ETICA PARA AMADOR SAVATER, FERNANDO SINTESIS

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ETICA PARA AMADOR

SAVATER, FERNANDO

SINTESIS

El autor escribe un libro a su hijo Amador, pensando que a futuro él lo leyera y le sirviera para conducirse por la vida, es más como una charla entre padre e hijo, en ese momento el siente que este tema no es de su interés pero que en un futuro le servirá. Este libro está inspirado en un sueño de Amador en el que el padre le dice que tenga confianza en sí mismo. Este libro según dice el autor deberá ser un libro fácil de leer para quien decida hacerlo, y lo podrán consultar cuando y donde lo desee, sin que sea tedioso ni una imposición, sino por gusto, como una guía para la vida.

El libro toca el tema de la ética desde un punto muy universal y cotidiano, con ejemplos muy entendibles y aplicables, incita a la reflexión y es muy entendible para todas las personas independientemente de su edad o cultura.

En el primer capítulo se van tocando varios conceptos e ideas interesantes, nos habla de que la mejor manera de aprender a vivir, es saber lo que queremos en la vida, y saber distinguir entre lo bueno (lo que nos conviene y nos sienta bien) y lo malo (lo que nos sienta mal).

Habla de que el ser humano está programado biológicamente para ciertas cosas pero que siempre podemos elegir entre lo bueno o lo malo.  Así llega al concepto de libertad. Siempre podemos decidir entre el sí y el no, tenemos varios caminos a seguir, aclara que no somos libres para elegir lo que nos pasa, pero si para responder estas situaciones del modo que creamos más conveniente, y no siempre vamos a lograr lo que queremos porque siempre tenemos limitantes, pero tenemos la libertad de intentar cuantas veces queramos y tomar nuestras decisiones dentro de nuestras posibilidades  por nuestra propia voluntad, y de cada intento debemos ir aprendiendo para esto seguirlo aplicando a lo largo de nuestras vidas. Así conocerme a mí mismo a al mundo en que vivo y evitar tener tantos tropiezos

En el capítulo 2 Savater nos explica que los hombres no podemos elegir lo que nos pasa, pero sí que hacer ante cierta situación a la que nos enfrentemos. Cuando tomamos una decisión es porque preferimos hacer algo, aunque a veces las circunstancias nos imponen ante dos opciones que no son de nuestro agrado y debemos tomar una decisión.

A la razón por la que hacemos las cosas se le llama “motivo” y existen tres tipos de motivación que el ser humano experimenta:

Ordenes: a veces actuamos por miedo, por afecto o confianza a alguien, porque esperamos una recompensa.

Costumbre: nuestra forma de actuar a veces es por presión de la sociedad, por no llevar la contraria, por obediencia a ordenes o porque todo mundo se comporta así y seguimos modas.

Estas dos primeras vienen de fuera, son externas.

Capricho: aquí ya es una cuestión que sale de adentro, muy espontanea, a veces por imitación, otras por mera rebeldía y llevar la contraria.  Solo porque quiero.

Nuestra manera de actuar dependerá mucho de nuestras motivaciones, aunque a veces debemos reflexionar como vamos a actuar e inventar las elecciones que tomaremos para no lastimar a otros o a nosotros mismos.

En el Capítulo 3 nos habla del por qué hacemos las cosas, puede ser por rutina, imposición, ejemplo a seguir, presión social, miedo al ridículo o a la censura, deseo de aceptación, para conseguir lo que queremos o simple capricho. Pero cuando tomamos en serio una decisión estas razones pierden importancia.

Tenemos la libertad de decidir, pero no debemos olvidar darnos cuenta de lo que estamos decidiendo, y no dejarnos llevar, es aquí donde debemos pensar dos veces las cosas que vamos a hacer.  Cuando actuamos por capricho sin pensar, hacemos cosas que después nos arrepentimos y puede resultar hasta peligroso. Dice el autor una frase “Nunca una acción es buena solo por ser una orden, una costumbre o un capricho”. (Savater)

Examinar lo que hago más a fondo razonando por mí mismo es ser adultos e inventar la propia vida, aunque no del todo ya que no debemos olvidar que vivimos en un mundo compartido y no solos.

Para emplear bien la libertad que tenemos debemos tener en claro la ética y la moral, Sabater nos a la definición de Ética y de Moral para aclarar estos conceptos.

Como determinar si alguien es bueno o no, es algo complicado ya que la palabra bueno a veces se refiere a ser dócil y no llevar la contra, pero es difícil catalogar a alguien como bueno o malo porque este contexto puede variar contextualmente. Se puede ser bueno en distintas maneras desde su ámbito propio de cada persona dependiendo de las circunstancias y las intenciones.

El capítulo 4 al decirnos “haz lo que quieras nos dice que debemos tomar en serio nuestra libertad, a veces las cosas que queremos entran en conflicto con otras, por eso debemos pensar siempre sobre las consecuencias de nuestros actos, no acatar órdenes de nadie sin antes hacer una valoración de lo conveniente o inconveniente de nuestras conductas. Antes de actuar debemos aprender a establecer prioridades y jerarquizar lo que realmente queremos a lo que solo nos apetece.

Nos habla de saber vivir, pero siempre de manera responsable e informada, dejarnos de órdenes, de impulsos y elegir por nosotros mismos, siempre tomando en cuenta que vivimos entre seres humanos, es decir, trata a los demás como me gustaría ser tratado a mí, como humanos, con dignidad. Debemos tomar en cuenta la importancia de la comunicación entre seres humanos, decir las cosas, pero también saber escuchar a los demás.

El capítulo 5 me impactó mucho, aquí nos dice que el hacer lo que quieras no precisamente nos lleva a conseguir darnos una buena vida. Aquí nos habla de las cosas materiales, las cosas simples que se fijan en un solo aspecto de la realidad y no tienen una perspectiva de conjunto, y como existen también otro tipo de relaciones más humanas que nos dan otro tipo de satisfacción.

La vida siempre es compleja y llena de complicaciones, si le huimos a estas complicaciones entonces realmente estamos buscando una gran simpleza y le estamos perdiendo sentido a la vida, estamos perdiendo nuestra humanidad.  

Las cosas materiales nos impiden ver más allá y hacer cosas que nos pueden traer felicidad, nos bloquean para buscar amor, amistad, respeto de la gente, salud, etc.  Si claro lo material es importante y necesario en nuestra vida, pero podemos dejar a un lado la convivencia con nuestros semejantes, tratarnos mutuamente como seres humanos, darnos trato digno. Los seres humanos nos humanizamos unos a otros, y si esto se pierde entonces este buen vivir del que hablamos ya no existe en nuestro mundo. Así que como tratamos a los demás es muy importante y aunque los demás nos traten más, siempre mientras nosotros hagamos lo correcto y los tratemos como seres humanos, tendremos el respeto al menos de una persona, de nosotros mismos, y contribuimos a un mundo más humanizado y mejor para vivir.

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