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NUEVAS TECNOLOGÍAS EN LA EDUCACIÓN


Enviado por   •  1 de Diciembre de 2011  •  Informes  •  2.709 Palabras (11 Páginas)  •  489 Visitas

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NUEVAS TECNOLOGÍAS EN LA EDUCACIÓN

NOMBRE

Las nuevas tecnologías están alterando dramáticamente todos los aspectos de la vida, del trabajo a la educación. Mientras que la televisión ha sido declarada regularmente por los maestros como una distracción y un digno enemigo de la tarea educativa pero con la masificación de las computadoras y la todopoderosa internet, las nuevas tecnologías multimedia están proporcionando herramientas de enseñanza innovadoras y emocionantes.

En este artículo se analiza el potencial de las nuevas tecnologías multimedia para el desarrollo de la educación y la forma en que las nuevas tecnologías pueden mejorar el proceso educativo haciendo algunas consideraciones respecto a la sociedad en la que hoy pretendemos educar. De manera que, veremos la virtud de la tecnología en la provisión de nuevas herramientas la pedagogía que pueden ayudar a reconstruir la educación para el siglo próximo.

La sociedad actual

En los últimos años, se han acuñado una serie de términos para referirse a la sociedad actual, entre ellos tenemos el de sociedad de la información, sociedad del conocimiento, aldea global y sociedad Red.

En relativamente poco tiempo, se han generado cambios económicos, políticos, tecnológicos y sociales que han creado lo que Manuel Castells llama “La Sociedad Red”. La “Sociedad Red” va más allá del uso de una computadora conectada a Internet. La “Sociedad Red” implica una transformación de fondo de los roles sociales, las fronteras nacionales, la cultura, el conocimiento y la información. Son precisamente el conocimiento y la información, las dos “palabras mágicas” de este nuevo paradigma social.

En el ámbito económico se observa que los sectores de producción de bienes pierden importancia en la estructura económica a favor del sector servicios. Más concretamente, crece la importancia de los mercados globalizados de divisas, de finanzas y de capitales frente a los mercados de productos. Además, la estructura ocupacional cambia radicalmente a través del crecimiento de las categorías profesionales altamente cualificadas y la disminución de las categorías menos cualificadas. (Willke 1998)

Relacionado con los cambios en las estructuras ocupacionales, se observa una creciente importancia de la educación, que queda reflejada en el nivel de educación más alto de la población. Un indicador es la transformación de las universidades como instituciones de elite en instituciones de educación superior masificada. No obstante, en el debate alrededor de la sociedad del conocimiento no está resuelta aún la cuestión de si el progreso tecnológico es el causante del incremento de nivel educativo o si el incremento del nivel formativo ha impulsado la innovación tecnológica y, por consiguiente, la transición hacia la sociedad del conocimiento. (Kruger 2006)

En el concepto de ‘sociedad del conocimiento’ se proyecta la visión de que se puede alcanzar una mayor igualdad social a través de esfuerzos educativos y formativos. Sin embargo, hay varios argumentos de peso que inducen más bien a una versión pesimista. Hay, por ejemplo, el argumento de que un aumento general del nivel de cualificación de la población y un aumento de las titulaciones académicas causarían una devaluación de estos títulos. En otras palabras, una alta cualificación no serviría ya para conseguir subir escalones sociales sino “solamente” evitaría bajarlos (kruger 2006).

Ante este panorama, los profesores tienen un gran reto, no solo el de formar individuos aptos para una sociedad tan demandante y competitiva, sino de que ellos mismos no sean rebasados tanto por una sociedad mas cualificada como por los aparatos tecnológicos que hoy la sustentan, pues como afirma Gomez Buendía: Navegar en la aldea global será una tarea que exige muy altos niveles de "inteligencia social" esto es, capacidad organizada del país para adaptarse a un mundo que cambia rápidamente, lo cual supone adquirir y procesar la información sumamente compleja, para tomar decisiones que aseguren el aprovechamiento óptimo de cada coyuntura. Por ello como profesores debemos formar al ser humano de forma integral, con todas sus potencialidades.

MAESTROS RESISTENTES AL USO DE LAS TECNOLOGÍAS

La sociedad de la información y el conocimiento ha creado una necesidad cada vez mayor para los maestros y otro personal escolar en todos los niveles de la educación por desarrollar, utilizar y difundir técnicas para la inclusión de la tecnología como medios que permitan experiencias integradas, el aprendizaje interdisciplinario que preparan a los estudiantes para la vida en el mundo real (Bailey, Ross, y Griffin, 1996; Petrakis, 1996; Stanley, Linauer, y Petrie, 1998.

Sin embargo, la mayoría de los maestros no se capacitan de manera formal en el uso de las nuevas tecnologías por lo que no es de extrañar que muchos de ellos sigan haciendo lo mismo, es decir la práctica docente todavía tiene una fuerte carga empírica en lugar de dedicar tiempo a aprender cómo utilizar las innovaciones que están interviniendo en todos los aspectos de la vida, no solo en el aspecto técnico, sino de manera que se utilicen las tecnologías con un enfoque didáctico.

Con demasiada frecuencia, las innovaciones tecnológicas pasan desapercibidas, ignorados, o rara vez se utilizan en las escuelas de hoy, aunque también hay que decir que el mantenimiento a los equipos en las escuelas no es muy eficiente, por lo que los profesores tienen miedo a usarlos ya que se pueden “descomponer”, y los efectos de no seguir el ritmo es que la escuela o la práctica de los profesores se desfase de manera tal que se pierda aun más el impacto que tiene la escuela en las vidas de los alumnos.

La exclusión de las tecnologías de la información de los procesos de planificación, gestión e implementación de innovaciones curriculares mantiene el cambio en la educación que se mueve a paso de tortuga y sirve para mantener la enseñanza estancada, a veces mediocre como la regla en los esfuerzos para la "reforma" de las escuelas (Morton, 2006 ).

Nuestro gobierno ha tratado de ponerse a la par de las sociedades actuales con reformas educativas y cursos de actualización a maestros, sin embargo, como dice Cardona Ossa (2010) La transformación profunda tiene que producirse esta vez de abajo hacia arriba, desde una reconversión total de cada uno de los centros educativos; desde un cambio de actitudes y de planteamientos por parte de educadores y desde el empeño responsable de cada uno de los dicentes o alumnos, es decir, de quienes son los verdaderos “clientes” del proceso educativo.

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