HISTORIA ECONOMICA DE MEXICO Actividad

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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

SISTEMA UNIVERSIDAD ABIERTO Y EDUCACIÓN A DISTANCIA

Materia:

HISTORIA ECONOMICA DE MEXICO

Actividad 1

Sintesis-comentario

Asesor: MARIBEL GARCIA ELIZALDE

Por: CLAUDIA CITLALI BERMUDEZ PERALTA

Introducción

Este documento de trabajo introduce y presenta la historia económica como una asignatura global y de largo plazo. Uno de los principales objetivos de la historia económica como disciplina académica es el estudio comparativo del desarrollo económico y social. La Historia de la economía, el nacimiento de la economía como cuerpo teórico de estudio, independiente de la política y la filosofía, puede fecharse en el año 1776, cuando Adam Smith publicó su Investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones. Por supuesto, la economía existía antes de que muchos autores publicaran sus libros, tal es el caso de Smith y de Marx; los griegos hicieron importantes aportaciones, al igual que los escolásticos de la edad media. Desde el siglo XV hasta el siglo XVIII se escribieron numerosos ensayos que desarrollaron los principios del nacionalismo económico como la escuela de pensamiento denominada mercantilismo; durante parte del siglo XVIII los fisiócratas franceses formularon un modelo económico bastante refinado y teórico; otros pensadores del siglo XVIII podrían competir con Smith por el título de fundador de la ciencia económica. 

Desde la lectura una pregunta clave para nuestro curso ¿Qué es la historia económica? Esta disciplina llamada “historia económica” es la historia de los hechos y las vicisitudes económicas a escala individual, empresarial o colectiva. Como tal se diferencia de la “historia de las teorías” que es la historia  de la doctrina económica.

Por historia económica entendemos habitualmente que la historia del hombre, ya sea blanco, amarillo, negro o cobrizo, paleolítico, neolítico o industrial. Esta observación que a primera vista puede ser un poco trillada, significa que es el análisis histórico económico, es necesario tener en cuenta las peculiares características fisiológicas y psicológicas del hombre, tanto su racionalidad como su irracionalidad, sus características mentales, sociales y culturales todo ello a escala individual y colectiva.

Desarrollo

La historia económica es una disciplina relativamente joven. Existe cierta proto-historiagrafia económica que se monta al siglo XVII pero hasta mediados del siglo XIX no aparece una hisografia económica madura y reconocida dignidad económica.

Remontándonos a los años 1846 y 1856, George Grote uno de los grades ilustres de Grecia, pudo publicar una monumental “History of Grece” en la que los aspectos económicos y sociales apenas se apuntaban de una manera superficial. Hoy podemos apresar que resulta inconcebible, hasta en las obras de la historia general es frecuente hallar capítulos enteros dedicados a los aspectos económicos y sociales.

La historia económica y más aún las disciplinas que se han desarrollado en torno a ellos son fruto de fragmentaciones artificiosas de la actividad humana. El “homo oeconomicus” igual que el “homo faber” o el “homo philosophicus”, es una total abstracción. La auténtica realidad es el hombre en su complejidad biológica, psicológica, social. De modo similar, la sociedad no actúa a través de comportamientos estancos, actúa como un conjunto mucho más complejo en planos distintos pero inextricablemente independientes.

En la realidad de las cosas es que no existe historia económica, de la misma manera que no existe historia política, historia social, historia de la tecnología ni historia cultural. Existe la historia, solo HISTORIA.

Comprendido lo que hasta ahora se ha leído se deduce que el historiador económico que quiera captar por completo los fenómenos que pretende estudiar y describir debe tener en cuenta, aunque se trate de fenómenos estrictamente económicos, las aportaciones de otras disciplinas, tales como la historia de la tecnología, la historia de la medicina, historia de la astronomía, historia de la biología, historia de las matemáticas, historia de las religiones, etc. Todas estas disciplinas pueden realizar aportaciones considerables a la comprensión de la historia económica y pueden ser consideradas como subsidiarias de la misma. Todo depende del punto de vista en el que se sitúa el observador.

En la expresión “historia económica” el término historia puede ser fuente de ambigüedad respecto al objeto de disciplina, este término tiende a ser relacionado de hecho, en el habla cotidiana con el interés por lo antiguo. La historia económica se ocupa o debería ocuparse de acontecimientos económicos ya lejanos en el tiempo. La diferencia entre pasado y futuro consiste en que mientras el primero está constituido por hechos ocurridos que ya no pueden ser ni anulados ni modificados, el futuro es como un abanico abierto a una gama más amplia de soluciones alternativas.

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