ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

REGIMENES MONETARIOS EN EL PERU

Sebastian JesusTrabajo20 de Septiembre de 2020

3.775 Palabras (16 Páginas)187 Visitas

Página 1 de 16

“UNIVERSIDAD NACIONAL FEDERICO VILLARREAL”

ESCUELA PROFESIONAL DE CIENCIAS ECONÓMICAS

FACULTAD DE ECONOMIA

[pic 1]

ASIGNATURA: TEORIA Y PROGRAMACION MONETARIA

PROFESOR: FLORCITA ALDANA TREJO

INTEGRANTES:   MENDOZA TAZA, SEBASTIAN

                        

AULA:        44-F (TARDE)

        

2018

 

                                               DEDICATORIA

Este trabajo se lo dedicamos a Dios y a nuestros padres por el deseo de superación y amor que me brindan cada día en que han sabido guiarnos en la vida por el sendero de la verdad y poder honrar a nuestras familias con los conocimientos adquiridos , brindándonos el futuro de su esfuerzo y sacrificio por ofrecernos un mañana mejor.

INDICE

INTRODUCCION        4

ASPECTOS GENERALES        5

I.        DIFERENTES REGIMENES MONETARIOS DEL BCR HASTA LA ACTUALIDAD        5

II.        BASES CONCEPTUAL DEL ACTUAL REGIMEN Y MODALIDAD DE FUNCIONAMIENTO        7

III.        RIESGOS Y DESAFIOS QUE ENFRENTA EL ACTUAL REGIMEN MONETARIO DEL PERU        13

CONCLUSIONES        15

BIBLIOGRAFIA        16

                                INTRODUCCION

Hay tanta distancia entre las condiciones económicas que prevalecían en los años setenta y ochenta y las que hoy parecen regir en nuestros mercados financieros, que éstas, sin duda, deben parecer ininteligibles a las mentes más jóvenes. Así, la profunda diferencia que existe entre dos momentos de nuestra historia económica nos permite apreciar cuán diferentes pueden ser los efectos de los regímenes y principios que inspiran la práctica de la política monetaria, juzgar sus ventajas y entender sus debilidades estructurales, y, finalmente, analizar sus principales propiedades. Tres partes componen este  breve trabajo que intentará explicar los principales principios que inspiran el diseño de la política monetaria actual, entender sus efectos sobre las principales variables económicas y discutir los desafíos fundamentales del futuro. En la primera parte, intentaremos presentar una historia de los distintos regímenes monetarios que guiaron las acciones de los distintos directorios del Banco Central de Reserva en sus 75 años de existencia. En la segunda, discutiremos las bases conceptuales del actual régimen de metas de inflación, su modalidad de funcionamiento y las principales fuerzas que intervienen en la determinación del equilibrio general. Finalmente, la tercera parte se dedicará a discutir los principales riesgos y desafíos que enfrentará el actual régimen dentro de los próximos 5 años.

                         ASPECTOS GENERALES

  1. DIFERENTES REGIMENES MONETARIOS DEL BCR HASTA LA ACTUALIDAD

La Junta de Gobierno que sucedió a Leguía, momento más oportuno para fundar el Banco Central de Reserva, cuando el 18 de mayo de 1931, expidió el decreto ley No. 7137 que estableció a esta institución, siguiendo el proyecto preparado por la misión Kemmerer. Era la función principal del nuevo banco mantener estable el valor de la moneda nacional y proporcionar, según las circunstancias, la liquidez necesaria para la demanda variable del comercio y de la industria. Su organización imitaba la estructura del Banco Federal de Reserva de los Estados Unidos y las normas que regulaban su funcionamiento interno. Aunque puede resultar apasionante e intrigante, en 1931 era el nuevo banco incapaz de cumplir con sus objetivos principales. Y fue este hecho el que determinó que el primer sistema cambiario que administró el Banco Central fuera un sistema de tipo de cambio flexible. Si bien esta elección fue motivada por las urgencias propias del momento y no sugerida por ninguna reflexión teórica, puede ésta haber sido la más apropiada para contener la deflación que en ese entonces amenazaba con destruir nuestra economía. La depreciación del sol contuvo, sin duda, la caída incesante de los precios y contribuyó a amortiguar los efectos que sobre el Perú tuvo la gran depresión económica de los años treinta. ¿Explica, acaso, la peculiar política monetaria que practicó el primer directorio del Banco Central, los efectos leves que la gran depresión tuvo en el Perú y la rapidez de la posterior recuperación económica? No podemos dejar de notar, ya que este hecho tuvo una enorme importancia para la historia monetaria del Perú, el gran empeño que demostró el directorio del Banco Central para cumplir con el objetivo de satisfacer las necesidades de liquidez del sector privado. Fue este impulso el que llevó a establecer un conjunto de bancos especializados en sectores específicos gracias a la feliz iniciativa de los distintos gremios de producción. En cualquier caso, las operaciones financieras que ejecutaba el nuevo Banco Central con estos bancos especializados se convirtieron pronto en cruciales instrumentos de la política monetaria, y, quizás, fue la subordinación de estos respecto del financiamiento del Banco Central.

[pic 2]

El factor que explique la escasa fortuna que ha tenido esta institución administrando un sistema de tipo de cambio fijo. Este conflicto potencial se manifestó con gran claridad en los años cuarenta, cuando la Segunda Guerra Mundial transformó drásticamente las condiciones económicas que prevalecían en la economía mundial y el Perú sustituyó el sistema de tipos de cambio flexibles por uno de paridad fija, emulando la tendencia mundial. Esta nueva coyuntura afectó, en primer lugar, los flujos de comercio internacional, y este hecho impulsó los precios hacia arriba, tanto en el mercado interno como en el internacional. También elevó drásticamente las necesidades financieras de todas las unidades de producción. En efecto, el conflicto armado, al aumentar los costos de transacción del comercio internacional, redujo también las velocidades de rotación de todos los activos circulantes, y, por esta razón, incrementó el capital de trabajo requerido por unidad de producción y la demanda de crédito bancario. Sin embargo, poseía el Banco Central pocos incentivos para cambiar de expansión crediticia que, después de la fundación de la “Banca de Desarrollo“, prevaleció en la década de los treinta. De hecho, el nuevo esquema institucional y las urgencias económicas del momento contribuían a la popularidad de estas políticas. Al final, el régimen que terminó por consolidarse fue uno de tipo de cambio fijo. No fue difícil para el gobierno y el directorio del Banco Central descubrir que el sistema podía funcionar, en el corto plazo, sin garantizar la plena convertibilidad de la moneda nacional, pues así se generan las condiciones que permiten, los efectos probables de la expansión interna del crédito sobre los agregados monetarios. Favorecía a esta política la excepcional coyuntura en la que la guerra global imponía un límite obvio a la inversión financiera internacional, incrementaba la preferencia por liquidez, e impulsaba hacia arriba las cotizaciones internacionales de todos los productos de exportación del Perú. Resulta interesante, sin embargo, mencionar varias de las políticas que introdujeron los gobiernos en su vano afán de aplazar lo inevitable, ya que son notoriamente similares a aquellas que se introdujeron en los años ochenta cuando también se agotaron las posibilidades del régimen monetario. La crisis fue, en ambas ocasiones, precedida por medidas administrativas cuya ejecución rebasa los límites de la capacidad de regulación de nuestro aparato estatal. Trataron nuestras autoridades económicas de remediar la crisis con tipos de cambio diferenciados, controles de capitales y racionamiento de las divisas. Y en ambas ocasiones fracasaron.

  1. BASES CONCEPTUAL DEL ACTUAL REGIMEN Y MODALIDAD DE FUNCIONAMIENTO

Era el Perú, a finales de los años cincuenta, una economía bastante peculiar. Inconfundible en América Latina, ya que la organización de sus instituciones y la estructura de su sistema de producción no se acomodaban con facilidad al patrón típico de un país no desarrollado. Inmediatamente capturaban la atención de los especialistas dos rasgos de nuestro sistema financiero: el inusual sistema cambiario y la gran sofisticación de la banca y del mercado interno de capitales. En los años dorados del régimen de “Bretton Woods“ era, sin duda alguna, bastante curioso encontrar en el mundo algún banco central que operara un sistema de tipo de cambio flexible. Existía, por cierto, la posibilidad, y esta era discutida en los tratados de economía internacional, pero su existencia todavía poseía –pensaban los especialistas- una naturaleza ideal. Sin embargo, ¿cuál era la razón que apartó al Perú de los cincuenta de la usual práctica internacional? ¿Por qué resultaba tan curioso e intrigante el sistema financiero del Perú? La respuesta a estas preguntas se relaciona íntimamente con las políticas económicas que ejecutó el gobierno del general Manuel Odría para superar la crisis financiera de finales de los años cuarenta. La Misión Klein propuso al gobierno del Perú un sistema de tipo de cambio dual, con una tasa de cambio para las transacciones comerciales y otra para las transacciones financieras. Era un sistema bastante flexible y fácil de adaptar al tormentoso curso de las variables internacionales, ya que le permitía al Banco Central ensayar la lógica fundamental del esquema global, diversos sistemas cambiarios e incluso mezclar sus propiedades, y así encontrar el balance apropiado para las circunstancias del momento. Sin embargo, el requisito esencial para su funcionamiento era el requerimiento que entregaba al Banco Central el monopolio de la oferta de dólares. Colapsó el sistema a finales de los ochenta (Alan Garcia), cuando las condiciones económicas que permitían preservar este monopolio, debido a la aparición del narcotráfico, la banca paralela y la hiperinflación, no pudieron sostenerse. Cabe resaltar otro hecho que en esos años solía motivar la curiosidad de los más perceptivos visitantes extranjeros: la sofisticación y enorme eficiencia de la banca peruana de finales de los cincuenta, producto de singulares circunstancias y atribuibles al genio financiero de José Payán y al carácter diversificado del sector primario exportador. Conseguía, en efecto, el sistema financiero de Payán logros que aparentemente se encuentran fuera del alcance del actual, como, por ejemplo, colocar en la Bolsa de Valores de Lima bonos emitidos por las Municipalidades y financiar en el mercado interno diversas inversiones públicas. A principios de los sesenta, con el primer gobierno de Belaúnde, comenzaron cambios institucionales en el modelo financiero de este, cuyo propósito fundamental era reforzar el papel que jugaba el Estado en el sistema monetario y financiero. Aparece así el Banco de la Nación, y se produce un notable aumento de los requerimientos de crédito del Estado. La motivación más profunda parece ser la conjunción de la caída en la rentabilidad que se registraba en varias ramas del sector primario exportador y el notorio descenso en la inversión de las empresas. Creaban estas condiciones un consenso a favor de la expansión del Estado, ya que se le asignaba a este, mediante la expansión de sus funciones en la economía, el papel de sustituir a un sector privado que parecía dispuesto a retirarse de las actividades productivas. Fueron estos hechos los que determinaban, por entonces, la aparición de un superávit en el balance entre el ahorro y la inversión de las empresas, y por esta razón, los que provocaban la necesidad de canalizar estos excedentes al sector público. ¿Qué factor provocó la caída en la rentabilidad de nuestras industrias exportadoras? Todo parece indicar que en esos años había agotado la economía peruana sus posibilidades de expansión y que las inversiones requeridas para solucionar este problema estructural, debido a su escala, escapaban de las posibilidades del sector privado nacional. El Perú de los años sesenta no había aún desarrollado mecanismos ni instituciones que permitieran concentrar y centralizar el capital en un gran proyecto de inversión. Tampoco contaba con grupos empresariales capaces de financiar las inversiones requeridas para superar los problemas estructurales de la economía. Este hecho, sin duda, favoreció la expansión del sector público en la economía y determinó la historia financiera en los años posteriores. Con el gobierno militar de Velasco Alvarado, intensificaron las determinaciones que comenzaron, con claridad, a manifestarse en los años sesenta. Abandona la convertibilidad de sol y, aunque preserva el modelo de regulación cambiaria concebido por Klein, refuerza su poder regulatorio con controles de capitales y la prohibición expresa de los depósitos en moneda extranjera. Contrata también en los mercados internacionales una apreciable cantidad de deuda pública, y con estos recursos financieros ejecuta un programa de inversiones cuyo propósito fundamental era superar las dificultades estructurales de la economía exportadora. Desgraciadamente, estas inversiones maduraron demasiado tarde, cuando Perú había caído en una nueva crisis financiera. Fue esta crisis la que determinó la aparición de la inflación y de los mecanismos psicológicos que garantizan su preservación en el tiempo. Cuando, con el ministro Javier Silva Ruete, las autoridades lograron recuperar el control de la situación a finales de los años sesenta, existieron claras oportunidades para cortar las raíces del fenómeno inflacionario. Se cometió un error crucial

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (24 Kb) pdf (417 Kb) docx (1 Mb)
Leer 15 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com