La Educacion En El III Reich
cami3133 de Marzo de 2013
5.220 Palabras (21 Páginas)473 Visitas
La educación en el III Reich
por Bernhard Rust (Ministro de Ciencia, Educación y Cultura Popular)
El siglo XIV fue testigo de tal progreso educativo en el campo del refinamiento intelectual que podría ser justamente descrito como el siglo de la educación. Alemania jugó un papel importante en este desarrollo y su sistema educativo fue reconocido universalmente como particularmente eficiente. Por ello muchos extranjeros utilizaron las facilidades educativas que Alemania ofrecía. Si ahora vemos que, a pesar de estos espléndidos logros, el III Reich ha dispuesto realizar un cambio radical en el sistema de educación, debemos estar seguros que ha sido debido a muy buenas razones.
Desde luego, existe una doble evidencia que demuestra que algo estaba equivocado en la educación. En primer lugar, el alto grado de cultura popular no había logrado la protección del pueblo alemán contra el venenoso efecto del marxismo y otras falsas doctrinas. Grandes masas del pueblo eran víctimas de éstas, mientras que otras secciones -más especialmente aquellas de más alta educación-, no habían sido capaces de elevar un efectivo soporte contra la propaganda de este veneno. Se debían haber prevenido los acontecimientos de 1918 y el periodo subsiguiente de desintegración nacional.
En segundo lugar, un cuidadoso estudio de la situación demuestra que el pueblo alemán es sensible y está dotado de tanto sentimiento nacional como cualquier otro. Por consiguiente, la disminución temporal de su anterior elevado nivel no puede haber sido resultado de ninguna innata inferioridad, sino que se debe buscar la razón en un fatal sistema de educación el cual, a pesar de sus altos logros intelectuales, tendía a dañar el sano espíritu de la nación, la energía de sus hombres y su sentido del juicio, y producir egoismo y un deficiente sentido de la solidaridad nacional. Además, era obvio que ciertos elementos, que intentaban asegurarse privilegios personales para sí mismos al injuriar a las fuerzas sanas de la nación, habían tenido éxito en conseguir una indudable prominencia en la vida pública.
Por lo tanto, el Nacional Socialismo se apresuró a averiguar y alejar las causas que habrían producido tan insatisfactoria condición, y abrir nuevas fuentes capaces de ser utilizadas para la regeneración. El Führer, en su libro "Mi Lucha", había indicado claramente la ruta que debía seguirse.
Dos causas principales habían contribuido a estos resultados insatisactorios.
Primera: Aunque la capacidad intelectual de los jóvenes había sido excelentemente practicada y aunque estaban enteramente cualificados para sus vocaciones, la importancia del conocimiento por el conocimiento había sido estimada excesivamente, mientras que la educación físcia y la formación del carácter y de la voluntad habían sido descuidados. Hablando metafóricamente, a la juventud se le habría ofrecido agua cristalina para beber, pero se le había quitado los sanos constituyentes minerales que ésta contiene. Esta interferencia había causado mucho daño a la salud popular.
Segunda: se había dado excesiva importancia al individuo como tal, mientras que casi se había olvidado que cada individuo es al mismo tiempo un miembro de la comunidad racial, que sólo en esta dimensión puede perfeccionar sus poderes hasta su máxima extensión y que es su labor el trabajar para el bien de esta comunidad. Tal forma natural de comunidad racial como es la familia, el clan, la tribu y la nación (naturales porque están basados en los lazos de sangre) o no recibía la atención debida, o estaba desintegrada por un excesivo individualismo o reemplazada por comunidades ficticias artificiales. Tal actitud mental permitió a los dirigentes judíos y a otras personas animadas por motivos egoistas, o por ideas internacionalistas y antirraciales, obtener una prominente influencia en todas las esferas de la vida nacional y acceso a las altas oficinas del estado, así como envenenar los sanos sentimientos de la nación por medio de su política educativa.
El propósito de toda educación es preparar a las generaciones que suben para las funciones que más tarde desarrollarán como verdaderos representante de la nación y del Estado en un sentido cultural y político. En conformidad con las enseñanzas de la historia y las leyes de ciencia biológica y racial, es necesario practicar las facultades del cuerpo, el carácter y la voluntad tanto como el intelecto. El equilibrio perdido debe ser restaurado; mejor aún, la armoniosa coexistencia de todas estas facultades debe ser mantenida y desarrollada en lugar de ser destruida. El ser y permanecer sano y fuerte se ha convertido en la ley fundamental que gobierna a la juventud alemana y la primera y más importante labor de la educación es llevarla a efecto. La salud y la fuerza, sin embargo, son impensables sin una pureza racial y la búsqueda de un perfecto tipo racial.
El conseguir altos niveles intelectuales ciertamente continuará como una urgencia sobre la gente joven, pero serán enseñados al mismo tiempo que sus logros deben ser para el beneficio de la comunidad nacional a la que pertenecen. Como una consecuencia claramente formulada por las leyes de Nuremberg, los maestros no alemanes debían dejar las escuelas y se les proveía dentro de lo posible de escuelas propias. De esta forma, los instintos naturales de la chicas y jóvenes alemanas están defendidos, y los jóvenes conocen muy bien su labor de mantener su pureza racial y legarla a futuras generaciones. Y como la mera enseñanza de estos principios no es suficiente, está constantemente suplementada, en el estado nacionalsocialista, por las oportunidades para lo que podría ser llamada "vida en comunidad". Entendemos por estos términos viajes escolares, campamentos escolares, hogares en vecindarios rurales y aplicaciones similares del principio social para la vida de escuelas y escolares.
La historia insiste en que cada deterioración biológica racial coincide con el crecimiento de grandes ciudades, que esto último ejerce un efecto paralizante sobre la vida de la comunidad racial y que la fuerza de una nación está arraigada a sus elementos rurales. Nuestro sistema nacionalsocialista de educación presta la debida atención a estas importantes consideraciones y hace todos los esfuerzos para llevar los jóvenes de la ciudad al campo, a la par que se les imprime la inseparable conexión entre la fuerza racial y una sana vida al aie libre.
La reforma sistemática del sistema educativo de Alemania empezó inmediatamente después de la subida al poder del Nacional Socialismo y recibió un gran estímulo cuando, el 1 de Mayo de 1934, se estableció el Departamento Nacional de Educación.
Los pasos que se han dado comprenden la reorganización interna de las enseñanzas escolares de acuerdo con los principios expuestos, y nuevos métodos para la práctica y remodelación de los tipos existentes de escuelas.
Si estos amplios cambios han de materializarse, los maestros han de ser capaces de introducirlos. Esta labor ha sido emprendida por el Departamento en unión de la Asociación Nacionalsocialista de maestros (N.S. Deutscher Lehrerbund). Numerosos cursos, campos y comunidades de trabajo han sido preparados para proveer la instrucción necesaria, que incluye la enseñanza de la filosofía del Nacional Socialismo en adición a los objetivos estrictamente educativos. El llevar a cabo uniformemente este trabajo ha sido confiado al Instituto Central para la Educación e Instrucción (Zentralinstitut für Erzieehung und Unterricht). En los dos campos de formación mantenidos por el Instituto, se dan tales instrucciones a los prominentes educadores -ambos hombres y mujeres- durante muchas semanas; y al dejar los campos, están encargados de diseminar los nuevos conocimientos adquiridos entre sus colegas a través de los medios de las comunidades trabajadoras. Además, las varias autoridades educativas organizan frecuentemente conferencias con este mismo propósito, mientras campos especiales organizados por el N.S. Lehrerbund proveen instrucciones en los aspectos políticos del Nacional Socialismo.
Estos arreglos pretenden capacitar a las antiguas generaciones para que apliquen a su trabajo los principios del Nacional Socialismo. El Gobierno, desde luego, también ha introducido alteraciones fundamentales en los métodos de formación de los jóvenes maestros. Se requieren a los maestros de las escuelas elementales que asistan a algunos de los colegios de formación (Hochschulen für Lehrerbildung) donde reciben instrucción sobre temas científicos y educativos, y donde la vida está basada en los principios de camaradería. La asistencia a estos colegios, la mayoría de los cuales están asentados fuera de las grandes ciudades, es también obligatoria para profesores de escuelas intermedias y superiores como preliminar a sus estudios en otras instituciones donde reciben la clase de formación especial que necesitan. Estas disposiciones aseguran que una cierta uniformidad gobierne la formación de maestros de todas clases. Debo añadir que los cursos de estudios y la regulación para los exámenes de maestros, más particularmente aquellos de las escuelas superiores, han sido revisados en lineas similares.
La reorganización interna del sistema educativo fue introducida por medio de varios decretos fundamentales. En 1933 se anunció que toda educación debía estar fundamentada en los principio de la ciencia biológica y racial, con la cual -en obediencia al deseo del Führer-, todos los escolares deben estar familiarizados. Se emitieron detalladas regulaciones para dar un efecto práctico a estos avisos.
Sobre la política educativa del Nacional Socialismo se puede recoger información
...