La edad de oro de la República Holandesa

La Edad de Oro de la República Holandesa fue un período de innovación y prosperidad económica que abarcó desde finales del siglo XVI hasta principios del siglo XVIII. Durante ese tiempo, los países bajos, experimentaron un crecimiento económico sin precedentes, convirtiéndose en una de las naciones más ricas y con bienestar social de Europa.

Según el autor la causa de este crecimiento es la combinación de factores culturales, políticos y económico, además de la importancia del comercio, la industria y la banca en el modelo de vida de los holandeses. Por lo cual veremos en este breve ensayo argumentativo de manera clara y contundente cada una de las causas y sus efectos en el gran crecimiento de la época y resolveremos en realidad a que se debió este progreso económico.

Los Países Bajos durante el siglo XVII se caracterizaron por ser un centro de comercio importante en Europa. La ciudad de Ámsterdam se convirtió en uno de los principales puertos del continente y esto permitió a los comerciantes y empresarios florecer. La naturaleza abierta y tolerante de la sociedad holandesa, permitió la llegada de una gran cantidad de inmigrantes, lo que a su vez creó un ambiente de diversidad y tolerancia. Estos factores culturales ayudaron a los holandeses a adaptarse mejor a los mercados internacionales y a tener una ventaja competitiva en el comercio.

Pero ¿Cuáles son los factores más importantes que propiciaron el crecimiento económico de Holanda? ¿Y qué factores culturales y políticos ayudaron? A continuación, veremos los que para mí, fueron los más importantes en este proceso.

Primero la industria textil, en particular, fue una fuente importante de riqueza. Pero también cabe destacar que el autoempleo y la necesidad de intercambio de bienes y servicios de los holandeses ayudó a crear una sociedad con flujo de dinero efectiva, casi dos tercios de la sociedad de aquel tiempo se dedicaban a labores de granjas o producción de artículos artesanales que hacían desde sus hogares, entre estos productos destacan el queso, la mantequilla, el vino y la cerveza.

 Un factor clave para el crecimiento económico fue su posición geográfica, ya que muchos de los movimientos que se hacían en Europa se debían gracias al puerto de Ámsterdam y Roterdam, en donde se intercambiaban semillas, granos, alimentos, ropa y hasta obras de arte.

 La innovación y la tecnología también jugaron un papel importante en el desarrollo industrial de los Países Bajos. Los holandeses fueron líderes en la construcción de edificios de alto valor económico como molinos de viento y en la utilización de la energía eólica para la producción de alimentos y la manufactura. Además, los holandeses también innovaron en el desarrollo de construcción de nuevas obras que beneficiarían al continente Europeo.

El gobierno y las leyes mercantiles también ayudaron a crear una mejor sinergia en el ámbito económico, ya que se promovía el espíritu emprendedor y el estudio de nuevos conocimientos y técnicas y potenciaran las actividades empresariales y que incentivaran a empresarios y gente adinerada a invertir en nuevos proyectos de agricultura, industria y servicios.

La educación y la unión familiar pudo influir en el progreso de familias de bajos recursos, ya que se promovía el financiamiento cooperativo entre padres, hermanos, tíos y sobrinos quienes trabajaban en conjunto para crear una sociedad comercial. De igual manera los parientes con dinero depositaban su confianza y su dinero en los emprendimientos de sus familiares, a fin de amortizar los riesgos comerciales de tener el dinero guardado, entonces pedían un rendimiento fijo por el préstamo. El matrimonio y las amistades largas permitían a los holandeses crear relaciones de confianza, por lo cual el capital de inversión siempre era redituable para ambas partes, el prestamista y el beneficiario.  

Los países bajos empleaban contratos empresariales, en donde especificaban la duración, propósitos, limitaciones y viabilidades, así como los términos y condiciones lo cual creaba seguridad entre los socios. Por ejemplo, los parientes adinerados que no confiaban o querían prestar dinero, creaban contratos en donde ponían de por medio propiedades, o mercancía de su pariente artesano o agricultor, además concedían créditos de largo plazo, pero también la parte acreedora debía ser honesto y cuidaría la mercancía o propiedad con extremo cuidado par evitar problemas en el futuro.

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