MICROBIOLOGIA DEL ENSILAJE

[pic 1]

“Año de la Inversión para el Desarrollo Rural y la Seguridad Alimentaria”

UNIVERSIDAD NACIONAL AGRARIA LA MOLINA

TEMA: MICROBIOLOGIA DEL ENSILAJE

[pic 2]

PROFESOR: Ramos Chaupin, Roberto Raúl

Grupo: “C10”

Integrantes

• Ronald Mamani Condori
• Juan  villano leyva
• Jorge Pérez clemente
• Gian villafuerte Ariza
• José Rodríguez Espada

2013

INTRODUCCIÓN

En la actualidad, el ensilaje es la forma de preservación de forrajes para la producción ganadera, más común en el mundo y es bien establecido que las Bacterias Ácido Lácticas (BAL) juegan un papel importante en la buena fermentación del silo, por lo que la flora epífita con la que cuente el forraje al momento de ser ensilado influirá fuertemente en la calidad del producto final, especialmente cuando no se utilizan aditivos bacterianos en la preparación del silo, ya que en general su concentración inicial es baja con respecto a otros tipos de microorganismos, pero siempre y cuando se ofrezcan las condiciones necesarias para su desarrollo (fuente de energía disponible, temperatura, humedad y anaerobiosis). La fermentación que ocurre en el silo, es anaeróbica; estos microorganismos deben obtener el oxigeno para el uso de los metabolitos existentes, dejando así compuestos reducidos que son los desechos del metabolismo anaeróbico.

Lacto bacilos spp. , Homofermentadores y los Leuconostoc spp. Heterofermentadores se encuentra viviendo en asociación con el material de la planta siendo, en la mayoría de los casos, las poblaciones dominantes tanto en el forraje fresco como en el silo. Esto es complementado por quienes reportaron que las BAL epifíticas representan la característica más importante en la fermentación del silo, así mismo, afirman que la concentración inicial de BAL en el forraje será un factor significativo en la predicción de adecuados estados de fermentación ayudando a determinar si es o no necesario el uso de inoculantes bacterianos. Los Lactobacillus spp. Por su parte, se encuentran en muy pocas cantidades en la flora epifita y deben esperar que los cocos productores de acido láctico les creen las condiciones anaeróbicas y de pH necesarias para su desarrollo, periodo después del cual, crecen vigorosamente promoviendo la fermentación láctica por mayor tiempo.

 Las bacterias presentes en el forraje fresco son mayoritariamente aeróbicas pero, en un buen ensilaje, rápidamente son reemplazadas por anaeróbicas. Durante este proceso, algunas bacterias son capaces de romper la celulosa y hemicelulosa hasta diferentes azucares simples, sin embargo, este proceso, en la mayoría de los casos, no es significativo debido a que la disminución paulatina del pH evita el crecimiento de este tipo de bacterias. Otras bacterias rompen los azucares existentes en el forraje para formar productos finales más simples (ácido acético, láctico y butírico). Los productos más deseables en la fermentación son el acido acético y láctico, mientras esta degradación bacteriana se produce, la cantidad total de materia seca del ensilaje se va disminuyendo

El almidón, la pectina y la hemicelulosa pueden sobrevivir a una fermentación dominada por las BAL pero pueden ser fermentados en diversos grados cuando otros tipos de bacterias dominan el silo. La celulosa  y la lignina son relativamente estables y son degradadas solamente cuando  existen mohos aeróbicos en el silo. El periodo más crítico ocurre en los primeros 3 a 5 días,  2 posteriormente hay un continuo aumento del acido láctico que puede llegar a durar hasta 20 días dependiendo de la concentración de azucares solubles presentes.

ENSILAJE

El proceso consiste en una fermentación y el arte de ensilar bien en controlar dicha fermentación dentro de límites bastante estrechos, las plantas obtienen el agua del suelo y el dióxido de carbono del aire permiten a las plantas fabricar azúcar , almidón y otros carbohidratos completos.

En el proceso de ensilado es la inversa de este proceso de síntesis, los carbohidratos son degradados para formar el gas dióxido de carbono y ácidos orgánicos, y las proteínas son reducidas a aminoácidos.

El proceso es el siguiente, cuando se coloca en el silo un forraje verde las células de las plantas aún están vivas y por lo tanto respiran; la respiración siempre va acompañada por un aumento de la temperatura del aire retenido en la masa las células vegetales mueren y entonces tienen lugar los cambios bacterianos. A partir del jugo de las células muertas las bacterias producen ácido láctico, ácido acético y butírico. El ácido dominante en un buen ensilaje es el ácido láctico que generalmente constituye de 0.5 al 2 % del peso del producto en fresco.

El peligro de favorecer la fermentación butírica es que esta descompone las proteínas de tal modo que produce sustancias toxicas perjudiciales para ganado, el calentamiento que tiene lugar en el silo es de considerable importancia debido a que depende de la cantidad de aire aprisionado en la masa y esta cantidad de aire depende el control de la fermentación bacteriana

El grado de compacidad que pueden alcanzar las cosechas muy húmedas o cortadas en estado excesivamente prematuro, puede ser tan grande que debido a la cantidad de aire tan pequeña retenido en la masa, la respiración se suprima rápidamente y la temperatura no se eleve o se eleve muy poco.

También es excesivamente baja la temperatura de las capas inferiores cuando se coloca en el silo una gran cantidad de material en un tiempo relativamente corto.

La temperatura se controla por 3 factores:

1. Sequedad de la cosecha.
2. El grado de compacidad en el silo.
3. La rapidez en el llenado del silo.

Para favorecer a la fermentación láctica la temperatura debe de ser 26.5 a 37.5 ºC con lo cual la cantidad de aire presente es el que conviene a los organismos lácticos, las temperaturas bajas favorecen a las bacterias Butíricas.

En los silos en que no se tiene en cuenta este hecho es frecuente encontrar diferentes tipos de ensilaje en los diversos niveles del silo.

Hacia el fondo del silo, si el calentamiento ha sido insuficiente, el ensilaje puede tener un fuerte olor a ácido butírico y ser de color verde-amarillento, mientras que hacia la parte superior el color puede oscurecerse hasta casi ser negro y el material tener el olor dulce y agradable del tabaco de buena calidad. Cuando el silo se llena demasiado rápidamente se produce una estratificación de este tipo.

Entonces para obtener un producto uniforme en todo el silo, es necesario dar suficiente tiempo a las capas del fondo para que alcancen una temperatura de, por ejemplo, 32 ºC, antes de continuar con el llenado y prestar atención especial a las capas superiores aprisionándolas fuertemente o colocando pesos sobre ellas para que su temperatura no se eleve demasiado.

...