La Nueva Sociedad Multicultural

La nueva sociedad multicultural

Alain Touraine en el capitulo cinco, La sociedad multicultural, de su libro ¿Podremos vivir juntos, hace un interesante análisis de la convivencia para las culturas y los sujetos, en una sociedad que el llama multicultural. Esto lo hace planteando una crítica a las ideologías y políticas autoritarias que “tienen la voluntad de unificar culturalmente la sociedad para imponer un control absoluto a unos individuos y grupos cuyos intereses, opiniones y creencias son siempre diversos” .

El problema que trata Touraine en este capítulo está relacionado con la importancia que deben adquirir los sujetos y las culturas ante la presencia de una globalización que afecta no solamente a la economía, sino también a todas las diferentes culturas que se ven involucradas en ella, ya que si no se le da un tratamiento adecuado pueden haber perdidas de identidades y una unidad cultural liderada por los países dominantes.

Es por eso que crítica la comunitarización que se da “cuando un movimiento cultural, o más corrientemente una fuerza política, crean de manera voluntarista, una comunidad a través de la eliminación de quienes pertenecen a otra cultura u otra sociedad” .El comunitarismo hace que las diferencias entre sujetos y culturas sean eliminadas en favor del establecimiento de un modelo que implanta un modo de pensar y actuar supuestamente superior y adecuado.

La implantación de un modelo como ése ha hecho que no solo se destruyan grupos étnicos, sino que las minorías se marginen. Por eso es un modelo que ha perdido fuerza, apareciendo el multiculturalismo como el más adecuado en nuestra época para defender las identidades y la diversidad de las culturas y los sujetos. El multiculturalismo defiende la independencia de las naciones, valora las minorías y disminuye los conflictos.

Pero el multiculturalismo no significa aislamiento, “nada está mas alejado del multiculturalismo que la fragmentación del mundo en espacios culturales, nacionales o regionales extraños los unos a los otros” , ya que esto contribuye a que se den poderes comunitarios en los que se da el odio a lo extranjero y cierto estancamiento cultural. Por eso el multiculturalismo “procura combinar la diversidad de las experiencias culturales con la producción y la difusión masiva de los bienes culturales” .

Es por ello que Touraine dice que la respuesta a la pregunta ¿cómo podemos vivir juntos?, debe buscarse en la combinación de la igualdad y la diversidad; debe haber una “asociación de la democracia política y la diversidad fundadas en la libertad del Sujeto” . En una sociedad multicultural debe existir un principio igualitario y de libertad que permita la comunicación entre individuos y culturas diferentes, pero ese principio no debe gobernar la vida y organización de las personas por considerarse superior; es un principio que propone respetar la libertad de todos respetando la identidad.

El multiculturalismo se opone a la imposición de modos de vida y también al aislamiento de las culturas: “Todo lo que incrementa la distancia entre sociedad y comunidades, entre economía globalizada y culturas aisladas, tiene efectos negativos, conduce a la destrucción de las culturas, la violencia social y las aventuras autoritarias” . De ahí que deba haber una combinación entre la unidad y la diversidad, entre el intercambio y la identidad, si se quiere que la identidad y la libertad de los sujetos y las culturas sean los móviles principales de una sociedad que debido principalmente a la globalización está enfrentando a individuos y culturas diferentes. Todo esto para no correr el riesgo de que se produzcan luchas culturales o perdidas de identidades.

Así, una sociedad multicultural separa los valores culturales diversos, pero a la vez los vincula mediante

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