Historia social del mundo occidental – Del feudalismo a la sociedad contemporánea. Susana Bianchi
Enviado por fabarle • 10 de Junio de 2018 • Apuntes • 1.416 Palabras (6 Páginas) • 264 Visitas
Historia social del mundo occidental – Del feudalismo a la sociedad contemporánea. Susana Bianchi
Guía de preguntas
- Realizá un cuadro de doble entrada en el que se caractericen los tres legados de la sociedad feudal.
- Desarrollá, en un texto explicativo, cuáles fueron los puntos clave para que el Cristianismo se convierta en la única religión oficial del Imperio.
- Elaborá un texto que explique en qué consistió el sistema feudal.
- Caracterizá, en forma de pirámide, los distintos estratos sociales que conformaban la Sociedad Feudal.
- ¿Cómo logra consolidarse la burguesía como grupo social? ¿Qué los caracteriza?
Desarrollo
LEGADOS[pic 1] CARACTERÍSTICAS | ROMANO | CRISTIANISMO | GERMÁNICO |
Ubicación | Alrededor del Mar Mediterráneo en Roma | Su centro en Roma y sus subdivisiones en provincias y diócesis | Imperio Romano; oriente y occidente |
Siglo | III a. C | III | V |
Características de los ciudadanos | Comparten: derechos, una lengua, estilo de vida | Compartían la lengua eclesiástica, la concepción republicana del ciudadano ya estaba degradada | Distintos dialectos Organización económica |
Guerras. ¿Objetivos? | Obtener esclavos para la mano de obra | Obtener esclavos para vender a la frontera | |
Esclavos ¿de dónde provienen? | En la casa del amo | De las guerras | |
Distribución de la Tierra | Los terratenientes a labradores-arrendatarios para conseguir cosecha | Jefes de las aldeas a clanes y familias para cultivar |
- El Cristianismo no siempre fue la religión oficial del Imperio Romano, para que esto ocurriera tuvieron que existir diversos procesos históricos que lograron que la Iglesia, como institución física del Cristianismo se consagrara como una, sino la más importante en el desarrollo de la sociedad occidental.
El Imperio Romano estaba constituido por una sociedad que compartía una misma visión del mundo. En esta visión predominaba la importancia del “aquí y ahora”, con ideas muy vagas acerca del trasmundo; el ideal de vida era el del ciudadano que servía al Estado y a la comunidad. Esta cosmovisión era totalmente antagónica a lo que iba a proponer el Cristianismo.
La sociedad del Imperio estaba formada por un mundo urbano habitado por ciudadanos, los cuales eran una absoluta minoría. Por debajo de esa minoría se encontraba el mundo rural, que incluía la parte más numerosa de la sociedad conformada por campesinos libres; pero la organización más numerosa era la de los esclavos campesinos y esclavos. Su estilo de vida era el de abastecer a los poderosos.
La pax augusta, la estabilización de los límites del Imperio y el paso que dieron los emperadores para terminar con las guerras, trajo consigo un déficit en la esclavitud como institución y se agotaba la principal fuente de suministros de esclavos. Esto genero una caída de la producción agrícola, a consecuencia campesinos libres se escaparon refugiándose en un terrateniente poderoso que poco a poco se fue transformando en un amo. El poder en crecimiento de los terratenientes era una descomposición del Estado; al debilitarse la autoridad central, también se debilitaban las defensas por lo que las invasiones fracturaron a la sociedad y a la economía, diversas religiones orientales entraron al Imperio poniendo su acento en el Salvacionismo, es aquí donde aparece el Cristianismo, ya que no había posibilidad de movilidad social, de carrera política y en medio de una crisis, se puede entender el éxito de ésta religión.
El Cristianismo creía en la trascendencia del hombre en el trasmundo, una visión totalmente opuesta a la visión romana. Al principio fue considerado por los romanos como una superstición cuyos practicantes se caracterizaban por su cerrada tolerancia, fueron perseguidos por la práctica de culto no autorizado y por asociación ilícita. Sin embargo en el siglo III, el número de cristianos había crecido tanto que el Estado podía considerarlos como un peligro público, éstos fueron transformando las viejas visiones del mundo romano. Fue entonces cuando el emperador Constantino los admitió poniendo fin a las persecuciones. Finalmente Teodosio (379-395) declaró al Cristianismo como la única religión oficial del Imperio con su centro en Roma y sus subdivisiones en provincias y diócesis, asumió en alto grado una cultura romana y conservó la tradición ecuménica, la idea de que debía existir un orden universal.
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