Mexicanidad
NellyBo23 de Agosto de 2011
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“La mexicanidad”
Lic. Nelly Robles
Mayo 2010
Indíce
Introducción………………………………………………………………………………3
Marco teórico……………………………………………………………………………..4
Metodología……………………………………………………………………………….8
Reporte de investigación……………………………………………………………….9
Conclusiones……………………………………………………………………………34
Bibliografía………………………………………………………………………………35
Anexos……………………………………………………………………………………35
Introducción
A lo largo de este trabajo se presentan los resultados generados de una investigación, en la cual participamos más de trece personas, cada uno de nosotros entrevisto a tres personas, el objetivo era obtener datos acerca de la percepción de la cultura mexicana.
El cuestionario implementado contenía preguntas básicas para formar un perfil de cada entrevistado y preguntas que recabaron información suficiente para poder dar un panorama del perfil de la cultura mexicana.
Es así como a lo largo de estas páginas se muestran los resultados de cuarenta entrevistas formuladas en el primer semestre del presente año. Este trabajo toma en cuenta cada una de las preguntas para poder contrastarlas en su conjunto con la muestra poblacional y así poder hacer generalidades o conclusiones basadas en las transcripciones de la muestra.
También se presenta un marco teórico acerca de la “mexicanidad”, para poder después entrar de fondo en un estudio que corrobora la teoría, es decir que confirma lo que ya se ha escrito desde hace algunos años.
México es muy rico en tradiciones, costumbres, paisajes, climas variados, regiones, en su población tan distinta; sin embargo se comprueba con esta investigación que existe una mayoría, es decir, que hay una imagen general de todos aspectos y se conjugan para al final darnos un perfil de cómo se aprecia a nuestro país.
Es así como se encontrarán datos relevantes de la percepción de los entrevistados hacia el mexicano, o hacia la cultura mexicana, no importando si fueron mexicanos o no; simplemente se muestra un panorama de cómo se percibe nuestro país en la actualidad, sus tradiciones, su historia, el mexicano en particular y nuestro país en su conjunto.
Marco teórico
La mexicanidad ha sido definida por muchos autores, y su significado se concentra en la cultura mexicana, en el conjunto de características, historia, tradiciones, lo que hacen únicos a los mexicanos y no se encuentra en ninguna otra persona del mundo.
Como lo menciono Alan, en su obra “Vecinos distantes”, el 90% de los mexicanos son mestizos, no son españoles, ni indígenas, aunque no admitan su mestizaje. Esto hace que cada vez más los mexicanos desdeñemos nuestro origen y busquemos otro, es decir a base de imitaciones buscar el parecido a otros, sin que seamos auténticos.
Por lo que en conjunto, como país, México busca interminablemente una identidad y oscila, en forma ambivalente, entre lo antiguo y lo moderno, lo tradicional y lo de moda; lo indígena y lo español, lo oriental y lo occidental.
Esta falta de identidad ha provocado que los mexicanos tengan un lenguaje único, y no era de faltar, dado que muchas de las sociedades en el mundo tienen sus propias raíces, los mexicanos se entienden por medio de claves secretas (costumbres, idiomas, gestos) que inconscientemente aprenden, lo asimilan, lo trabajan y lo repiten sin ningún análisis.
El pasado de nuestro país es fundamental para nuestra historia, pero no sólo es pasado, ahí está la clave, en un pasado continuo pero no consistente. Los mexicanos deben de conciliar el hecho de ser conquistados y conquistadores, nos debemos de aceptar como tal, de preservar muchas características raciales y rasgos de la personalidad indígena, e incluso glorificar sus antecedentes; sin olvidar que somos parte españoles, que hablamos castellano y practicamos el catolicismo.
Este mestizaje, del cual deberíamos de estar orgullosos, porque es una cultura rica en tradiciones, de sincretizaciones y de modernismos, México es la única nación del hemisferio donde se dio el mestizaje religioso, político y racial.
Por otra parte, Alan habla acerca de la personalidad del mexicano y al describe como personas que meditan y filosofan, discretos, evasivos y desconfiados, orgullosos y vigilantes de las cuestiones de honor, se ven obligados a trabajar mucho, pero sueñan con una vida de holganza, son cálidos, ocurrentes, sentimentales y en ocasiones violentos y crueles, son inmensamente creativos e imaginativos.
Dadas las características del mexicano, sus relaciones no sólo se conforman en base a estas, sino que se guían por las tradiciones más que por los principios. Las costumbres, los idiomas, los gestos son singulares, por ejemplo, los mexicanos no consideran que el nacimiento o la muerte interrumpan la vida, por el contrario se hace burla de la muerte en canciones, cuadros y arte popular. Se arremolinan en los cementerios de todo el país, llevando flores e incluso alimentos a las tumbas de sus antepasados, en forma parecida a la usanza azteca.
Es decir, los mexicanos vivimos en el pasado, en el presente; y por el contrario, el futuro se contempla con fatalismo por eso que la planificación resulta anormal. El pasado permanece vivo en el espíritu mexicano, cuando chocan antiguo y moderno, invariablemente, favorecen al pasado.
Es en este pasado en donde se ven más reflejados, en donde basan sus anhelos, una historia memorable, en donde las figuras claves se han dividido en buenas y malas para personificar el heroísmo, nacionalismo, los ideales revolucionarios, o por el contrario, los villanos, la cobardía, la traición, la codicia. El nacionalismo también refleja el constante sentimiento de vulnerabilidad del país, y como el machismo, sirve de mascara tanto para ocualtar las dudas internas, como para exhibir autoconfianza externa. México y los mexicanos parecen incapaces de desligarse de un pasado al cual siguen perteneciendo.
Además Alan, menciona la inseguridad del hombre con su constante temor a que las mujeres lo traicionen, y no sólo eso, sino que ésta se convierte con frecuencia en trémulas imágenes reflejadas por el país en general.
Los festejos son singulares en nuestro país, nuestro calendario está lleno de celebraciones sin explicación, pero esto tiene un significado para el mexicano, dado que estos festejos le proporciona vividez para su vida común.
La posición social, bien han dicho que los mexicanos más que racionales, somos clasistas, y esto se ve en nuestra sociedad, una sociedad que funciona por medio de relaciones de poder, mientras que los derechos individuales están determinados por los niveles de influencia. La posición social y las apariencias son cruciales.
La familia, el eje fundamental en la vida de los mexicanos, en donde en tragedias todos somos solidarios, y de igual forma para crecer, o crecemos todos o nadie, y esto según Alan, dado que para la mayoría de los mexicanos, la familia sigue siendo el eje de su vida, más del 90% de estos sigue viviendo en una familia nuclear. El sentimiento de la familia enseña a los mexicanos a desconfiar de la sociedad en general, y se sienten más seguros cuando están rodeados de parientes.
Del otro lado esta Octavio Paz, que compagina de una manera sin igual con Alan, ya que pone a México en una lucha constante, un combate espiritual. Clasifica al mexicano como un ser que se encierra y se preserva, en soledad, todo le sirve para defenderse.
El mexicano que puede doblarse, agacharse, humillarse, pero no “rajarse”, Que el orgullo antes que la explicación es fundamental, de ahí que las mujeres se les vea inferiores, dado que al entregarse se abren, y se rajan. El macho es un ser hermético encerrado en sí mismo, capaz de guardarse y guardar lo que se le confía.
El mexicano miente por naturaleza, por placer y fantasía, pero también en defensa propia. El mexicano tiene tanto horror a las apariencias, así como también lo dijo Alan, que prefiere aparentar ser otra cosa e incluso la muerte o del no ser, antes que abrir su intimidad y cambiar.
En cuanto a las fiestas, esta también las pone como pretexto cualquiera, como una pasión por ellas, por interrumpir la marcha del tiempo y celebrar con festejos y ceremonias hombres y acontecimientos, México, es un pueblo ritual. La fiesta es una revuelta, una súbita inmersión en la vida pura.
Y qué decir de la muerte, la cual ilumina nuestra vida, según Octavio Paz, si nuestra muerte carece de sentido, tampoco la vida lo tuvo. El mexicano frecuenta a la muerte, la burla, la festeja, en ésta, se disfrutan, y en la muerte le saludan con un silencio o una sonrisa desdeñosa.
El mexicano, encerrado en su pasado, siente la presencia de una mancha, todas las acciones y gestos se encaminan a ocultarla. Es por este victimismo que se adora a Cristo, una persona que sufrió, que pasaron encima de él, tal como nos identificamos los mexicanos con él y qué decir de la Virgen de Guadalupe, esa mujer abnegada, la madre de todos los huérfanos, la protectora de los desamparados, por eso la veneración tan grande porque
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