ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

PLAN CURRICULAR ANUAL


Enviado por   •  5 de Enero de 2014  •  12.063 Palabras (49 Páginas)  •  473 Visitas

Página 1 de 49

PLAN CURRICULAR ANUAL

P .C .A (PRIMERO DE BACHILLERATO PRE IB)

1. DATOS INFORMATIVOS:

2. ÁREA:¬ Ciencias sociales

3. AÑO DE ESTUDIO: Primero de Bachillerato PRE IB

4. AÑO LECTIVO: 2013-2014

5. CARGA HORARIA: 4 horas semanales .

6. RESPONSABLE: Dra. Martha Montesdeoca J.

7. SEMANAS: 35

8. DIAS LABORABLES: 200 días

9. SECCION: Diurna

2.- IMPORTANCIA DE ENSEÑAR Y APRENDER PENSAMIENTO Y DESARROLLO

FILOSOFICO.

La presentación de la asignatura Desarrollo del Pensamiento Filosófico incluye necesariamente la pregunta sobre el sentido y la función de la enseñanza de la filosofía en el nivel secundario. Es claro que, en este nivel educativo, no se trata de iniciar a los estudiantes en un estudio destinado a futuros filósofos, sino de aproximarlos a una filosofía que debe ser asequible para sujetos no filósofos, desde su etapa evolutiva y desde su contexto. Puede afirmarse con certeza que la filosofía en el nivel secundario está, primordialmente, al servicio del desarrollo del pensamiento crítico del estudiantado. Sin embargo, la tradición docente en esta disciplina (ligada estrechamente a la formación docente recibida en institutos y universidades) ha reducido la enseñanza de la filosofía en el nivel secundario a la lectura y al análisis de textos filosóficos o a la historia de la filosofía. Este enfoque academicista de la enseñanza se centra en la transmisión fiel de los

Textos de los filósofos, perdiendo de vista o dejando de lado el problema que da origen a esos textos. En lugar de ser los problemas filosóficos los que motorizan el filosofar, estos problemas quedan escondidos u olvidados por la devoción hacia la lectura de las “grandes

Obras”.

El resultado no es muy auspicioso: los estudiantes del nivel secundario que deben aprender estos textos no acceden a las preguntas filosóficas que les dieron origen, y mucho menos logran hacerse preguntas filosóficas que den sentido a estas lecturas. Como afirma Claude Paris (en sus “Reflexiones acerca de la enseñanza de la Ética”1):

“No se trata de negar todo recurso a los textos de la tradición filosófica o a su historia, sino de evitar que estos escondan los problemas que se encuentran en su origen. Y estos problemas deberían ser comprensibles y pertinentes para el estudiante. Detrás del texto, la pregunta, y más allá de la pregunta, la problemática. Los textos deberían ser pretextos para un ejercicio intelectual, para una reflexión sobre cuestiones fundamentales, nunca un fin en sí mismos”. Si esto es cierto para toda materia filosófica que se dicte en este nivel educativo, lo es mucho más para la asignatura Desarrollo del Pensamiento Filosófico. En efecto, Desarrollo del Pensamiento Filosófico no tiene como objetivo que el estudiantado, en este tramo de su escolaridad, aprenda Historia de la Filosofía o textos de grandes filósofos, sino que pueda participar asiduamente de una experiencia filosófica.

Es decir, que los estudiantes puedan filosofar. Por supuesto, esta experiencia no puede ejercitarse en el vacío. El ejercicio del filosofar se relaciona estrechamente con la capacidad de preguntar y las preguntas solo pueden plantearse ante algún contenido. La pregunta no puede nacer de la pura ignorancia. La pregunta surge desde lo que se sabe o desde lo que se cree saber, porque ese saber parece insuficiente o dudoso. Acerca de lo que nada se sabe ni siquiera se puede dudar. No se filosofa sobre “nada” sino sobre “algo”, y ese algo es aportado por los contenidos de la filosofía misma.

Por tal razón, la asignatura Desarrollo del Pensamiento Filosófico debe proveer los contenidos filosóficos socialmente relevantes para activar la reflexión y la pregunta. Se trata, como ya se ha afirmado, de contribuir al desarrollo del pensamiento crítico de los alumnos. Si bien todas las áreas curriculares contribuyen a este fin, el área filosófica está especialmente emparentada con esta capacidad. Filosofar es, en lo fundamental, pensar críticamente. Y pensar críticamente es ejercer una facultad compleja que consiste en:

- Someter a examen lo que se sabe; preguntarse por cómo se ha obtenido ese saber, cómo se ha llegado a él,

y qué es lo que le da confiabilidad.

- Buscar y formular argumentos para asumir o refutar lo que se sabe o piensa.

- Organizar racionalmente las informaciones o datos, aceptando unos y rechazando otros, e intentando

armonizar el punto de vista subjetivo con puntos de vista más objetivos o intersubjetivos.

- Cuestionar las creencias infundadas, los prejuicios, y tratar de sustituirlos por ideas argumentalmente

sostenibles.

- Descubrir los errores en los diversos planteamientos que pueden darse sobre un tema determinado y

señalar las inconsistencias.

- Valorar las ideas que tienen mejores argumentos a favor y las que mejor resisten la prueba de las objeciones.

- Cuestionar la realidad como algo inmutable y preguntarse por los procesos de producción de lo real.

- Dotar de pasado y futuro a los acontecimientos o hechos, situándolos en la historia, reconstruyendo

procesos allí donde solo se muestran sucesos que parecen aislados.

- Pensar acerca del proceso mismo de pensamiento, acerca de la naturaleza de las propias creencias y de

cómo estas creencias influyen en las experiencias diarias.

Filosofar es ejercitar esta práctica racional y requiere de una actitud inquisidora ante temas o problemas significativos. Que sean significativos implica que los temas y problemas filosóficos por tratar tienen que implicar a los sujetos que filosofar (tanto a los docentes como

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (74.6 Kb)  
Leer 48 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com