La evaluación como oportunidad. Resumen explicativo y con lenguaje docente
Meel VzquezResumen3 de Diciembre de 2025
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📘 LA EVALUACIÓN COMO OPORTUNIDAD
Rebeca Anijovich y Graciela Cappelletti (2017)
Resumen explicativo y con lenguaje docente
⭐ Introducción
En la introducción, Anijovich y Cappelletti presentan la idea de que la evaluación debe considerarse una oportunidad para aprender, y no únicamente un mecanismo para calificar o sancionar. Señalan que la evaluación no es un momento aislado dentro del proceso de enseñanza, sino una instancia continua que ayuda a comprender cómo aprende el estudiante y cómo puede mejorar su desempeño.
Las autoras distinguen tres funciones fundamentales de la evaluación:
- Diagnóstica: permite conocer los saberes previos y el punto de partida.
- Formativa: acompaña el proceso mientras se está aprendiendo.
- Sumativa: certifica lo alcanzado al cierre de una secuencia o período.
Plantean que el docente debe abandonar la mirada clasificatoria y adoptar una perspectiva que convierta la evaluación en una herramienta pedagógica, ética y orientada a la mejora de la enseñanza.
CAPÍTULO 1 – La evaluación en el escenario educativo
Autoras: Rebeca Anijovich y Graciela Cappelletti
En este capítulo, las autoras analizan la evolución histórica de la evaluación dentro del sistema escolar. Tradicionalmente, la escuela utilizó la evaluación como un instrumento selectivo y acreditador, centrado en medir resultados y comparar estudiantes entre sí. En ese modelo, predominaban las pruebas estandarizadas y la repetición de contenidos.
Sin embargo, Anijovich y Cappelletti explican que los avances pedagógicos han transformado esta mirada. Hoy se concibe la evaluación como un proceso integrado a la enseñanza, orientado a comprender las maneras en que cada estudiante construye conocimiento. La evaluación deja de ser un cierre o un juicio final para convertirse en un acto pedagógico situado, que reconoce la diversidad, las trayectorias y los ritmos propios de los alumnos.
Las autoras subrayan que evaluar supone tomar decisiones didácticas: intervenir, retroalimentar, ajustar estrategias y acompañar. Por eso, la evaluación no puede separarse del contexto del aula ni de los vínculos que se establecen allí.
Idea principal: la evaluación contemporánea busca ser justa, contextualizada y centrada en los aprendizajes, no en la sanción.
CAPÍTULO 2 – Los conocimientos de los docentes y las prácticas
Autoras: Rebeca Anijovich y Graciela Cappelletti
En este capítulo se destaca que evaluar implica poner en juego diversos saberes docentes. Las autoras señalan que un buen proceso evaluativo requiere:
- Saber disciplinar: dominio profundo de la materia que se enseña.
- Saber pedagógico-didáctico: capacidad para seleccionar estrategias de enseñanza coherentes con los objetivos.
- Saber metodológico: manejo de instrumentos, técnicas y criterios de evaluación.
- Saber vincular: construcción de un clima que favorezca la participación y reduzca la ansiedad frente a la evaluación.
Las autoras remarcan que la evaluación se ve atravesada por las creencias del docente. Si el docente concibe que “evaluar es poner notas”, actuará de una manera; si entiende que “evaluar es acompañar”, construirá prácticas más formativas.
También promueven la reflexión profesional: revisar decisiones, cuestionar procedimientos, analizar los resultados y buscar coherencia entre lo enseñado, lo evaluado y lo esperado. Esta revisión continua mejora la calidad de la enseñanza y aporta mayor justicia educativa.
Idea principal: evaluar exige conocimiento profesional y reflexión permanente sobre la propia práctica docente.
CAPÍTULO 3 – Las evidencias del aprendizaje
Autoras: Rebeca Anijovich y Graciela Cappelletti
Aquí se introduce el concepto de evidencia de aprendizaje como toda producción, acción o manifestación del estudiante que permite inferir qué ha aprendido y cómo lo ha construido.
Las evidencias pueden ser muy variadas: producciones escritas, exposiciones orales, proyectos, debates, trabajos prácticos, videos, dibujos, mapas conceptuales, entre otros. Lo central es que deben ser pertinentes, diversificadas y coherentes con los objetivos de enseñanza.
Las autoras advierten que no cualquier evidencia es válida: debe permitir observar aquello que realmente se pretende evaluar. Por ejemplo, si el propósito es valorar la comprensión profunda, no serviría aplicar una actividad que solo exija memorizar definiciones.
Es fundamental que el docente identifique indicadores claros que le permitan interpretar esas evidencias. Esto favorece la transparencia y la equidad, porque todos los estudiantes comprenden qué se espera de ellos.
Idea principal: la evaluación debe basarse en evidencias significativas y variadas, que reflejen las múltiples formas de aprender.
CAPÍTULO 4 – Más allá de las pruebas: la retroalimentación
Autoras: Rebeca Anijovich y Graciela Cappelletti
En este capítulo, las autoras sostienen que la retroalimentación (o feedback) es una de las herramientas más potentes para favorecer el aprendizaje. La retroalimentación no es simplemente corregir errores ni dar una devolución genérica como “bien” o “mal”.
Una buena retroalimentación debe:
- Ser específica, señalando qué se logró y qué falta.
- Ser oportuna, brindada mientras el estudiante aún puede mejorar.
- Estar centrada en el proceso, no en la persona.
- Ofrecer pistas concretas para avanzar.
Anijovich y Cappelletti estructuran la retroalimentación en tres preguntas orientadoras:
- ¿Hacia dónde voy? (objetivos, criterios)
- ¿Dónde estoy ahora? (qué logros ya se alcanzaron)
- ¿Cómo continúo? (acciones posibles para mejorar)
La retroalimentación transforma la evaluación en una instancia dialógica, donde el estudiante participa activamente de su propio proceso.
Idea principal: la retroalimentación es fundamental para orientar, sostener y profundizar los aprendizajes.
CAPÍTULO 5 – Transparentar y compartir las rúbricas
Autoras: Rebeca Anijovich y Graciela Cappelletti
En este capítulo se abordan las rúbricas como herramientas que explicitan los criterios e indicadores con los que el docente evaluará. Una rúbrica describe niveles de desempeño y permite diferenciar claramente una producción inicial de una más avanzada.
Las autoras destacan dos principios clave:
- Transparencia: los estudiantes saben desde el inicio qué se espera de ellos y cómo serán evaluados.
- Participación: cuando los estudiantes revisan o construyen rúbricas, comprenden más profundamente los criterios de calidad.
Las rúbricas favorecen la autoevaluación y la coevaluación, y ayudan a que la evaluación deje de ser arbitraria. Además, contribuyen al desarrollo de la autonomía, porque los estudiantes aprenden a reconocer qué aspectos deben mejorar.
Idea principal: las rúbricas fortalecen la claridad, la justicia y la coherencia de la evaluación.
CAPÍTULO 6 – El diseño de pruebas auténticas
Autoras: Rebeca Anijovich y Graciela Cappelletti
Las autorizas plantean que una prueba auténtica es aquella que propone situaciones reales o significativas, donde el estudiante debe aplicar sus conocimientos para resolver problemas concretos.
A diferencia de las pruebas tradicionales, que suelen centrarse en repetir información, las pruebas auténticas:
- Integran saberes.
- Exigen análisis, creatividad y pensamiento crítico.
- Conectan la escuela con la vida cotidiana.
- Permiten observar competencias, no solo contenidos.
Ejemplos de pruebas auténticas pueden ser proyectos, estudios de caso, investigaciones, presentaciones orales, resolución de situaciones reales o simuladas.
Para elaborarlas, el docente debe considerar: los objetivos, la diversidad del grupo, los niveles de apoyo, el contexto institucional y los criterios de evaluación.
Idea principal: las pruebas auténticas permiten evaluar aprendizajes profundos y significativos.
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