Sociologia De La Educacion 1
833259816720 de Febrero de 2014
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Sociología de la educación
Bloque 1
SOCIEDAD Y EDUCACIÓN
Conceptos y Relación entre Sociedad y Educación
SOCIEDAD:
Sociedad (del latín societas) es un concepto polisémico, que designa a un tipo particular de agrupación de individuos que se produce tanto entre los humanos (sociedad humana -o sociedades humanas, en plural-) como entre algunos animales (sociedades animales). En ambos casos, la relación que se establece entre los individuos supera la mera transmisión genética e implica cierto grado de comunicación y cooperación, que en un nivel superior (cuando se produce la persistencia y transmisión generacional de conocimientos y comportamientos por el aprendizaje) puede calificarse de cultura.
La educación
La educación, (del latín educere 'sacar, extraer' o educare 'formar, instruir') puede definirse como:
• El proceso multidireccional mediante el cual se transmiten conocimientos, valores, costumbres y formas de actuar. La educación no sólo se produce a través de la palabra, pues está presente en todas nuestras acciones, sentimientos y actitudes.
• El proceso de vinculación y concienciación cultural, moral y conductual. Así, a través de la educación, las nuevas generaciones asimilan y aprenden los conocimientos, normas de conducta, modos de ser y formas de ver el mundo de generaciones anteriores, creando además otros nuevos.
• Proceso de socialización formal de los individuos de una sociedad
Relación Sociedad-Escuela
La relación sociedad-educación en los últimos años, ha sido una respuesta a las condiciones sociales y a las necesidades de los individuos, es hora de replantear la relación en función de la sociedad que estamos construyendo. No existen dudas acerca del papel que tiene la sociedad y la familia en la educación, pero la cuestión es, cómo se vincula el entorno social y cultural del y la estudiante con la escuela para lograr una formación que armonice con la sociedad.
La prevalencia de la sociedad educadora en el marco de la educación capitalista-neoliberal nos ha afectado profundamente por los valores del mercado, el egoísmo y el oportunismo, en una concepción de la educación que privilegia el individualismo, lo lucrativo, por encima de los valores de solidaridad social y de lo colectivo. En este enfoque la educación no es un derecho social sino individual que se transfiere al área del mercado; se define en atención al destino que cada individuo tiene en la sociedad (de acuerdo a su procedencia familiar-social), o sea la que impone el capitalismo, por ejemplo educar para ser intelectual, profesional, empleado asalariado, propietario o no propietario, obrero, mano de obra especializada o no especializada; esta es una educación promotora de que sólo unos pocos se convierten en los que dominan, en los patronos, en los que mandan y controlan el aspecto económico del país, mientras que la mayoría está sujeto a lo que decida esa minoría.
Y ¿Cuál es el papel de la escuela en este modelo? Como un efecto perverso la escuela debe funcionar como una “empresa” cualquiera que presta “servicios” educativos que produce “beneficiarios” que es la población estudiantil, todo en respuesta al mercado. De esta forma la función social de la escuela es definida en una perspectiva empresarial, la formación de ciertas competencias necesarias para que en la sociedad, los individuos estén suficientemente capacitados para desempeñarse de una forma competitiva en un mercado de trabajo que es altamente selectivo y cada vez más exigente, obviando el papel que le toca desempeñar a los/las estudiantes y profesionales como personas y sujetos.
Por otra parte el estado docente está sustentado en la afirmación de que todo sistema educativo obedece a una concepción acerca del ciudadano o ciudadana que desea formar de acuerdo a la sociedad que se aspira. Si estamos en un momento de construcción y consolidación de una sociedad más justa y equitativa, que busca romper con los esquemas neoliberales y se dirija más hacia una práctica social liberadora en la búsqueda de una identidad venezolana y latinoamericana, se evidencia la necesidad del estado docente que tiene como centro al ser humano como individuo y ser social, capaz de responder y participar activamente en la transformación de la sociedad en la que vive y se desarrolla. Todo ello en el marco de una educación inclusiva que llegue a todos y todas, garantizando que cada ciudadano(a) reciba una formación integral de calidad en forma continua, en igualdad de condiciones y oportunidades.
Es así que se justifica un estado docente que tenga como misión revolucionaria formar a ciudadanos(as) que traten de transformar la sociedad a la que aspiramos. Siguiendo el pensamiento de Paulo Freire, podemos decir que el proceso educativo no es neutral, la educación o sirve para formar ciudadanos(as) que se integren a la sociedad actual y sean conformistas a la misma, o se convierte en “la práctica de la libertad”, que significa formar personas críticas y creativas en relación con su realidad y que participan en la transformación social
Cultura y educación
La cultura evidentemente es un producto de la interacción humana, sin embargo, los contenidos y significados culturales se diversifican y enriquecen con base en el contexto histórico-geográfico que les da sustento. En los orígenes de la humanidad podemos imaginar un panorama paradójico y contradictorio, es decir, la humanidad se encuentra con una madre naturaleza prodiga en recursos naturales, benévola y generosa, pero por la otra, salvaje, caótica y mortal. Estas condiciones iniciales de la vida humana en su hábitat terrestre, en principio dieron las pautas para la aparición de una incipiente cultura que de manera recursiva y diacrónica se configuraba y establecía los parámetros socioeconómicos, éticos y morales, de forma gradual y consistente con su momento histórico.
La cultura vista desde una perspectiva simbólica se gestaba, empezaba por reconocer formas de comunicación con signos y símbolos que significaban y resignificaban la expresión de necesidades básicas y de socialización en ciernes. Sí a partir de ese momento hubiéramos tenido la capacidad de registrar nuestra memoria colectiva, seguramente hoy nuestra perspectiva de interpretación y comprensión de la cultura sería más consistente y congruente con la realidad.
Con esto quiero decir, que no existen normas o leyes universales a partir de las cuales demos una interpretación más o menos precisa y específica de lo que es la cultura, pues considero que cualquier disciplina o ciencia e inclusive individuos, tienen una interpretación mediada por sus cogniciones y experiencias particulares, es decir, que no obstante, la profundidad o conocimientos propios de la ciencia o disciplina que se trate, siempre será una mera aproximación interpretativa desde su punto de vista muy particular. Lo que conlleva, a que existan un sin número de definiciones acerca de este constructo social.
Así pues, la cultura vista como un producto de la convivencia y del desarrollo humano de los distintos pueblos sobre la tierra, y retomando la concepción de Geertz, representa entonces, el estilo y forma de vida adquiridos a través de la historia mediante la significación y resignificación de los contenidos simbólicos de las expresiones sociales de la comunicación e interacción humana.
Por ello, considero que en este caso la cultura es una ciencia interpretativa en busca de significaciones -y agrego- dinámica y en constante resignificación de los contenidos culturales, aquí el problema es, quien o quienes tienen la posibilidad de influir de manera más importante en esta resignificación de los contenidos culturales.
Lo que podemos responder es que sin duda la ideología dominante será en mayor medida la responsable de influencia en este proceso, puesto que, la cultura entendida como parte de la ideología, y a esta como producto de la estructura socioeconómica y política, obedece principalmente a los fines y propósitos de la clase dominante.
Sin embargo, esto no obsta para que como lo plantea Paulo Freire actuemos en el campo educativo en la orientación de construir una cultura desalienante, crítica y reflexiva que forme a estudiantes con un perfil diferente y con una ética libertaria y autónoma.
En esta orientación, la construcción y transformación de la cultura y el respeto a su diversidad y tolerancia tiene su principal soporte en la educación desde la cual podremos influir en este intento de modificar los significados y símbolos recursivos y resinificados que produzcan un nuevo perfil de ser humano en beneficio de una mayor tolerancia, fraternidad y libertad en la vida del hombre.
Actualmente la gran mayoría de las transformaciones y cambios que se están presentando se basan en los intereses del mercado y su expansión, de nosotros depende que en este desarrollo el ser humano sea el eje principal de partida, el <…ser humano que sea capaz de transformar la economía internacional, el futuro del desarrollo del mundo y el lugar que cada nación ocupe en él, con el propósito de mantener y desarrollar una cultura de convivencia en armonía con su entorno social, político, económico y ambiental.
Desde esta perspectiva, no solo se trata de formar y educar a los estudiantes universitarios con el propósito de que se familiaricen con los avances científicos-tecnológicos que le
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