Problematicas en el profesorado de educacion fisica, Mario Di Santo y Crisorio

Mario Di Santo

El profesor y Licenciado refiere a reflexiones en torno a la Educación física en Argentina, en Córdoba haciendo hincapié en la formación profesional del profesor de educación física.

• La negación de la dimensión biológica: en este punto marca un deterioro en la formación de educación física, refiriéndose a un agrupamiento de materias para formar una sola, lo que quita especificidad en ciertos temas a abordar o muchos temas se dan por perdidos ya que no alcanza el tiempo para poder estudiarlos. Expresa como ejemplo la asignatura de “fundamentos biológicos” la cual rige actualmente, pero antes se daba de forma separada en varias asignaturas, lo cual expresa que como consecuencia genero un desconocimiento sobre la dimensión de biología en los alumnos del profesorado, se desconoce el cuerpo humano y su movimiento.
• En este otro punto menciona las nuevas asignaturas que fueron agregadas en el currículo del profesorado, pero que nada tienen que ver al profesorado; danzas, bailes, actividades circenses, etc. Lo que expresa el autor, es una disconformidad acerca de esto ya que en caso que se necesiten profesores para estas actividades, los profesores de educación física serán los últimos tenidos en cuenta. En lugar de estas asignaturas que suman tiempo de estudio y cursado en los estudiantes, se podría dar especificidad sobre las destrezas, actividades gimnasticas, todo aquello que nos compete en el profesorado. Por otra parte, el autor Sergio Luscher asegura que antes de poder expresarnos libremente a través del cuerpo, es esencial asegurarnos de tener una buena condición física y las habilidades físicas necesarias.
• Mario Di Santo está expresando su opinión sobre la "recreologización" de la educación física, que se refiere a la tendencia actual de enfocar la educación física principalmente en actividades recreativas y de entretenimiento. El autor critica esta idea, utilizando el término "piñonfijización" para describirlo, y enfatiza que, como profesores de educación física, no estudiaron durante tantos años para simplemente entretener a las personas. Di Santo cuestiona la necesidad de que los profesores de educación física estén a cargo de actividades recreativas, argumentando que el juego y la recreación deberían ser actividades autónomas, sin la intervención de un profesor. Él expresa su creencia de que la intervención de un profesor arruina la esencia del juego, ya que introduce la idea de competencia y superioridad entre los participantes. El autor también reflexiona sobre si esta pretensión de ser indispensables en las actividades lúdicas revela una actitud de omnipotencia por parte de los profesores de educación física. Él argumenta que los niños pueden jugar mejor y gastar más energía en el recreo sin la presencia de un profesor, y cuestiona el papel de los profesores en la conducta lúdica, sosteniendo que su intervención puede afectar negativamente tanto a nivel individual como social. En resumen, Mario Di Santo critica la idea de que los profesores de educación física sean principalmente "entretenedores" y defiende la importancia de su papel en la enseñanza de movimiento y condición física, en lugar de ser solo animadores de fiestas infantiles.
• el autor está cuestionando la tendencia de desacreditar las actividades deportivas y gimnásticas en la educación física, y reemplazarlas con actividades lúdicas, expresivas y artísticas. Él argumenta que estas actividades han ocupado el lugar de las deportivas y gimnásticas debido a una estrategia ideológica que las vincula arbitrariamente a momentos negativos de la historia argentina. El autor critica la idea de que la gimnasia, el deporte y la técnica sean considerados sinónimos de opresión y prácticas elitistas. Él señala la importancia del aumento de la masa muscular esquelética y la lucha contra el flagelo de la obesidad y el síndrome metabólico, y se sorprende de cómo se descalifica este enfoque como promotor de "cuerpos hegemónicos".

El autor también menciona la intención detrás de las actividades físicas, argumentando que el movimiento en sí mismo no es bueno ni malo, sino que es la intención lo que cuenta. Él destaca que el baile, el deporte, la gimnasia o cualquier juego pueden ser utilizados tanto para oprimir como para liberar a las personas, dependiendo de quien los enseñe y los valores que transmita. El autor reconoce a los profesores de educación física como los únicos que se han planteado transmitir valores positivos a través del deporte, y destaca la importancia de la gimnasia y su formación gimnástica en su vida. Él enfatiza que la gimnasia, el atletismo y la natación son los pilares de la educación física y la formación motriz integral del individuo.

En resumen, el autor defiende la importancia de las actividades deportivas y gimnásticas en la educación física, critica la descalificación injusta de estas actividades y destaca el papel de los profesores de educación física en transmitir valores positivos a través del deporte y la gimnasia.

• La demonización de la técnica y la falta de atención que se le está dando a la ejecución correcta en la formación en educación física. Señala que existe una tendencia a menospreciar la importancia de realizar los movimientos de manera adecuada, sin importar cómo se realicen. Esto lleva a consecuencias negativas, como la creación de límites técnicos y psicomotores que resultan imposibles de superar y el estancamiento en el desarrollo personal. Además, se menciona que existe una idea errónea de que los estudiantes pueden tener éxito en los deportes incluso sin tener un conocimiento profundo de la técnica. El autor recuerda que, en su formación en la década de 1980, se enfatizaba la importancia de la técnica y se dedicaban horas de práctica y disciplina para lograr un rendimiento mínimo. Considera que la técnica no es opresión, sino la forma de hacer las cosas correctamente y seguir aprendiendo desde esa base. También destaca la importancia de la biomecánica y la ergonomía para tener movimientos eficientes, disfrutar del movimiento a lo largo de la vida, preservar la independencia motora y evitar lesiones. El autor concluye que ignorar estos aspectos técnicos es un error y que se debería prestar más atención a la ciencia y la investigación que respaldan su importancia.
• Él enfatiza la importancia de comprender el proceso de aprendizaje y ponerse en el lugar del estudiante para poder satisfacer sus necesidades, considerar sus capacidades y conocimientos, y brindar una enseñanza más efectiva y enriquecedora. También destaca la importancia de evaluar los resultados de la enseñanza para asegurarse de que estén alineados con el proceso de aprendizaje y sean beneficiosos para los estudiantes. En conclusión, descalifica la nueva forma de educación física, donde solo la prioridad es el proceso de enseñanza y no de aprendizaje.
• el autor expresa su preocupación por la separación entre la educación física, la salud y el deporte. Durante más de 20 años, ha estado luchando por unir la educación física y la salud, pero algunas corrientes epistemológicas han descalificado esta perspectiva, tachándola de "higienista" de manera negativa, como una obsesión. El autor menciona la visión de Aristóteles, quien entendía que la gimnasia era primordial, seguida por la medicina y luego la cosmética. Esto sugiere que la educación física no debería ser solo un complemento de la medicina, sino que podría desempeñar un papel opuesto, centrándose en la prevención de enfermedades a través de una educación integral del cuerpo, incluyendo movimiento y nutrición. El autor señala que, en la sociedad actual, la salud es la excepción y la enfermedad es la norma, y parece que la educación física ya no se preocupa por abordar esta cuestión, es decir que la EF ya no promueve la salud. Sugiere que, si la educación física da la espalda a la salud, tal vez debería considerarse la incorporación de otra materia en la escuela que enseñe cómo vivir de acuerdo con la naturaleza humana en lo que respecta al movimiento. Además, menciona que el deporte requiere los valores que solo un profesor de educación física puede aportar, y sin ellos, el deporte queda en manos de empresarios y representantes, perdiendo su potencial educativo. El autor reflexiona sobre la importancia de recuperar la iniciativa de hacer del deporte un fenómeno educativo y atraer a aquellos deportistas que deseen estudiar educación física para enriquecer aún más el ámbito deportivo. Lamentablemente, menciona que actualmente los deportistas que se acercan a estudiar educación física abandonan rápidamente debido a la forma en que se imparte la educación física en los profesorados. El autor hace un llamado a atraer a estos deportistas, para que, con su experiencia y conocimiento, puedan hacer del deporte algo aún más hermoso.
• La falta de estudio del movimiento humano: el autor expresa su preocupación por la falta de estudio del movimiento humano en diferentes áreas y cuestiona la educación física actual, destacando la importancia de abordar este tema en profundidad.
• El autor destaca la falta de formación para la investigación en el ámbito de la educación física. Se cuestiona cómo es posible llevar a cabo investigaciones sin conocer adecuadamente el objeto de estudio. Señala que no se enseña a investigar y que, incluso, existe la idea de que la docencia puede divorciarse de la producción de conocimiento. Algunas personas sostienen que el propósito de la carrera es formar docentes y no investigadores. Esto significa que los profesores simplemente reproducen lo investigado por otros o enseñan basándose en sus propias experiencias e intuiciones, considerándolas como la base principal de sus clases. El autor no logra comprender ni estar de acuerdo con esta idea. Considera que tener una mentalidad de investigador es crucial para la enseñanza. No se puede ser un buen docente si no se tiene interés en la producción de conocimiento. El autor menciona su experiencia en Canadá, donde pudo observar que desde el primer año de la carrera se fomenta la investigación. En ese país, la enseñanza se ve casi como una obligación si no se realiza investigación. En contraste, en su instituto en Córdoba (Argentina), no se ha producido ningún artículo ni publicación con referato internacional en casi 70 años. Ante la pregunta de qué enseñan si no investigan, el autor admite con vergüenza que enseñan lo que otros investigan. El autor también menciona la importancia de la práctica cotidiana en la educación física y considera que tanto la investigación como la experiencia práctica deben estar presentes y complementarse mutuamente.
• El debilitamiento de la educación física ha llevado a que personas sin formación adecuada se dediquen al entrenamiento físico. Esto genera problemas de control y calidad en el ejercicio. Es necesario fortalecer la carrera de educación física y garantizar que solo profesionales capacitados trabajen en la prescripción y entrenamiento físico. El ejemplo del modelo paulista en Brasil es destacado, donde solo los profesores de educación física pueden ejercer como entrenadores personales, respaldados por una formación universitaria sólida.
• El autor critica los reglamentos internos de las materias, seminarios y talleres, argumentando que son la base de la mediocridad. Señala que la permisividad y los derechos que permiten una baja asistencia y mal rendimiento académico no fomentan la excelencia ni el compromiso con la formación de calidad. El autor no comprende estos reglamentos y considera que los estudiantes deberían asistir a clase, estudiar y enfocarse en su aprendizaje en lugar de buscar formas de evitar quedar libres o incumplir con los requisitos académicos.
• El autor argumenta que la educación pública implica responsabilidades y compromisos, no solo derechos. Si alguien quiere estudiar de manera conveniente y sin esforzarse, debería considerar la educación privada, donde puede ajustar su horario y estilo de estudio a su conveniencia. Por otro lado, la educación pública es un privilegio y debe ser valorada. Es importante cuidarla y comprometerse con ella, dedicándose al estudio de manera seria y responsable. El autor también critica la falta de exigencia en los institutos de formación docente en educación física. Señala que muchos estudiantes se inscriben y se gradúan sin haber pasado por exámenes rigurosos que evalúen sus aptitudes y conocimientos necesarios para ejercer la docencia. Esto puede tener un impacto negativo en la calidad de la educación que se brinda. En resumen, el autor busca promover una reflexión sobre el perfil del docente que se está formando en educación física y la importancia de valorar y fortalecer la educación pública. También destaca la necesidad de establecer estándares más altos en la formación docente, para garantizar que los profesionales estén adecuadamente preparados y comprometidos con su labor educativa.
• En este fragmento, el profesor Román Gorosito comparte su perspectiva sobre varios aspectos relacionados con la formación de profesores de educación física.

• En primer lugar, menciona que existe una falta de actualización en la preparación de los docentes en esta área. En un mercado laboral que demanda profesores capacitados para abordar diversas áreas, como gimnasios, clases personalizadas, rehabilitación, colaboración con médicos y nutricionistas, se necesita que los graduados adquieran las habilidades necesarias para satisfacer estas necesidades. Sin embargo, los programas de formación todavía se enfocan principalmente en la educación física escolar, y a veces incluso se limitan a actividades recreativas y de entretenimiento. Esto lleva a que los profesionales se desempeñen con ineficiencia y falta de rigor en los campos laborales donde se requiere otra especialización.
• Otro punto que destaca es la falta de coherencia entre lo que es necesario en el ámbito escolar y lo que realmente se hace. Anteriormente, en épocas en las que los niños tenían una vida más activa y participaban en diversas actividades físicas, la escuela complementaba su formación. Sin embargo, en la actualidad, con el aumento del sedentarismo y la tecnología, es fundamental que la educación física en las escuelas se enfoque en formar a los estudiantes y mejorar sus habilidades físicas básicas. Solo cuando se haya logrado una buena formación física, se podrá jugar de manera saludable y sin riesgos. Gorosito cuestiona la utilidad de jugar con niños que tienen problemas de postura, obesidad o falta de coordinación básica, y destaca la importancia de la educación física en la escuela para contrarrestar los efectos negativos del estilo de vida actual.
• Por último, el profesor Gorosito señala la contradicción que existe cuando un aspirante a profesor de educación física lleva un estilo de vida sedentario y poco saludable. Él se pregunta cómo alguien que quiere ser profesor de educación física puede fumar, beber y llevar una vida poco activa. Considera que es difícil entender cómo un profesor transmitirá pasión por el cuidado del cuerpo y enseñará ejercicios si él mismo no practica lo que predica. Para él, un profesor sin fundamentos sólidos y sin amor por el movimiento y el cuidado personal no debería ser considerado un verdadero profesor.

Segundo texto: La educación física que viene- Ricardo Crisorio

El texto se menciona que durante los procesos de cambio suelen surgir resistencias en forma de "pseudociencia", es decir, ideas o argumentos que se presentan como científicos pero que carecen de fundamentos sólidos y se aferran a creencias establecidas sin una base científica. Estas manifestaciones de pseudociencia pueden surgir como una forma de oposición a los cambios propuestos, pero no se respaldan en argumentos sólidos o evidencia científica. En lugar de buscar la verdad a través de la investigación y el análisis riguroso, se apoyan en dogmas, creencias o afirmaciones infundadas. El texto sugiere la necesidad de realizar investigaciones rigurosas y fundamentadas para respaldar las resistencias al proceso de cambio.

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