ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Siglo Xix

zandri18 de Noviembre de 2013

3.501 Palabras (15 Páginas)398 Visitas

Página 1 de 15

SIGLO XIX

INTRODUCCIÓN Histórico

Suele situarse el punto de partida de la Edad Contemporánea en el año 1789, fecha del inicio de la Revolución Francesa.

El siglo XIX se inaugura bajo el influjo de la Revolución Francesa y las conquistas napoleónicas. El Congreso de Viena (1815) supuso en principio, el triunfo de la Restauración y la reconstrucción del mapa de Europa. Pero el equilibrio no se restablece. Las revoluciones de 1820, 1830, 1848, 1871 se inician en Francia (excepto la de 1820, en España) y se extienden por toda Europa. Los impulsos proceden del liberalismo, de los movimientos democráticos, el socialismo, y el anarquismo. Al mismo tiempo otro movimiento recorre el continente: el nacionalismo, que hacia fin de siglo deriva, en algunos casos, en imperialismo colonialista. Las transformaciones económicas y sociales producidas por la extensión de la Revolución Industrial contribuyen de forma definitiva a un cambio radical del panorama histórico.

REVOLUCIÓN FRANCESA

Fue la primera gran revolución burguesa europea, promovida por el ascenso de una burguesía que aspiraba a las tareas de gobierno y se encontraba sojuzgada por la rigidez estamental del Antiguo Régimen. Y como nada hay eterno, tras la toma de la Bastilla el Antiguo Régimen cayó bajo la doble presión de la burguesía y de las clases populares. Entre 1789 y 1791 la Asamblea Constituyente transformó radicalmente las instituciones políticas francesas: fueron anulados los privilegios, derechos feudales y señoriales y las correspondientes obligaciones y pagos. La Constitución de 1791 supuso el establecimiento de los principios fundamentales del nuevo régimen. Partiendo de

Tras la derrota de napoleón, Inglaterra, Rusia, Austria, Prusia y Francia, acuerdan una reorganización del mapa de Europa y la Restauración del Antiguo Régimen (absolutismo, tradicionalismo y reconocimiento del papel del clero) en el Congreso de Viena en 1815.

Este nuevo orden se impuso sin tener en cuenta la opinión pública, lo que dio paso a un fervor nacionalista y liberal que, junto con el desarrollo industrial, provocó el surgimiento de movimientos revolucionarios de 1820, 1830 y 1848.

LAS REVOLUCIONES LIBERALES:

Revoluciones de 1820. Se inician en Alemania y España, ambas se alzan contra el Antiguo Régimen restaurado, y exigen reformas liberales. En las universidades alemanas, se lucha por una monarquía constitucional. En España Riego se protagoniza un pronunciamiento militar contra Fernando VII e instituye el trienio liberal. Interviene la Santa Alianza: los Cien Mil Hijos de San Luís, liderados por el Duque de Angulema, y aliados con los realistas españoles,imponen el absolutismo en 1823. Sin embargo, el clima revolucionario se extiende a Portugal (que mantendrá el régimen liberal), Piamonte, Nápoles y Grecia (que se independiza del Imperio Otomano). En estos mismos años , la América española continúa luchando por su emancipación y los nuevos Estados norteamericanos introducen instituciones liberales en su organización política.

Revoluciones de 1830: una nueva oleada revolucionaria de mayor envergadura asola Europa; el punto de partida de estas agitaciones es el alzamiento de orleanistas y republicanos en París en julio de 1830; triunfan los primeros, los cuales hacen abdicar a Carlos X, último rey francés de la casa de Borbón y proclaman a Luis Felipe de Orleáns como rey de Francia.

Desde Francia la revolución se extiende a Bélgica, que obtiene la independencia de Holanda, con la que formaba hasta entonces el reino de los Países Bajos. Los Estados centrales de la confederación germánica serán los siguientes en sufrir la oleada revolucionaria, seguidos de Polonia y los pequeños Estados de la Italia central.

Las revoluciones de 1830 acaban dando el triunfo al liberalismo en la Europa Occidental. El siguiente ciclo revolucionario, en 1848, liberalizará los regímenes de Europa Central.

La Revoluciones de 1848. Es el tercer golpe contra la Restauración. La novedad respecto a las de los años 30 es el cambio de agentes revolucionarios: ya no son las clases ilustradas las que promueven el cambio, sino que entran en la escena histórica los sindicatos obreros. Su presencia y la evolución de los otros grupos hace que los ideales sean distintos: no se lucha por una constitución liberal, sino por la democracia, el sufragio universal, la libertad de prensa, etc…

La revolución se extendió por toda Europa (Nápoles, Milán, Roma, Venecia, Berlín, Viena, Budapest). Marx, intervino activamente en este período revolucionario. Es justo en el 1848 cuando en Londres redacta junto a Engels el Manifiesto del Partido Comunista, que representa una denuncia al capitalismo emergente, y un llamamiento a la unidad obrera por una transformación radical de la sociedad.

La Comuna de París: Tras la derrota en Francia en la guerra franco-prusiana, tiene lugar en Paris la primera experiencia de gobierno obrero (marzo-mayo de 1871). Ante el vacío de poder se organiza en París una revolución de carácter socialista. Se celebran elecciones en los distritos parisinos y se organiza una ASAMBLEA COMUNAL en la que participan grupos proudhonianos e internacionalistas (bakuninistas y algunos marxistas). El ejército venido de Versalles aplastó finalmente el intento revolucionario el 28 de mayo, en la bien llamada Semana Sangrienta: 30.000 muertos, muchos más heridos, y tal vez hasta 50.000 ejecutados más tarde o hechos prisioneros; 7.000 personas fueron desterradas a Nueva Caledonia. Para los presos hubo una amnistía general en 1889.

LIBERALISMO, SOCIALISMO, ANARQUISMO

Son las principales ideologías políticas del siglo XIX. La relación entre ellas ha sido variada: unas veces se han unido contra la Restauración, otras se han combatido entre si. El liberalismo económico, claro defensor del capitalismo, ha sido combatido por el anarquismo y el socialismo. Socialismo y anarquismo a su vez se han combatido mutuamente porque, para los segundos, los socialistas no eran lo suficientemente revolucionarios y radicales.

El liberalismo social defiende la no intromisión del Estado o de los colectivos en la conducta privada de los ciudadanos y en sus relaciones sociales no-mercantiles, admitiendo grandes cotas de libertad de expresión y religiosa. El liberalismo económico defiende la no intromisión del Estado en las relaciones mercantiles (reduciendo los impuestos a su mínima expresión y eliminando cualquier regulación sobre comercio, producción, condiciones de trabajo, etc.), sacrificando toda protección a "débiles" (subsidios de desempleo, pensiones públicas, beneficencia pública) o "fuertes" (aranceles, subsidios a la producción, etc.).

El anarquismo (Bakunin, Kropotkin) : es una doctrina política que se opone a cualquier clase de jerarquía, tanto si se ha consolidado por la tradición o el consenso como si se ha impuesto de forma coactiva. Los anarquistas creen que el mayor logro de la humanidad es la libertad del individuo para poder expresarse y actuar sin que se lo impida ninguna forma de poder, sea terrena o sobrenatural, por lo que es básico abatir todo tipo de gobierno, luchar contra toda religión o secta organizada, en cuanto que éstas representan el desprecio por la autonomía de los hombres y la esclavitud económica.Combatir al Estado como entidad que reprime la auténtica libertad económica y personal de todos los ciudadanos se convierte en una necesidad inmediata y la desaparición del Estado se considera un objetivo revolucionario a corto plazo

El socialismo no es una corriente política única: el socialismo utópico, de Fourier, Owen, Saint Simon, al hilo de la degradación humana que suponía la extensión de la Revolución Industrial, proponían la necesidad de reformar la sociedad de modo pacífico. Fueron criticados por los socialistas partidarios del materialismo científico, Marx y Engels, que por el contrario proponían no reformas, sino una revolución basada en un análisis exhaustivo del sistema capitalista capaz de transformar la estructura económica de la sociedad.

LOS NACIONALISMOS.

Durante el siglo XIX se propagó por toda Europa. Muchas de las políticas europeas del siglo XIX pueden ser vistas como luchas entre antiguos regímenes autocráticos y nuevos movimientos nacionalistas. En algunos casos el nacionalismo tomó una ideología liberal y contra la monarquía, mientras que en otros los movimientos nacionalistas fueron apoyados por regímenes monárquicos conservadores. Durante dicho siglo, los viejos estados plurinacionales (como el Imperio Austrohúngaro) comenzaron gradualmente a agrietarse, y varios estados localizados fueron absorbidos por entidades nacionales mayores, como Italia (unificada por Garibaldi bajo el mandato del rey Victor Manuel II en 1870) Alemania (unificada entorno a Prusia tras la guerra franco-prusiana en 1871, siendo canciller Otto Von Bismarck). Otros ejemplos de nacionalismo son Grecia, Irlanda y los países de América del Sur.

EL COLONIALISMO.

El colonialismo es un fenómeno muy antiguo, sin embargo el del siglo XIX tiene como causa principal la dinámica del capitalismo moderno, en la que se subraya la necesidad europea de encontrar materias primas y salidas comerciales para su excedente de capital. Por otra parte, los intereses estratégicos e internacionales generalizaron la tendencia de los dirigentes europeos a utilizar las colonias como fichas en un tablero mundial de ajedrez.

Quizás el más notable es el de

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (22 Kb)
Leer 14 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com