe mencionar que hace años la evaluación era similar a la calificación, es decir, solo se otorgaba un número al rendimiento de los alumnos. Sin embargo, en la actualidad hace referencia a todos los elementos que participan en el proceso de enseñanza aprendizaje y debe abarcar más allá del producto del estudiante.

En ese sentido, surge la interrogante, ¿Qué se ha de evaluar? Es claro que se evaluaran todos los aspectos de personalidad del educando, pero González (2011) considera necesario evaluar los programas de estudio así como sus objetivos, materiales y medios, al igual que la acción instructiva y la escuela como un todo. Puesto que, si los docentes evalúan su propio trabajo, pueden realizar adaptaciones a sus prácticas, las cuales favorezcan el proceso de enseñanza aprendizaje.

Según Guerra (2011) si el docente no realiza esa evaluación y solo valora al alumno, las consecuencias son las carencias y disfunciones. Ya que como se mencionó anteriormente, para que la evaluación se útil, factible, ética y exacta, deben ser evaluados todos los elementos implicados en el proceso de enseñanza aprendizaje.

Al hacer un viaje en el tiempo se puede encontrar la aparición del examen en el oriente del mundo, el cual surgió como instrumento de selección de personal para el acceso a la educación, la certificación de niveles alcanzados, todo esto con el fin de obtener un resultado según el aprendizaje de los alumnos. Este instrumento de evaluación meramente cuantitativo fue criticado

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