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Los 4 Acuerdo


Enviado por   •  22 de Mayo de 2013  •  1.492 Palabras (6 Páginas)  •  269 Visitas

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Para lograr entenderse a uno mismo y entender a los demás, para lograr ser felices sin ninguna influencia externa, debemos entender que todo lo que necesitamos para lograrlo esta dentro de nosotros mismos.

Se debe, en primer lugar, entender que todos los humanos tenemos un complejo sistema de creencias o paradigmas, adquirido por influencia social, familiar, educacional, religiosa (el sueño del planeta) y que con frecuencia dichas creencias adquiridas nos perturban mental y emocionalmente, creando infelicidad; en segundo lugar, aprender que se puede modificar el sistema de creencias para conseguir el anhelado equilibrio interior que lleva a la felicidad.

Romper nuestros acuerdos basados en las creencias y los dogmas que vamos adquiriendo a lo largo de nuestras vidas, el autor dice “al ser domesticado”, es posible a base de recapitulación, dejar el ego y comenzar a ser cada vez más nosotros mismos (libres, salvajes), ya que nosotros no elegimos la lengua que hablamos, la religión que profesamos, ni los valores morales que tenemos, es más ni nuestro nombre pudimos elegir. Pero si estuvimos de ACUERDO con la información que los demás nos transmitieron.

Cuando estamos de acuerdo con algo, lo creemos, y si lo creemos, lo vivimos.

Ello nos puede conducir a un camino más sensato, libre y dictado por el corazón. “No hay razón para sufrir. La única razón por la que sufres es porque así tú lo exiges. Si observas tu vida encontrarás muchas excusas para sufrir, pero ninguna razón válida. Lo mismo es aplicable a la felicidad. La única razón por la que eres feliz es porque tú decides ser feliz. La felicidad es una elección, como también lo es el sufrimiento”.

Para lograrlo, se pueden poner en práctica Los Cuatro Acuerdos, que son los siguientes:

1. "Sé impecable con tus palabras".

A éste se le da la mayor importancia, ya que es el más difícil de cumplir.

Las palabras tienen el poder de crear, la intención se manifiesta a través de ellas. Son el poder que tenemos para expresar y comunicar, para pensar, para crear los acontecimientos de nuestras vidas.

Son como una espada de doble filo, sirven para crear, pero también para destruir; destruir la confianza, la fé, la esperanza. Según como se usen las palabras darán libertad o esclavitud.

Un ejemplo muy claro que manifiesta el autor, es el caso de Hitler en Alemania, mediante el uso de las palabras, manipuló a un país entero de gente inteligente, los llevó a una guerra mundial y a cometer los más atroces actos de violencia de los que se tenga memoria. Activó el miedo de la gente, las palabras de Hitler, que se basaban en creencias y acuerdos generados por el miedo, destruyeron un continente.

Se puede decir que las palabras son hechizos que lanzamos a los demás. Las palabras captan nuestra atención, entran en nuestra mente y cambian, para bien o para mal, nuestras creencias.

Impecable es sin pecado, ser impecable con nuestras palabras, significa no atentar con nuestras palabras contra nosotros, juzgarnos y culparnos por cualquier cosa. No pecar, SER IMPECABLE, es no ir contra uno mismo, es aceptar la responsabilidad de nuestras acciones, pero sin juzgarnos o culparnos.

Ser IMPECABLE CON TUS PALABRAS es no utilizarlas contra sí mismo, ya que al utilizar una palabra para con alguien más en realidad la estamos usando contra nosotros.

Ser IMPECABLE CON TUS PALABRAS es utilizar tu energía correctamente, en dirección a la verdad y del amor por uno mismo. Cuando eres impecable con tus palabras, te sientes bien, feliz, en paz.

2. "No te tomes nada personalmente".

Suceda lo que suceda alrededor de uno, no se tiene que tomar personalmente. Si uno se toma todo de forma personal, solo está manifestando su egocentrismo, la idea de que todo gira alrededor de nosotros, si lo tomamos personal, estamos DE ACUERDO con lo que dijeron de nosotros y quedaremos atrapados en ese sueño.

Los demás no conocen las reales circunstancias que me rodean, su opinión está basada en sus propios acuerdos, creencias y paradigmas, por lo que su opinión no es sobre mí personalmente, si no, sobre ellos; por lo tanto no es algo PERSONAL.

Cuando nos tomamos las cosas personalmente, nos ofendemos y reaccionamos peleando, tratando de demostrar que nuestras creencias son mejores, porque sentimos la necesidad de tener razón, creando un conflicto con los demás.

Este acuerdo tiene que ver con la autoestima, si alguien me dice que soy el mejor o el peor de las personas, no tiene porqué afectarme pues yo sé lo que soy y quién soy. Basta con que confíe en mi mismo para elegir con responsabilidad. Nunca seré responsable de lo que

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