La relación de ayuda y sus principales dificultades

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UNIVERSIDAD MAIMONIDES

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD

LICENCIATURA EN ENFERMERIA

MONOGRAFIA

“LA RELACION DE AYUDA Y SUS PRINCIPALES DIFICULTADES”

DIRECTOR DE LA CARRERA: Prof. Lic. María Teresa Ricci.

DIRECTORA DE ESTUDIOS: Lic. Ariana Silva.

Autor: Cristina Soledad Román.

Corrientes, 18 de diciembre de 2015.

        “Entrar en la habitación de un paciente con la intención de dedicar un poco de tiempo para escucharle puede ser un acto terapéutico cien veces más eficaz que inyectarle una perfusión”.

Lapierre (1991)

                              INDICE GENERAL:        Página

Introducción……………………………………………………………… 3

Justificación……………………………………………………………… 4

Objetivos…………………………………………………………………. 5

Desarrollo: Capítulo 1

La relación de ayuda……………………………………………………. 6

La relación de ayuda en el cuidado enfermero………………………. 7

Definición de relación de ayuda en enfermería.

Aportes históricos…………………………………………………………8

La comunicación, elemento imprescindible…...…...………………....12

La deshumanización en el mundo de la salud………………………..12

La relación de ayuda como instrumento de humanización………….13

Actitudes y habilidades en la relación de ayuda en enfermería…….14

Tipos de respuestas en la comunicación……………………………...17

La escucha activa………………………………………………………...21

Personalizar la relación de ayuda………………………………………23

Confrontar…………………………………………………………………23

Capítulo II………………………………………………………………….25

La modalidad de trabajo y su efecto deshumanizante………………..26

El actuar profesional………………………………………………………27

Principales problemas que surgen………………………………………27

Capítulo III………………………………………………………………….28

Conclusión………………………………………………………………….29

Bibliografía………………………………………………………………….30

INTRODUCCIÓN:

Intentaremos definir en este trabajo qué entendemos por la relación de ayuda en general, y en particular en los cuidados de enfermería, así como, las condiciones esenciales en las que un profesional de enfermería debe apoyarse para establecer una adecuada relación de ayuda, y tener la capacidad de responder a la persona necesitada de ayuda en el marco de las relaciones humanitarias, además analizaremos las diferentes dificultades que surgen en la relación enfermero-paciente en torno a las posiciones de este y al manejo de las diversas situaciones críticas que se presentan en un entorno hospitalario con el paciente y su familia.

Se tendrán en cuenta los diferentes aportes de las pioneras enfermeras teóricas cuyo modelo de cuidados se centra en una concepción de la persona desde una perspectiva humanístico-existencial, tales como V. Henderson, H. Peplau, J. Orlando, J. Travelbee, J. Watson y R.M. Parse.

Y, desde una perspectiva social y humanitaria en la concepción de la salud, así como de la enfermedad y de todos sus actores, citando autores como L. J. Cibanal, J. Bermejo, R. Carabias, A. Fontanals Ribas,  Raquel Marín Morales, entre otros.

JUSTIFICACIÓN:

Nosotros, los enfermeros somos protagonistas y testigos de situaciones que resultan de la carencia de conocimientos que aún existen en torno a la relación de ayuda, los profesionales no estamos preparados académicamente para asistir, entender, acompañar y ayudar a cualquier persona en los difíciles momentos que anteceden a su muerte, existe una desproporción entre los conocimientos técnicos recibidos y la preparación en los aspectos humanos de la profesión.

Comprendemos que es imprescindible profundizar en esta problemática, ya que el sufrimiento no es un síntoma, ni un diagnóstico, sino una experiencia humana tremendamente compleja, el paciente además necesita de un exhaustivo control de sus síntomas, pero también la restitución de su identidad como persona.

El problema de la deshumanización de la atención de la salud ha sido enfocado desde muy diversas ópticas (y en distintos momentos históricos), ya sea desde la perspectiva del paciente, de los familiares o del propio equipo de salud que presta los servicios, pero no hay un estudio de las causas y de las posibles soluciones. Al realizar un recorrido de la atención profesional en el mundo de la salud observamos que solo podemos re-humanizar esa atención con el compromiso directo de todos los participantes del equipo de salud para promover actos y condiciones que tengan como finalidad el respeto de los derechos humanos que se afirman en la dignidad de cada persona enferma.

OBJETIVOS:

Describir una noción general sobre la relación de ayuda.

Destacar y conceptualizar la importancia de la relación de ayuda en el cuidado enfermero.

Repasar los aportes históricos de las primeras enfermeras teóricas centrados en una concepción de la persona desde una perspectiva humanístico-existencial.

Resaltar el rol de la comunicación como elemento consustancial a la relación de ayuda.

Analizar el fenómeno de la deshumanización en el ámbito de la salud y la relación de ayuda en enfermería como instrumento de humanización.

DESARROLLO:

CAPITULO I:

1. La relación de ayuda:

El término “ayudar” se origina etimológicamente del latín adiuvare que expresa “provocar alivio”. El diccionario de la Real Academia Española lo define al término como: prestar cooperación; auxiliar, socorrer; hacer un esfuerzo, poner los medios para el logro de algo; valerse de la cooperación o ayuda de alguien.

De acuerdo a Brusco (1997), entendemos por ayudar “el hecho de ofrecer recursos a una persona con el fin de que pueda superar una situación difícil o hacer frente a la misma y vivirla del modo más sano posible”.

La “Relación de Ayuda” es un fenómeno sumamente cotidiano en la vida ordinaria y se presenta en los ámbitos más diversos. Según Jesús Madrid (2005) se podría definir la relación de ayuda como aquel encuentro entre dos personas, en el cual, una de ellas pide ayuda para modificar algunos aspectos de su modo de pensar, sentir y actuar, y la otra manifiesta su consentimiento en ayudar, dentro de un marco interpersonal adecuado.

Ángelo Brusco (1997) define la relación de ayuda como “una forma especial de relacionarse humanamente con el otro con el fin de satisfacer necesidades humanas básicas”, y ésta, no es monopolio de las llamadas profesiones de ayuda, tales como, asesores, psicoterapeutas, trabajadores sociales, etc, ya que las relaciones entre amigos, entre padres e hijos, e incluso, entre profesores y alumnos, adquieren frecuentemente una connotación de relación de ayuda.

La diferencia radica en que, los profesionales de las llamadas “profesiones de ayuda”, cuentan con un conocimiento mucho más profundo del individuo y con un conjunto de actitudes, habilidades y destrezas, “con una serie de técnicas humanas, que han sido adquiridas a través del aprendizaje y el adiestramiento, y que les permite desempeñar y utilizar los propios recursos naturales de ayuda de un modo más conveniente” a decir de Bermejo (1999), es decir, de forma controlada, consciente, intencionada y sobretodo metódica, distinto al modo espontáneo en que los demás suelen hacerlo en las diferentes situaciones cotidianas de su vida.

Bermejo denomina “interacciones de ayuda”, a todas aquellas interacciones que se dan en el ejercicio diario de toda profesión con la persona en dificultad. Estaríamos hablando, a modo de ejemplo, de aquellas situaciones en las que el profesional enfermero toma contacto con el paciente para realizar los cuidados más sencillos, como puede ser el canalizar una vía periférica, tomar la temperatura, realizar el aseo diario, etc. Situaciones en las que interacciona con el paciente y en las que la comunicación es un elemento fundamental para ofrecer cuidados de calidad.

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