Stados unidos es uno de los países con menos ayudas sociales del mundo occidental

No es país para pobres

Living 30 days with minimum wage

Estados unidos es uno de los países con menos ayudas sociales del mundo occidental^[1], un país donde la dependencia económica depende de cada uno de sus habitantes, es decir, una economía neoliberal, siguiendo la filosofía de Adam Smith^[2]. La regulación del salario mínimo en estados unidos depende de cada uno de los estados independientes que lo forman. Gracias a eso, la desigualdad i la falta de oportunidades son las que caracterizan a este estado, considerado uno de los gigantes del mundo. En el documental Living 30 days with minimun wage, nuestros protagonistas sobrevivirán (porque no se le puede llamar de otra forma) con el salario mínimo del estado de Ohio, Columbus, que es de 5,15 dólares la hora y analizaremos las consecuencias sociales que conlleva.

La división social, la desigualdad, la exclusión, la estigmatización y la marginación, son consecuencias directas provocadas por el nivel de renta de nuestra sociedad. Tanto a nivel de pobreza, como a nivel de riqueza. Una renta familiar elevada comportará un aislamiento social muy similar al de las rentas más bajas. Analicemos así una persona que es ascendida en su puesto de trabajo, y por ello, aumenta su renta. Generalmente esa familia cambiará su manera de vivir por completo. Esta se trasladará a un barrio adecuado a su renta, a un colegio de pago correspondiente, se tomarán sus debidas vacaciones, e irán a pasear por grandes avenidas comerciales. Y lo mismo podría ocurrir si le damos la vuelta por completo. Si esa familia con una renta media pasa a una reducción del salario, o directamente es despedida, observaremos como ocurre exactamente lo mismo. Encontraremos en esa familia un  cambio residencial, un cambio de instituto, distintas formas de ocupar su tiempo libre. Formándose así la desigualdad y la  división social.

Una de las mayores influencias sociales que acaban desarrollando la personalidad de cada una de las personas proviene de nuestro alrededor, de todo aquello que envuelve nuestro hogar. Por lo que la vivienda es una pieza fundamental para el desarrollo social. La pareja formada por Morgan y Alex, protagonistas del documental, nos demuestran lo esencial que es el hogar. Estos se trasladan a un barrio marginal de Ohio, en un pequeño apartamento que, particularmente viene con un fumadero de crack incluido. Este tipo de viviendas, o barrios residenciales son los poblados por las familias con las rentas más bajas, que también suelen llamarse o convertirse en guetos. Por lo que una familia instalada allí recibirá unas influencias sociales negativas, como la delincuencia o el abandono escolar juvenil. Estos actúan como un muro infranqueable para el crecimiento social de la familia, sobretodo de los hijos o hijas que habitúen esas zonas. Podríamos afirmar que estas situaciones adversas efectúan un movimiento en círculo, un pez que se muerde la cola, ya que el abandono escolar o la delincuencia, resultado de una educación social negativa, conllevará a esas personas a unos futuros trabajos con una cualificación no necesaria, que desembocará en trabajos con el sueldo mínimo, y así volvería a empezar la rueda.

En EEUU un apartamento, que pueda ser habitado por personas con rentas bajas muy probablemente también lleve consigo grandes carencias sanitarias que, por consecuencia, llevarán a los inquilinos a un estado de salud insano. La carencia de salud y el cansancio físico de la jornada laboral solo pueden terminar en un sitio físico, el hospital. Añadiéndole a todas estas adversidades que el Estado del Bienestar en Estados Unidos es invisible, una familia que ingrese mensualmente el mínimo estipulado por la ley, no puede costearse la visita a estos lugares. La sanidad es un privilegio que algunos no pueden costearse, y si lo hacen, será sacrificando otros derechos sociales como por ejemplo, no poder pagar las facturas de la luz o el gas. De la misma forma que no encontramos dentro de otro bucle de pobreza: “sin calefacción o sin agua caliente, enfermaremos antes, y otra vez no podremos pagar la factura del médico”.

        Y para terminar sobre las inconveniencias de la vivienda, nos reafirmaremos sobre el aislamiento también de una forma literal. La lejanía de la mayoría de los puestos de trabajo que se encuentran en el centro de la gran ciudad o bien en los barrios ricos de las afueras. De tal forma que los trabajadores tengan que usar siempre el transporte público o privado, cual diferencia entre estos es escasa, ya que un billete de autobús o un viaje en taxi son auténticos privilegios para nuestros protagonistas.

        En el transcurso del documental vemos como día tras día el agotamiento físico y psicológico de la pareja formada por Morgan y Alex va incrementando a un nivel despiadado. Ya que le tendríamos que sumar a todas estas adversidades del hogar y la vivienda, el hecho de trabajar durante una larga jornada en las peores condiciones, con la única recompensa de a final de mes, cobrar lo mínimo e insuficiente para vivir o para llevar una vida digna. Psicológicamente es un golpe muy duro que prácticamente podemos observar como sobrepasa a nuestros protagonistas. Pues, cuando finaliza la jornada laboral, empieza la familiar, y en ella, empieza también la función como contable de finanzas. Un trabajo totalmente agotador, en el cual tienen que salvar siempre su empresa (su vida) frente a todas las adversidades económicas. Por tanto, la jornada real podemos deducir que no termina nunca. Solo las pocas horas que tienen para descansar y levantarse pronto para volver a ir a buscar trabajo, que nunca sabrán si lo conseguirán, si ese va a ser su día de suerte. Pues quizás no sea la mejor manera de acostarse para descansar, acostarse sin saber que les deparará el día de mañana.

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