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Las escuelas Lancasterianas en la ciudad de Мéxico


Enviado por   •  2 de Octubre de 2014  •  Ensayos  •  2.057 Palabras (9 Páginas)  •  276 Visitas

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TKHSKJTHSKJRHCLAS ESCUELAS LANCASTERIANAS EN LA CIUDAD DE MÉXICO.

En 1822 cinco hombres prominentes de la ciudad de México fundaron una asociación filantrópica con el fin de promover la educación primaria entre las clases pobres. Llamaron a su organización Compañía Lancasteriana en honor de Joseph Lancaster, personaje ingles que había popularizado, a principios del siglo, una nueva técnica pedagógica por la cual los alumnos más avanzados enseñaban a sus compañeros. El método llamado sistema de enseñanza mutua, o sistema lancasteriano, se difundió con rapidez.

En México, aún antes de la fundación de la Compañía Lancasteriana, la enseñanza mutua se practicaba por algunos maestros particulares y en las escuelas gratuitas de algunos conventos. Pero la Compañía Lancasteriana fue la que ganó para el método la atención y el apoyo del gobierno y el público, e impulsó el establecimiento de escuelas de enseñanza mutua en toda la nación. Tan reconocida fue la fama de la enseñanza recíproca y el prestigio de los miembros de la asociación lancasteriana, que veinte años después de su fundación, en 1842, el gobierno nacional entregó a la Compañía Lancasteriana la Dirección de la Instrucción Primaria de toda la República Mexicana.

Siguiendo el método de Lancaster, un solo maestro podría enseñar de 200 hasta 1000 niños, lo que bajaba el costo de la educación. Los alumnos eran divididos en pequeños grupos de diez; cada grupo resibía la instrucción de un monitor o instructor, que era un nuño de mas edad y mas capacidad, previamente preparado por el director de la escuela.

Durante las dos décadas siguientes, el sistema lancasteriano se extendió a muchas escuelas particulares y fue declarado método oficial para las escuelas gratuitas municipales.

La escuela, ubicada en un edificio colonial, tenía uno de sus más grandes salones convertido en aula de clase donde cabían entra 100 y 300 niños. En fila, de frente al escritorio del maestro, se sucedían, una detrás de otra, largas mesas con bancos de madera para diez alumnos en cada banco.

Además de "monitores particulares", había "monitores generales" y "de orden". Los monitores generales tomaban la asistencia, averiguaban la razón de la ausencia de un alumno, cuidaban los útiles de la enseñanza y los de orden administraban la disciplina.

Todos los monitores eran supervisados por el director de la escuela.

Al entrar a la escuela en la mañana, el niño se formaba en línea con sus compañeros de clase para la inspección de cara, manos y uñas. Al toque de una campanita de bronce, los niños marchaban al aula y se distribuían en las mesas por clases. Para escribir se usaban plumas de ave.

La idea clave del sistema lancasteriano fue que el niño debía ser constantemente activo.

El horario de la mayor parte de las escuelas era de 8:00 a las 12:00 y de las 2:00 a las 5:00.

Terminadas las clases, los niños rezaban de rodillas y luego al compás de sucesivos toques de la campanita se paraban.

Una vez fuera de los confines de la escuela, el niño quedaba sujeto a las influencias y condiciones de su familia.

La pobreza de los niños era la razón de que con frecuencia llagaran tarde a la escuela o estuvieran ausentes.LAS ESCUELAS LANCASTERIANAS EN LA CIUDAD DE MÉXICO.

En 1822 cinco hombres prominentes de la ciudad de México fundaron una asociación filantrópica con el fin de promover la educación primaria entre las clases pobres. Llamaron a su organización Compañía Lancasteriana en honor de Joseph Lancaster, personaje ingles que había popularizado, a principios del siglo, una nueva técnica pedagógica por la cual los alumnos más avanzados enseñaban a sus compañeros. El método llamado sistema de enseñanza mutua, o sistema lancasteriano, se difundió con rapidez.

En México, aún antes de la fundación de la Compañía Lancasteriana, la enseñanza mutua se practicaba por algunos maestros particulares y en las escuelas gratuitas de algunos conventos. Pero la Compañía Lancasteriana fue la que ganó para el método la atención y el apoyo del gobierno y el público, e impulsó el establecimiento de escuelas de enseñanza mutua en toda la nación. Tan reconocida fue la fama de la enseñanza recíproca y el prestigio de los miembros de la asociación lancasteriana, que veinte años después de su fundación, en 1842, el gobierno nacional entregó a la Compañía Lancasteriana la Dirección de la Instrucción Primaria de toda la República Mexicana.

Siguiendo el método de Lancaster, un solo maestro podría enseñar de 200 hasta 1000 niños, lo que bajaba el costo de la educación. Los alumnos eran divididos en pequeños grupos de diez; cada grupo resibía la instrucción de un monitor o instructor, que era un nuño de mas edad y mas capacidad, previamente preparado por el director de la escuela.

Durante las dos décadas siguientes, el sistema lancasteriano se extendió a muchas escuelas particulares y fue declarado método oficial para las escuelas gratuitas municipales.

La escuela, ubicada en un edificio colonial, tenía uno de sus más grandes salones convertido en aula de clase donde cabían entra 100 y 300 niños. En fila, de frente al escritorio del maestro, se sucedían, una detrás de otra, largas mesas con bancos de madera para diez alumnos en cada banco.

Además de "monitores particulares", había "monitores generales" y "de orden". Los monitores generales tomaban la asistencia, averiguaban la razón de la ausencia de un alumno, cuidaban los útiles de la enseñanza y los de orden administraban la disciplina.

Todos los monitores eran supervisados por el director de la escuela.

Al entrar a la escuela en la mañana, el niño se formaba en línea con sus compañeros de clase para la inspección de cara, manos y uñas. Al toque de una campanita de bronce, los niños marchaban al aula y se distribuían en las mesas por clases. Para escribir se usaban plumas de ave.

La idea clave del sistema lancasteriano fue que el niño debía ser constantemente activo.

El horario de la mayor parte de las escuelas era de 8:00 a las 12:00 y de las 2:00 a las 5:00.

Terminadas las clases, los niños rezaban de rodillas y luego al compás de sucesivos toques de la campanita se paraban.

Una vez fuera de los confines de la escuela, el niño quedaba sujeto a las influencias y condiciones de su familia.

La pobreza

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