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ÉXITO ESCOLAR PARA TODOS


Enviado por   •  5 de Octubre de 2013  •  7.939 Palabras (32 Páginas)  •  250 Visitas

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“Una escuela eficaz es aquella que consigue un desarrollo integral de todos y cada uno de sus alumnos, mayor de lo que sería esperable teniendo en cuenta su rendimiento previo y la situación social, económica y cultural de las familias”

(Murillo 2005:25).

Una cuestión a debatir es el concepto de “éxito escolar”, quienes y cómo intervienen en él, si es alcanzable por todo el alumnado y en qué condiciones.

Cuando identificamos éxito o fracaso exclusivamente con las notas, no estamos asegurando más que ha alcanzado una serie de objetivos académicos, que pueden tener que ver con su desarrollo individual y social o no tener relación. No obstante, desde una sociedad y un sistema selectivo que valora el título de forma “comercial”, como elemento de promoción personal, obtenerlo tiene importancia.

Si, por el contrario, y tal como se plantea en los fines de la educación obligatoria, el éxito escolar está relacionado con la adquisición de saberes básicos, el desarrollo integral del alumnado, su capacidad para incorporarse a la vida adulta y al ejercicio de la ciudadanía de manera satisfactoria, así como mantener una actitud de aprendizaje a lo largo de su vida; el concepto de éxito se amplía.

Una concepción más profunda de éxito o fracaso escolar se referiría no sólo a disminuir los índices de fracaso “académico” sino a que el modelo educativo esté orientado a preparar a todo nuestro alumnado para desenvolverse con éxito en los diferentes ámbitos de vida (familiar, relacional, profesional, laboral y social) como individuo y como colectivo, con capacidad crítica y de transformación social. Éxito sería ofrecer todas las posibilidades de formación a todo el mundo, ofreciendo mayores recursos a quien presenta más necesidades y certificándolo con un título generalizado. Esto nos llevaría a replantearnos la validez del modelo educativo actual, como uno entre los varios agentes que influyen en el éxito o fracaso del alumnado. Habría que replantearlo en cuanto a su estructura organizativa, contenidos, metodología, actuaciones y recursos que promueve para alcanzar este objetivo.

Partiendo del sistema educativo que tenemos me planteo lo siguiente:

¿Es posible el éxito de todos los alumnos en la Escuela?

Es este un sistema que persigue el éxito, la excelencia, de una parte del alumnado, lo que hace que necesariamente otra parte no la consiga o se le dificulte. Es un sistema, además, que sigue un modelo social selectivo, con el que es coherente. Un modelo social que necesita disponer de alguien que llegue a lo más alto, pero también los estratos más bajos. Priorizar la excelencia de parte del alumnado requiere que el sistema actúe, con quien va mal, separándole, rebajando sus expectativas, etc. mientras revaloriza opciones más “seleccionadas” o elitistas. La ayuda al fracaso así debe quedar fuera del sistema, como algo hecho en paralelo y dedicado muchas veces a cubrir el tiempo de quien fracasa, a que “por lo menos...”

Desde un sistema selectivo de este tipo se dice dar respuesta a una “demanda social” separando a quien va mal. Se prolonga así la idea selectiva de la sociedad al sistema educativo. El problema añadido es que hacer programas de ese tipo evita que haya un programa más real y global, que sirva a todo el alumnado.

Las alternativas institucionales educativas que se están dando responden a este modelo, y hacen un análisis diferente del fracaso escolar del que planteamos inicialmente. A veces parece que ni siquiera se hace una reflexión seria que conduzca al éxito para todas las personas, a la superación del fracaso. Mientras que el tanto del éxito se lo apunta el sistema, el gol del fracaso es de cada individuo. Por esta razón, las alternativas buscan “sacar de la bolsa del fracaso” a las personas, sin cuestionar el modelo educativo, y a la propia sociedad.

Observamos, con frecuencia, que la apariencia de solución del fracaso, a menudo se convierte en un parche que evita el fracaso por un lado, y lo agranda por otro. Por ejemplo, cuando se hace una propuesta de apoyo al alumnado que está a punto de aprobar ( con una o máximo dos materias suspensas) y se abandona al que se considera un “suspenso seguro”, la meta no es el éxito para todo el mundo, sino la aceptación de que siempre va a haber personas fracasadas escolares y no se puede hacer nada. Se opta por dedicar los recursos (que no son infinitos) a parte del alumnado, y no a la de mayor índice de fracaso.

Somos concientes de que la educación no es el único motor de cambio social que existe, y que aunque cambiáramos el modelo, esta sociedad individualista y competitiva no permitiría alcanzar el éxito a todo el mundo. Preocupa que aquellos sectores más desfavorecidos socialmente sean los más propensos al fracaso, y que los más favorecidos económica o culturalmente lo sean al éxito.

La escuela, acoge a los niños de todas las clases sociales y a través de sus métodos propios les inculca las habilidades y las exigencias de calificación laboral a un nivel determinado de la estructura económica y cultural de la sociedad. Sólo algunos individuos pueden llegar hasta la cima del sistema educativo, constituyéndose así en los intelectuales y “agentes de la explotación y represión” capitalista; los demás se insertarán en la parte inferior del escalafón de la división social del trabajo.

Louis Althusser

Dentro de las instituciones escolares, existen representaciones, tipificaciones y expectativas de los actores que juegan un papel fundamental y originan una cierta tendencia a "esperar menos" de los niños que tienen ciertas características sociales, culturales, étnicas, de género, etc.-

Si bien concuerdo con la igualdad de oportunidades educativas, es notorio que ella oculta sus aspectos productivos, sus funciones de socialización y las relaciones de poder dentro de la escuela.-

La escuela da el privilegio de hacer aparecer a los privilegiados como los no privilegiados, convence a las clases bajas de que deben su destino escolar y social a su falta de dones o de méritos.-

El sistema escolar es una de las diferentes instituciones que sirven para perpetuar dicha estructura de privilegios. Los prejuicios de clase, sexo y raza, en la escuela, no producen, sino que reflejan, la estructura de privilegios de la sociedad.-

La escuela enseña ciertas habilidades, pero mediante formas que aseguran el sometimiento a la ideología dominante. La ideología es sobre todo y ante todo la expresión de las relaciones sociales, particularmente las de las relaciones de producción. La ideología

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