La Paradoja Ensayo.

La Paradoja: Un relato sobre la esencia de liderazgo es un libro escrito por el autor James C. Hunter, el contexto del libro es sobre un director de múltiples organizaciones llamado John Daily, un hombre bien posicionado económica y laboralmente, con una familia formada y en pocas palabras “vida resuelta”; más tarde una crisis en su compañía cae sobre sus organizaciones y sobre su rol como director o más bien “líder” de ellas, John ya no satisface las necesidades de los integrantes de las organizaciones y no sabe qué hacer para enfrentar esto solo y acude a un monasterio cristiano en donde acude al hermano Simeón, (cuyo verdadero nombre es Leonard Hoffman antes de ser un monasterio), para que sea su guía en su problema y pueda enseñarle cómo ser un líder y resolver problemas suyos con los demás. Son 7 días que transcurren en la historia del libro, son 7 capítulos que encontramos en el libro, un capítulo por cada día de enseñanzas para John.

John confió plenamente en Simeón, ya que en sus rituales espirituales religiosos (bautizo, boda etc.) en los versículos que los pastores le leían solía escuchar el nombre de Simeón aparte de que en sus sueños escuchaba una voz que le decía que vaya a buscarlo y lo escuche. Y a pesar de que Simeón era un veterano de guerra retirado y después empresario líder, era el destino de John encontrarse con él, ya que le enseñaría lo que más utilizaría en su vida.

En el primer día de clases de John, (capítulo 1 llamado “Las definiciones”), Simeón primero le dice el principal significado de liderazgo, que dice que es el arte de influir sobre la multitud para que trabaje con entusiasmo en la consecución de objetivos en pro del bien común. Para Simeón ser líder es un arte ya que forma parte de una serie de habilidades que cualquier ser humano puede aprender y desarrollar, pero solamente si quiere, ya que uno elige si quiere liderar o ser liderado, y nos dice que la oportunidad de liderar se da cuando dos o más personas tienen el mismo propósito en común, pero conlleva una gran serie de características que debe poseer un líder que más adelante mencionaré.

Asimismo, la influencia es otra característica esencial del liderazgo que hace referencia al acto de conseguir que alguien haga nuestra voluntad a través de la autoridad y no del poder. Porque la autoridad es el arte que describe el carácter personal y la influencia que se ha forjado sobre la gente a realizar algo voluntariamente, mientras que el poder es una capacidad que deteriora las relaciones humanas e impide la realización eficaz de todo objetivo y su acción no es voluntaria. Para propagar autoridad sobre la gente un líder debe practicar ciertos comportamientos como el ser ejemplar, comprometido, entusiasta, respetuoso, observador, ser digno de tener la confianza de los demás, estar al pendiente de estos y ser humanista. Por último, la sesión del primer día termina con la indicación sobre la importancia de llevar a cabo las tareas asignadas fomentando las relaciones humanas, lo cual genera la confianza necesaria para mantener una buena relación y evita consecuencias indeseables.

En la segunda clase (capítulo 2 llamado “El paradigma antiguo”) Simeón se concentró en hablarles a sus 6 alumnos sobre el cambio en los paradigmas, definiendo este término como un patrón psicológico que las personas tenemos como principios que nos orientan a la vida. Simeón explica que, en el paradigma viejo, el presidente está en lo más alto de la pirámide, imponiendo su poder ante todos. Mientras que en el nuevo paradigma volteamos la pirámide y situamos al cliente en la cima.

En el nuevo paradigma podemos observar que el cliente de estar hasta abajo paso a estar hasta la cima, esto se debe a que los clientes son los que tienen más relación con los empleados de una empresa. En ese antiguo paradigma los empleados están más pendientes en satisfacer al presidente que en tener contento al cliente. Por lo que el nuevo paradigma sugiere invertir la pirámide, para que el presidente, vicepresidentes, mandos intermedios, supervisores y empleados se enfoquen en satisfacer las legítimas necesidades del quien ahora se encuentra en lo más alto, el cliente. Esto nuevo modelo no solo obliga a todos los mandos de la empresa asumir una nueva mentalidad, sino que también establece que el papel del líder no es mandar y dominar al de la casilla de abajo sino servir a los demás. En consecuencia, la pirámide invertida simboliza el modelo de liderazgo de servicio. Simeón explica la gran paradoja, de que queremos mandar, tenemos que servir.

En el día tres, (capítulo 3 llamado “El modelo”), John entiende el modelo de liderazgo, una pirámide invertida que simboliza el liderazgo y servicio; fundamentando que todo liderazgo comienza por la voluntad de ejercerlo, describe la capacidad que tiene el ser humano de elegir que hacer para que sus actos sean consecuentes con sus intenciones. Con esa misma voluntad nos conlleva a amar, que describe el comportamiento y elección a quienes nos dirigimos (no el afecto emocional); por tener ese comportamiento dicho de un líder vamos al siguiente nivel que es servicio y sacrificio, que cuando se realiza estamos demostrando autoridad entre los demás. Cuando tenemos todo esto forjado es cuando alcanzamos el nivel de liderazgo.

En el capítulo 4 “El verbo” en el cuarto día de clases Simeón les escribe en la pizarra

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