Ensayo sobre Ética y Educación

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UNIVERSIDAD DIGITAL DEL ESTADO DE MÉXICO

          MAESTRÍA EN TECNOLOGÍA DIGITAL PARA LA EDUCACIÓN

ESTUDIANTE:  

MARTHA ANGÉLICA CELORIO VALLE

MATRÍCULA:

UDX061920034

UNIDAD DE APRENDIZAJE:

ÉTICA EN LOS ENTORNOS VIRTUALES

ACTIVIDAD DE APRENDIZAJE:

ENSAYO

FECHA DE ENTREGA

18 DE SEPTIEMBRE DE  2020

“Se aprende de verdad lo que se vive, lo que se recrea, lo que se reinventa y no lo que simplemente se lee y se escucha.“

Roberto Aparici

INTRODUCCIÓN

A lo largo del pensamiento humano, se ha reflexionado sobre su actuar de forma individual y colectiva, ya desde la antigüedad filósofos que lograron trascender por su brillantez se cuestionaban sobre el valor objetivo y subjetivo de la existencia. La concepción del bien y el mal han ayudado a mantener en orden el comportamiento de las sociedades a través del tiempo.

En el siguiente ensayo, se desarrollarán temas ligados a la Ética y la Moral, en primera instancia, se responderá la pregunta, ¿qué son los valores?, ¿qué relación tienen con la educación?, y, ¿cuál es la importancia de estos en la educación dentro de los entornos virtuales de aprendizaje? Por último, se analizará el caso de María desde los valores que estuvieron presentes en su toma de decisiones, así como en la propuesta para romper con el paradigma social con el cual se enfrentó.

DESARROLLO

El ser humano no tiene únicamente la facultad racional y cognoscitiva que le sirve para emitir juicios sobre la realidad, sino que, también, es capaz de otorgarle valor las cosas. De esta manera, los valores no son ni objetivos ni enteramente subjetivos, sino ambas, el sujeto valora las cosas y el objeto ofrece un fundamento para ser valorado y apreciado. Así lo menciona Tierno (s\f), el valor es aquello que hace buenas a las cosas, aquello por lo que las apreciamos y por lo que son dignas de nuestra atención. Si bien, el hombre es el responsable de elegir entre los bienes que le solicitan y a los que naturalmente aspira, entonces este tendrá, en referencia a una mayor o menor importancia, una ordenación en una escala interior, la cual constituirá su jerarquía axiolóica como guía de su conducta.

El sujeto valora las cosas en función de sus circunstancias debido a que siempre se encuentra en interacción con el mundo, esto permite otorgar un sentido a lo que hacemos, tomar las decisiones pertinentes, responsabilizarnos de nuestros actos y aceptar sus consecuencias. La carencia de un sistema de valores bien definido, sentido y aceptado, instalará al sujeto en la indefinición y en el vacío existencial, dejándole a merced de criterios y pautas ajenas. (Tierno, sf)

¿Qué son los valores?

Se ha hablado de la importancia de la reflexión ética en la escala personal de valores que rigen nuestra conducta a lo largo de la vida, pero, a ciencia cierta, ¿qué entendemos por valor? Duart (2003) menciona que los valores modelan nuestra conciencia y nuestro comportamiento. Sentimos su presencia en nuestras acciones cotidianas, en nuestra conciencia, y constatamos su realidad a partir de nuestras vivencias más íntimas, es decir, aquellas que marcan nuestra conducta.

Como menciona Adolfo Sánchez (2006) todo acto posee en sí mismo la necesidad de elegir entre diversos actos posibles, de esta manera elegimos porque preferimos lo más valioso a lo menos valioso desde el aspecto moral de una jerarquía de nuestras propias consideraciones, es así como en la elección en la que participamos día con día, desde nuestra concepción, cada acto va conformando el comportamiento humano. En cuanto a lo que es valioso, es posible considerar cosas y actos valiosos.

Lo bueno y lo malo se hallan en una relación recíproca y constituyen un par de conceptos axiológicos inseparables. Definir lo bueno implica, pues, definir lo malo. En este sentido, se puede mirar desde diferentes aspectos el sentido de lo bueno, como es el caso de lo bueno como felicidad, como placer, como buena voluntad o como utilidad, desde una perspectiva abstracta la concepción de lo bueno y lo malo repercute en la consolidación del comportamiento y la elección de la escala de valores de cada individuo.

Como menciona Crisol (2014) los valores se adquieren y se configuran a lo largo de la vida y de alguna manera, también influyen en nuestra deficinición como personas. La Ética interviene en este aspecto, desde el concepto más originario y completo como el de Aristóteles, el cual constituye uno de los ejes principales para el pensamiento occidental desde la antigüedad, que desde la etimología menciona al ethos, la relación del carácter y la inteligencia con la felicidad. La Ética dirige sus conocimientos a la razón y la voluntad del individuo, dicho de otro modo, alude al comportamiento humano ordenado con respecto a ciertos principios y normas que son dados por la cultura a la que se pertenece. La gran diferencia entre la Ética y la moral, es que la primera no busca dogmatizar sobre el bien y el mal, si no más bien, llegar al acto de reflexión, una actividad intrínseca humana donde, por razón propia, se pueda orientar el pensamiento hacia un comportamiento que concuerde entre los valores culturales y sociales, así como las creencias propias, hasta alcanzar un equilibrio y coherencia al actuar (Crisol, 2014).

En cuanto a los valores en la educación, se puede pensar en una educación que prescinda de los valores, en la pretensión de ser neutral u objetiva, además de ser imposible e indeseable, es una contradicción en sus propios términos. La acción educativa se sostiene en función de que asume que algo éticamente deseable merece ser enseñado y aprendido. En cada acción educativa se transmiten, inevitablemente, determinadas preferencias, actitudes y valores, ligados a la cultura en la que aquella se realiza (Ortega, 2018).

Con eso, se puede reflexionar sobre los valores en la educación dentro de los entornos virtuales de aprendizaje, actualmente, es visto cómo ha evolucionado la tecnología en un abrir y cerrar de ojos, lo cual ha involucrado a la educación, también es notoria la necesidad del uso de herramientas tecnológicas tras la problemática mundial de salud a la que nos enfrentamos durante este año, así los paradigmas han tenido que cambiar y adaptarse a los estudios en línea.

Pero, ¿cuál es la problemática ética y moral a la que nos enfrentamos con el uso de estas nuevas formas? Anaya (2013) asegura que es imprescindible la búsqueda de medidas para control el uso ético de tecnologías para la información y la comunicación, ya que influyen en casi todos los aspectos de la vida humana, por lo que las consecuencias que puede conllevar su mal uso pueden ser tan graves como los crímenes que se cometen fuera de ellas. En una enumeración agrupa: la privacidad, la propiedad intelectual, la presencia de computadoras en el lugar de trabajo, incluso los crímenes generados a través del uso de las computadoras. Es verdad que también otorgan ventajas para lograr un trabajo más eficiente, facilitando la comunicación y la transferencia de información de manera casi inmediata entre los participantes, no obstante, menciona el autor, que podría caer en el vicio al mezclar actividades académicas con actividades personales o de ocio. Esta situación muestra no sólo que los límites entre trabajo y ocio se han desvanecido, sino también que la responsabilidad y la éticindividual han sido afectadas por una mala utilización de la tecnología.

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