La Importancia De Educar En La Creatividad

La importancia de educar en la creatividad.

La creatividad es “la capacidad de hacer surgir algo de la nada” (Almacellas, 2000, p. 95), es una cualidad que hoy en día es tomada muy en cuenta por el gobierno de Nicaragua, distintas escuelas, organizaciones y universidades de este país. Según Almacellas (2000), desarrollar la creatividad es muy importante desde que nuestros hijos están pequeños pero el gran deber que tienen los padres es saber identificar en que ámbitos el niño o la niña tiene mucho potencial por desarrollar y al mismo tiempo suscitar entusiasmo en los pequeños ya que el entusiasmo es lo que lleva al niño (a) a que con amor realice la valiosa tarea de encontrarse con la creatividad.

Almacellas (2000) ejemplificó lo siguiente:

Saint-Exupéry recuerda un viaje en un tren repleto de gente de extracción social baja. Un niño pequeño dormía arrebujado entre sus padres. El autor francés se quedó mirando la carita del niño y recordó la figura del compositor Wolfang Amadeus Mozart. Y pensó que probablemente ese niño tuviera en si potencias como para llegar a ser un gran músico, pero temió que la vida no le iba a ofrecer las posibilidades necesarias, con lo cual sus potencias quedarían ahogadas en agraz. Después de una larga reflexión, el escritor separa ya definitivamente los ojos del niño, en su fuero interno lo consideraba como un “Mozart asesinado” (p. 96)

Esto hace referencia a las personas de bajos estratos sociales. Ellos tienen más dificultades en poder desarrollar su potencial y creatividad en una materia especifica. A la vez, a los padres de estos hijos se les es más difícil analizar cuáles son los fuertes de sus hijos y proveerles materiales para su desenvolvimiento y desarrollo. A como afirma Almacellas (2000):

…Una persona puede estar dotada de una gran capacidad para la interpretación musical; sus potencias le permitirán llegar a ser un virtuoso en el piano, pero, si no tiene la posibilidad de acercarse a tal instrumento, sus potenciales no podrán desarrollarse (p. 96).

Debo de hacer notar que no solo basta con que el gobierno y diferentes organizaciones animen a los chavalos por medios de grandes letreros o escritos en diferentes textos, si en verdad solo los ilusionan con tantas tonterías porque los únicos beneficiados son los hijos de papa y mama con altos puestos laborales.

¿Qué hay de todos los talentos escondidos en la calles? Quizás vendiendo chicles en las paradas de autobuses, o ayudando a vender en el mercado a sus madres para darles de comer a sus hermanitos menores. ¿Qué hay de ellos? Estos niños tienen toda una vida por delante pero no la ven con claridad, lo único que tienen sembrado es apatía e indiferencia, y, “si no se propicia que el niño se abra activamente a las realidades valiosas que se le ofrecen, no sentirán entusiasmo” (Almacellas,

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