Huella Ecológica

HUELLA ECOLÓGICA

Alvear Romero Cristian Fernando

Introducción

Vivimos en un mundo que durante las últimas décadas su medio ambiente se ve muy afectado por la presencia del humano en él, desde la era industrial y todo el avance tecnológico se ha buscado la manera de la producción en masa de ciertos productos que evitarían un gasto en la mano de obra y la facilidad de la persona en realizar ciertas acciones como es movilizarse, todo esto con una contra, que es la contaminación del medio ambiente. Los problemas ambientales que enfrentamos en la actualidad son un tema serio que es necesario tomar en cuenta y buscar una solución factible, para ello debemos conocer el impacto actual que cada persona provoca en el mundo y que hábitos tocaría cambiar para hacer este un mundo mejor. En el siguiente ensayo se va a presentar varios aspectos que son muy importante conocer, de la misma manera reflexionar y aplicar en la vida diaria de cada persona.

Pero la sociedad actual presenta un inconveniente que se debe tomar en cuenta, este es el estilo de vida que se ha ido tomando por el pasar de los años, las costumbres del consumismo y todas las posibilidades que nos da la actualidad de tener una vida de alguna forma más fácil. Entonces nació el concepto de la huella ecológica creada por William Rees y su Alumno Mathis Wackernagel en 1996, esta analiza los patrones de consumo de recursos y la producción de desechos de una población determinada.

Desarrollo

La huella ecológica es una herramienta que ayuda a analizar la demanda de la naturaleza por parte de la humanidad. Esta se define como el total de superficie ecológicamente productiva necesaria para producir los recursos consumidos por un ciudadano medio de una determinada comunidad humana, así como la necesaria para absorber los residuos que genera, independientemente de la localización de estas superficies. [1]

Entrando en contexto, el impacto del humano en el medio ambiente es en la actualidad es una situación grave en varios aspectos que analizaremos a continuación. La mayor parte de la energía producida en el mundo proviene del petróleo y el gas natural. El uso de estos combustibles significa un gran impacto en la atmósfera del planeta tierra, del mismo modo ocasionalmente el transporte del petróleo puede provocar derrames accidentales en el océano lo que dañaría la fauna marina, aves, vegetación y el agua en sí. La mayor parte de contaminación proviene del petróleo industrial y motriz, que, luego terminado su uso, la mayoría termina en ríos y mares lo cual representa un serio daño al ecosistema. El uso de los derivados del petróleo que lo es el diésel y la gasolina en la vida diaria de cada persona, al usar transporte público o un vehículo personal representa un gran impacto en el medio ambiente, estos son los más usados en la actualidad a punto de que en algunas partes del mundo los vehículos representan un mayor número de unidades que los mismos habitantes, la cantidad de contaminación en las grandes ciudades provocadas por la circulación vehicular es inimaginable.

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Otra de las fuentes de energía es la radioactiva, que genera una gran cantidad de desechos radioactivos provenientes de las reacciones nucleares, de los yacimientos de minerales usados en las plantas nucleares y también de donde son procesados estos minerales para su respectivo uso.

Tomando en contexto la minería y su procesamiento a menudo producen impactos negativos sobre el aire, suelo, agua, cultivos, salud humana, entre otros. Además, dan una mala imagen al sector lo cual perjudica al turismo local y la radicación de nuevas poblaciones.

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